CENIZAS INSEPULTAS

♡

Al llegar divisó una casa enorme, antigua por lo que pudo ver, pero eso no le quitaba la elegancia ni la sobriedad que mostraba su fachada, con bastantes ventanas en todas las plantas, en el frente se podía ver un jardín basto y pulcro que terminaba por adornarla; apenas dejó de apreciar el lugar una imagen brotó en su cabeza, era una especie de picnic en el jardín y de frente solo pudo ver a Potter.

Un aroma de añoranza lo trajo de vuelta a la realidad, Potter ya había empezado a andar y ahora lo esperaba un poco al frente, comenzó a caminar a pasos apresurados para alcanzarlo y después se dirigieron a la entrada de la casa. El aroma del omega comenzó a sentirse pesado y por instinto el suyo se desplego.

-¿Sucede algo?- preguntó sin ver al omega.

-Nada

-¿Vamos a jugar a las adivinanzas?- habló tranquilamente pero el moreno detuvo su andar.

-No es eso- los ojos de Potter se clavaron en él, se sorprendió al notar el brillo en ellos, incluso ya estando obscuro parecían desafiar toda lógica y resplandecer- escucha, nosotros... nuestra familia es muy unida aunque ellos saben de la situación, no he podido persuadirlos- al decir lo último desvió la mirada y algo en ese gesto le aseguró que más bien no había querido hacerlo.

-Te han preparado una pequeña bienvenida- continuo -así que nos están esperando adentro, se supone que es sorpresa pero mejor prevenir- volvió a caminar y Draco lo siguió, se preguntaba que de malo tenía que celebraran con su cachorro, aparentemente eran una familia pequeña.

Al entrar a la casa lo primero que vio fue el amplio vestíbulo adornado con muebles, unas escaleras que parecían llegar al cielo, amplias y adornadas de principio a fin, estaba sumamente ordenado, con detalles a cada lado que mirabas, no sabría hacia donde comenzar a caminar si estuviera solo, el techo estaba más alto de lo normal y cada paso que daba resonaba en una madera que no sabría decir su edad, todo era fino, elegante y pulcro. De repente la quietud se terminó por un ruido estruendoso, formado por un batallón de gente que apareció de la nada gritando un bienvenido.

Cientos de cabelleras rojas, rostros que no imaginó en su vida ver en su casa, sus amigos, Alnair y su madre. Se comenzó a inquietar y entre el tumulto de gritos piensa que no es demasiado tarde para salir de ahí y fingir que ha pasado una noche más en el hospital. Antes de razonarlo a mayor profundidad recibe una palmada en la espalda, al girar se encontró con los ojos de Potter desafiantes.

-Vamos, será divertido o... ¿estas asustado?- le retó con tono juguetón.

-Ya quisieras- respondió para después empezar a sonreír.

☁ ☁ ☁ ☁ ☁ ☁

Si a Draco le hubieran preguntado cómo sentía la fiesta hace unas horas hubiera usado una sola palabra "caos", todos los Weasley de aquí para allá abrazándole y dándole palabras de aliento; con Ronald intentando jugar con él, con Granger comentando cuan preocupada había estado, gesto que solo Merlin sabía cuánto lo descolocaba. Sus amigos estando en esa misma sala conversando, planeando la siguiente salida familiar.

Con su madre sonriendo de la forma en la que no sonreía desde antes de la guerra, incluso en algún momento se había levantado para jugar con los niños; que eran un salvaje ejército de unos 15 infantes, (a los que le habían presentado y descrito quien era de quien) corriendo y jugando, no las contó pero estaba seguro de que al menos unos 7 u 8 objetos terminaron rotos esa noche

Y sin embargo si le hubieran preguntado al final de la fiesta, también hubiera usado una sola palabra pero esta vez sería "calidez"; todo lo que se respiraba era un ambiente cálido, los unos apoyándose en los otros y de alguna manera se sentía como si hubieran hecho un enorme fuerte y los hubieran metido a Potter, a Alnair y a él ahí, para cuidarlos.

La descripción era rara lo sabía pero era la forma más sencilla que encontraba de explicar todo, cada detalle que recibió fue totalmente dado de corazón por muy chiquito que fuera, como el pequeño dibujo que le dio el menor de los niños de Pansy y Granger, Fabián si mal no recordaba, en donde le describió detalladamente una escena que él consideraba indispensable recordar; su fiesta de cumpleaños número 6. Trató de rememorar si durante los 18 años que si recordaba, vivió algo similar, pero no encontró nada.

La ultima en irse fue la familia Granger, pero de último momento la alfa le pidió a Harry hablar a solas, Draco se alejó del lugar en el que estaban sin poner peros, comenzó andar por la enorme sala hasta que visualizó a su pequeño cachorro desparramado por uno de los sillones durmiendo. No pudo evitar sentir una ternura grande, se acercó y lo levantó de ahí, el niño se quejó un momento pero después acomodó su pequeña cabecita en su hombro, entonces se encontró otro problema ¿Cuál era la habitación del niño? tenía que subir al segundo piso eso era casi seguro, pero ¿y después?

Tuvo que esperar un momento para que Harry por fin apareciera, su rostro era algo sombrío, eso lo puso en alerta; su olor debió delatarlo porque el omega levantó la vista y volvió a su postura normal sin decir nada al respecto. Se acercó a ellos y su mirada se suavizó- Es bueno ver que algunas cosas no cambian- habló ofreciéndole una sonrisa dulce.

-¿Siempre se duerme en el sillón?

-En estas situaciones, se duerme donde le agarre el sueño- dijo acariciando su pequeña cabecita, Draco observó el toque cariñoso del omega en su cachorro y algo dentro de él se removió- bien su habitación... sígueme.

Tal como lo imaginó empezaron a subir por las enormes escaleras para el segundo piso; pero al llegar a este no era nada de lo que esperaba, pareciera que habían entrado a otra casa.

Nada que ver con la parte de abajo esta era más hogareña, sencilla y cálida, con retratos por todos lados, plantas y un canasto de juguetes incluso, nada demasiado llamativo ni extremadamente brilloso.

-Yo decoré la parte de abajo- afirmó

Potter volteó con una sonrisa enorme-¿Lo recordaste?

-No, pero es obvio- dijo sonriendo, aunque esta se debilitó cuando la decepción surcó por los ojos verdes.

-Decidimos que la parte de abajo sería para las visitas formales o gente que no pertenece a nuestra familia, es decir, la reunión de hoy fue abajo porque aquí es pequeño para todos- habló recuperando la expresión alegre- el pasillo lleva a las habitaciones, tenemos 8 para visitas pero se pueden multiplicar, está la nuestra y la de Alnair- comenzó a caminar hacia el pasillo- el piso de arriba también tiene habitaciones pero son más como de entretenimiento, cuarto de cine, cuarto de juegos, un billar, biblioteca, ya sabes esas cosas- dijo sacudiendo la mano en un gesto que le restaba importancia y deteniéndose finalmente en un cuarto abrió la puerta y le cedió el paso.

La habitación al igual que la que él tuvo en su infancia era lujosa y grande, tal vez la diferencia radicaba en el estilo de decorado, el de Draco toda la vida había sido extremadamente pulcro en tonos blancos y grises. El de Alnair estaba completamente lleno de colores alegres, pero lo que más resaltaba era el techo que estaba decorado y hechizado, se visualizaba un cielo perfecto.

Al acostar al infante el techo se llenó de nubes con diferentes figuras moviéndose sumamente lento para dar el tiempo de contemplarlo. Potter se encargó de cambiarlo y arroparlo mientras el curioseaba, al apagar la luz el techo aceleró el paisaje de nubes para dar cabida a un cielo estrellado hermoso en el que fácilmente se distinguían muchísimas constelaciones, además cada una de las estrellas brillaba con intensidad evitando que el cuarto se oscureciera en su totalidad.

-Impresionante- dijo observando las estrellas que ahora empezaban a moverse.

-SI, a mí también me maravilló cuando lo acabaste- contestó el omega, no pudo evitar que su boca cayera solo de oír eso, ¿él lo hizo?, iba a preguntar pero el otro se le adelantó- bien ahora a nuestra habitación.

-Carajo- siguió a Potter hasta la salida y una vez en el pasillo se detuvo, el moreno lo notó unos pasos adelante y se giró a verlo, no habló pero la pregunta estaba en sus ojos. Bien se preguntó ¿por dónde empezar?

-Harry yo estuve pensando un poco antes de venir y decidí que tal vez sea mejor que por un tiempo yo...- se rascó la cabeza y desvió la mirada hacia otro lado- duerma en otra habitación.