CENIZAS INSEPULTAS

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Una arcada más, volvió a sentir como la comida subía por su garganta y de nuevo retornó a vomitar, una vez que paró trató primero de limpiarse para poder respirar; la garganta, la nariz y el estómago le ardían. Quería que eso acabara, pero no sería posible, al menos no en un corto plazo.

Draco no recordaba... su alfa no recordaba nada de ellos, no le habían preguntado, pero no era necesario bastaba con saber que el día que se volvieron a ver después de la guerra tenían 21 años; así que era normal que pensara que si él estaba ahí era por una misión, ojalá pudiera hacérselo entender al lazo.

Harry habría podido apostar su vida y decir que el lazo que mantenían Draco y él era sumamente fuerte y estaba en buen estado, no que no pelearan o algo así pero siempre trataban de poner los dos de su parte y mantener la armonía lo más posible. A través del lazo ambos podían sentir parte de lo que el otro sentía, en ocasiones incluso algunos pensamientos, lo que era poco común, ese nivel no lo habían alcanzado ni siquiera Hermione y Pansy que también eran destinadas. Después del accidente algo cambió, dejó de sentir lo que su alfa sentía, supuso que se debía primero a sus propias heridas y más tarde a la preocupación de ver a su alfa inconsciente; pero ahora sabe que se equivocó.

Llevó su mano a la marca, le estaba doliendo y los síntomas que estaba teniendo probablemente también era consecuencia de esto, el rechazo por parte de uno de los involucrados hacia el otro pueden llevar a deteriorar la unión; inconscientemente Draco lo estaba rechazando, suspiró- basta de tanto teatro- empezó a levantarse para aplicar hechizos de limpieza a su ropa, a su rostro y a la boca.

Hace dos días casi al medio día, su alfa había despertado pero a diferencia de los 10 escenarios que se imaginó durante todo el tiempo que lo esperó, él fue excluido a la maldita sala de espera nuevamente y su alfa no había hecho nada, ni siquiera lo buscaba; buscaba a su madre, a Blaise, a Pansy y hasta a Astoria pero de él ni se acordaba... literalmente.

Los medimagos no encontraron daño grave alguno en todos los estudios que le hicieron, por lo que llegaron a la conclusión de que la pérdida de memoria era temporal, recuperaría los recuerdos pero desafortunadamente el tiempo que tardara era indefinido. Podía ser mañana, en la hora siguiente o en 40 años; habían dicho que sería bueno que le fueran contando las cosas de a poco, empezando por trivialidades y luego por lo más importante. Todos los amigos que Draco recordaba para ese punto ya le habían contado casi todo de su vida pública pero faltaba la personal, llegaron al acuerdo que lo mejor era que esa la contara Harry y Narcissa. Pudieron haber dejado que solo se lo contara Harry pero cabía la posibilidad de que no le creyera y lo rechazara lo que no podría acabar nada bien.

Afuera del baño Ginny ya lo esperaba, aun con lo mal que se veía, su amiga le sonrió, él respondió la sonrisa y le agradeció internamente por no hacerlo sentir más miserable.

-Saliste antes de lo que esperé-le dijo con un tono divertido, pero antes de que pudiera contestar Ron llegó corriendo a su lado.

-¡Harry!, que bueno que te encuentro-hizo una pausa para recuperar el aliento antes de seguir y comenzar a buscar algo a su alrededor- ¿no está Al contigo?-al ver la negación con la cabeza y el ceño fruncido de su amigo continuó- yo... emmmm... Blaise y yo pensamos que te buscaba se supone que lo recogí para llevarlo con mamá, pero tenía que entregar algunas cosas a Blaise para la conversación que tendría con Draco hoy y bueno me descuidé un momento...

-¿RonaldWeasley perdiste a mi hijo?-Respondió Harry con un tono amenazante

-Me prometió que iba al baño- dijo con un puchero de perdón para después comenzar a hacer gestos con la mano- el baño... el baño estaba a la vuelta... A LA VUELTA