CAPITULO XIII: 08/04/21

38 5 0
                                    

Cuando intentaba pensar en una pareja para mí, mi mente se bloqueaba. Pues tenía la sensación de que nadie me amaría como yo amo a las personas, que nadie me correspondería y que las personas que me querían no las iba a querer yo. Justo y como había sucedido siempre, pero luego apareció ella y me demostró lo que es el amor.
Ella me hizo querer arriesgarme en todo.

Prepare todos los frascos que iba a llevar para este día, me sentía demasiado nerviosa pero hoy era cuando todo iba a cambiar en mi vida y en la vida de "M". Agarre el carro y maneje hasta la casa de "M" ella aun no estaba del todo lista pero la espere y fuí a colocarle una recarga de internet a mi celular para llegar al lugar donde tenía reservado.

La observe detalladamente cuando subió a mi carro ese vestido azulado que traía manga larga y escotado se le veía demasiado bien, ella me dijo que se sentía un poco insegura con el vestido pero yo la reprendí y le dije que se miraba hermosa entrelazamos nuestras manos y comencé a manejar hasta el lugar que tenia preparado.
Me daba miedo ir a lugares que nunca había recorrido porque soy bastante paranoica, pero quería que este momento fuera especial. Luego de 1 hora y media de viaje llegamos al lugar, entrelace mi mano con la de ella y entramos. Le dije cuando íbamos llegando que comeriamos adentro de un árbol, literalmente. Ella me dijo que estaba hermoso, pedímos el desayuno y comenzamos a comer.
Cuando terminamos pague la comida y le dije que fuéramos a dar una vuelta, le pedí a una chica que me explicara como estaba todo.

Entrelazamos nuestras manos y caminamos por todo el cafetal hablando sobre todo un poco y a veces de cosas demasiado bobas pero que ambas disfrutábamos escuchar. Llegamos a un tope y le dije que creía que nos habíamos perdido, intentamos recordar el camino de regreso pero solo nos topabamos con muros o cafetales sin salida. Hasta que ella fue tan inteligente que me dijo que probablemente estaba del otro lado, así que caminamos hasta el lugar donde ella me estaba llevando y entramos a donde estaba la taza gigante y muchas siembras. Agarramos tomates pequeños y café tirado. Yo quería irme a tomar fotos a la taza y pedirle ser mi novia en ese lugar pero habían personas, así que le dije que nos fuéramos a sentar a un arbol con sombra que había cerca. Nos tomamos fotos y continuamos conversando. Cuando vimos que las personas se estaban yendo corrimos hacía la taza y decidimos tomarnos fotos, cuando terminamos nos sentamos adentro de un pequeño árbol como en el que habíamos comido anteriormente. Le dije que pusiera su celular para grabar, ella me miro confundida pero me hizo caso.
En su mente nosotras nos tomaríamos más fotos pero realmente solo quería tener todo documentado para un lindo recuerdo. Comencé a darle los frascos y cada que terminaba de leer uno una sonrisa salía de sus labios. Mi rostro comenzó a arder de nervios, así que cuando llegue al décimo frasco saque un lapicero y agarre el frasco número 11 y se lo dí cuando termino de leer el 10. Cuando vio la pregunta escuche su pequeña risa nerviosa y me volteo a ver. Agarro el lapicero y marco la pequeña casilla con la palabra "Si" el lapicero para colmo no pintaba así que le toco hacer un pequeño agujero para marcar. Luego me beso, la union de nuestras sonrisas fue sin duda el mejor momento.

Continuamos caminando y decidimos regresar, así que nos subimos al auto y coloque música antigua y comenzamos a cantar y bailar mientras manejaba. A veces cuando estaba perdida en lo feliz que estaba sentía su mirada sobre mí, sentía su mirada llena de ternura mientras me detallaba al manejar. Y cuando yo volteaba a verla ella quitaba su mirada rápidamente y en otras ocasiones nuestros ojos se encontraban y nuestros corazones se juntaban.

Pasamos comprando a un Dollar City pinturas y dos lienzos en blanco, y nos fuimos para el parque que se encontraba cerca de su casa. Colocamos nuestras manos en los lienzos y también la fecha. Hicimos dos para que ambas pudiéramos tener uno y marcar ese momento tan mágico. Llegamos a su casa y su mamá comenzó a preguntarnos sobre todo, le contamos al pie de la letra lo que habíamos hecho.

Ese día la mamá de "M" mando a comprar helado y comenzamos a comerlo. "M" Quiso ver una pelicula en su habitación, así que mientras la veíamos a veces la volteaba a ver y la detallaba con la mirada. Esa mujer era perfecta de pies a cabeza.
Me encontraba viéndola y siempre me preguntaba que le veía, y respondía siempre con un "Nada". La bese en muchas ocasiones, porque no podía evitarlo, necesitaba de ella demasiado.

Cuando regrese a mi casa, lo primero que hice fue colocar nuestro cuadro arriba de mi ventana. No me importaba quien lo viera, solo quería que estuviera ahí y verlo cada vez que la extrañara.

Ella ahora era mi novia... oficialmente.

El Sol Y La Luna (Una Historia De Amor (Im)posible)/ Joha GirónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora