Capítulo 50

713 40 15
                                    

Septiembre del 2015.

| Narra Tara |

El despertador suena. Es mi primer día de clase. Mi primer día cómo universitaria. Salgo de la cama y voy caminando hasta el baño. Miro un pequeño bulto en mi cama. Es él. Sonrío como una estúpida y entro al baño.
Abro el grifo de la ducha y mientras el agua coge temperatura me desprendo de todas y cada una de mis prendas.

Cuando el agua está templada, meto mi pie izquierdo en la bañera y un escalofrío recorre mi cuerpo de arriba abajo. Meto el cuerpo entero, y dejo que al agua caiga. Esparzo champú por mi cuerpo, y acto seguido hago lo mismo con mi pelo. Lo aclaro, enrollo una toalla en mi cabeza, y otra en mi cuerpo.

Cuando estoy a punto de darme la vuelta siento cómo unas manos se acoplan en mi cintura. Me giro quedando cara a cara con él, y sonrío cómo una idiota. Esta realmente sexy. Sus boxers y su pelo despeinado. Me roba un beso, y se mete en la ducha.

-Pasa un buen día, nena. -dice desde la ducha.
-Igualmente, Justin.

[...]

Estoy a la puerta de la universidad, me tiemblan las piernas, aun no me puedo creer que me haya cogido en la facultad de audiovisuales. Respiro hondo, y subo los escalones hasta la puerta principal, aún quedan quince minutos para que las clases empiecen. Saco un cigarrillo de mi bolso, y lo enciendo. Estoy nerviosa.

Estoy de espaldas escribiendo un mensaje a mi madre cuándo un grupo de chicas toca mi espalda. Asustada me doy la vuelta, y ellas me tranquilizan con una sonrisa. Río en forma de relajación.

-Lo siento si te he asustado. -dice la morena.
-No es nada. -río- Es que estoy nerviosa.
-¿Es tú primer día? -dice ahora la castaña.
-Sí.
-El nuestro también. -dice ahora una rubia- Bueno, menos el de Kels. -dice señalando a la más bajita de ellas.

El nombre de Kels retumba mi mente. Mi sueño. El nombre. El destino, supongo. Rio.

-¿Y qué queríais?
-Veníamos a decirte que si nos prestas el mechero. -dice la rubia- Por cierto, mi nombre es Marie.
-Encantada. -digo estrechándole mi mano- Yo soy Tara, Tara Weasly.
-Ellas son Desirée. -dice señalando a la castaña- Alexandra -señala ahora a la morena- y bueno, Kelsy, ya te he la medio presentado antes. -sonríe.

Las chicas caminan hacía a mí, a saludarme. Son realmente simpáticas.
Conversamos sobre las clases que tenemos, y estamos juntas en la misma aula, cuando justo vamos caminando hacia dentro un grupo de chicos llama la atención de las demás.

-¡Vamos! -grita Marie haciendo un gesto con la mano.
Los chicos suben las escaleras, y saludan a las chicas con dos besos, por lo que aparenta son del mismo grupo de amigos.
-Hoy te toca un día de presentaciones. -bromea Desirée.
-Sí. -suspiro- Odio ser ''nueva''. -digo haciendo las comillas.
-Bueno, es el Chaz. -dice señalando al bajito de ojos azules- él, -esta vez señala a un chico alto con el pelo rizado- es Nolan, Nolan Murray -carcajea al pronunciar el apellido- y él, es Ryan -dice señalando a un castaño de ojos claros- es mi hermano. -añade.

Los chicos se acercan a mí para saludarme, y acto seguido entramos en aquel gran edificio. Los chicos y las chicas se separan por aulas, y yo las sigo a ellas, a todos menos a Kelsy, que está en su segundo año de carrera. Ellas me cuentan donde están todas la instalaciones y me hacen preguntas sobre mi vida. Al contarles mi historia excluyendo lo de mi imaginación -obvio- se queda con la boca abierta.

[...]

Las clases han terminado por hoy. Las chicas y yo salimos a la puerta la facultad, y encendemos un cigarrillo. Un grupo de niñas pijas, con faldas cortas, extensiones, y tacones pasan por delante nuestra cuchicheando entre ellas. No puedo evitar soltar una carcajada, y Marie me pega un codazo, a lo que yo la susurro un 'lo siento'.

-Ella es Lou, Lou Collins la pija malcriada de la universidad, también es su segundo año. -dice Desirée.
-Tampoco será para tanto. -río- Yo también puedo ser una estirada si me lo propongo.
-Todo el mundo nos ha dicho que es mejor pasar de ella. -dice esta vez Marie- Y nosotras tenemos malas experiencias.
-¿Si? -digo asombrada.
-Kelsy y ella eran mejores amigas, Kelsy por aquellos tiempos estaba saliendo con Chaz, y Lou se metió por medio, y nosotras salimos en su defensa.
-¡Que zorra!
-Sí.

Las chicas y yo seguimos contándonos cosas, y vamos de camino a coger el bus. Cuando voy caminado siento cómo alguien tira de mi brazo y me separa de ellas. Me doy la vuelta y allí esta él, con sus ojos miel y su amplia sonrisa.

-Veo que ya has hecho amigas. -ríe.
-Sí, son muy majas. -afirmo.

Las chicas se quedan mirando y una de ellas corre hacia nosotros, y se abalanza sobre Justin, mi cara se vuelve pálida y es un poema. Las demás ríen ante mi cara, y yo sigo sin entender nada.

-Son amigos desde la guardería. -susurra Kelsy en mi oído- Ella vivía en el mismo barrio que él hace unos años, pero se mudó.
-¡Ahhh! -digo ahora más aliviada.

Marie se separa de Justin y viene hacia a mí, me susurra algo que no logro entender.

-¿No sabéis quien es? -dice esta vez Justin mientras saluda a las demás.
-Sí, Tara Weasly. -afirma Desirée.
-¿No te suena ese apellido, Kelsy? -dice Justin.
-Sí, mi novio se apellida así.
-Es su hermana, es la hermana de Mike.

Las chicas empiezan a reír, y yo ya empiezo a entender todo. Los chicos son los amigos de mi hermano, los que tantas veces han ido a buscarle cuándo yo tan solo era una cría, y además por eso soñaba con ellos, porque eran personas que estaban diariamente en mi día a día y yo no me daba ni cuenta.

| Narrador |

El tiempo fue pasando sobre la vida de estos diez chicos. Justin y Tara seguían manteniendo su relación. La amistad de Tara con las chicas crecía según el curso iba avanzando tanto que llegaron a hacerse inseparables. Mike, consiguió su título de medicina en la universidad, y la madre de Tara consiguió encontrar el amor después de unos meses, trayendo con ello un hermano pequeño para los Weasly, el pequeño Christian.

La vida es una aventura, así que, vívela al máximo, sin importar los errores, y disfrutando cada momento. La vida es mágica, aprovéchala.

¡FIN!

-----------------------

En realidad no sé por donde empezar... Es bastante tiempo escribiendo y recibiendo comentarios increíbles de cada una de vosotras, recibiendo magia cada vez que subía un capitulo. Sinceramente, vosotras me dais las gracias a mi por subir capitulo, pero yo os tengo que dar las gracias a vosotras por leerme cada vez que subía, por esperar por un capitulo de quizás no más de dos folios, o quizás en el que pasaba algo que vosotras no os esperabais. La magia no sería posible sin vosotras. Gracias por leerme durante este tiempo y por seguir apoyándome incondicionalmente y esperando por un capitulo. Ya os digo, que no termina aquí lo de seguir escribiendo, que subiré otra novela, y que espero que me leáis porque sin vosotras no vale la pena escribir.

En serio, os debo mucho, porque hacéis parte de mi sueño realidad, y es hacer soñar a los demás con simples palabras.

¡GRACIAS!

Espero que os haya gustado la novela, y os haya gustado el final y no os decepcionéis conmigo.

¡OS QUIERO MUCHO, MUCHO, MUCHÍIIIIIIIIIIIISIMO!

Del odio, al deseo. - Cameron Dallas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora