Capítulo 109: Confusión

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Yang Jiali se paró en la puerta y se enfrentó a Ye Ting.

Después de un largo tiempo, Ye Ting pareció finalmente ser derrotado, se volvió y se sentó en silencio sin un sonido.

Yang Jiali entró a la casa que olía mucho a alcohol, y con rostro hosco lo levantó del suelo y lo llevó de la mano escaleras abajo.

Llevó a Ye Ting al dormitorio y dejó que Ye Ting se sentara en el borde de la cama.

Había muchas manchas de vino en la corbata y la camisa de Ye Ting, y Yang Jiali se acercó para ayudarlo a desatarse la corbata y quitarse la ropa.

Ye Ting seguía mirando al lado de la cara de Yang Jiali con una mirada feroz de lobo.

Cuando Yang Jiali quitó la ropa de Ye Ting, la tiró en el cesto de la ropa sucia y se levantó para coger una toalla del cuarto de baño, Ye Ting le dijo con voz grave a su espalda: "Se han acabado los 30 días, no deberías haber aparecido delante de mí, y mucho menos venir a mi casa, has roto el acuerdo."

Yang Jiali se detuvo en sus pasos y no dijo nada.

Cogió una toalla del cuarto de baño, la empapó en agua caliente, la escurrió hasta dejarla medio seca, volvió hacia Ye Ting y le dijo con voz fría: "Cierra los ojos".

Ye Ting cerró los ojos obedientemente.

Yang Jiali sostuvo la toalla y limpió la mejilla de Ye Ting.

Ye Ting cerró los ojos y dijo: "Yang Jiali, estoy molesto contigo".

Yang Jiali se llevó la comisura de la boca y dijo con calma: "Si, lo sé".

Después de decir eso, continuó limpiando suavemente la cara de Ye Ting con una toalla.

Ye Ting abrió los ojos, y sus ojos fuertemente embriagados se encontraron con los serios de Yang Jiali, y la hostilidad en su cuerpo de repente pareció haber disminuido, como si fuera una bestia a la que le hubieran alisado el pelo.

Con voz temblorosa, añadió: "Cariño, te extraño demasiado".

Yang Jiali se detuvo, arrojó la toalla al baño y señaló el cinturón de Ye Ting: "Quítate tú mismo los pantalones".

Ye Ting estaba tan confundido por la bebida que actuó como un robot, haciendo todo lo que Yang Jiali le decía, bajando la mano y abriendo la hebilla de su cinturón, quitándose los pantalones y siendo llevado a la cama a la fuerza por Yang Jiali.


Ye Ting todavía miraba a Yang Jiali y susurró: "Cariño, ¿sabes que te extraño mucho?".

Yang Jiali se sentó en el borde de la cama y gruñó: "¿Me has extrañado mucho? ¿Irte como un extraño cuando me ves en el salón del vino con una hermosa compañera ...... posiblemente aún, una prometida?"

Ye Ting tocó silenciosamente la mano de Yang Jiali, y sus dedos presionaron el dorso de la mano de Yang Jiali con nostalgia.

Su nuez de Adán rodar un poco, con una sonrisa irónica: "¿Crees que todavía me atrevo a mirarte?"

"Un segundo más de mirarte, una palabra más contigo, y puede que no pueda resistirme a enfermar y arrebatarte de nuevo". <<(ósea volver a la locura de querer encerrarlo de nuevo)

Los ojos de Yang Jiali se quedaron mirando por un momento, y finalmente no pudo resistirse a preguntar: "¿Y esa Xia Yijie?".

"No es una prometida", Ye Ting parpadeó, "es la hermana de Xiao Xia, yo, ella y Xiao Xia, estamos en una colaboración".

"¿Colaboración en qué?"

"El padre de Xia se está muriendo, y él y su hermana quieren tomar el poder, pero alguien lo está bloqueando y no los quiere. Acabo de regresar a China y no tengo suficiente base por aquí y necesito para crear una red de contactos. Resulta que nos juntamos, yo pongo el dinero, les presto Guanghui como base para convencer a la familia Xia, me dan una parte del dividendo, y cuando suben, me pueden prestar la familia Xia como trampolín. Así de sencillo".

Yang Jiali de alguna manera sintió una repentina oleada de tranquilidad en su corazón.

Ye Ting miró la expresión ligeramente aliviada de Yang Jiali y un borracho se rió de repente: "... celoso".

La cara de Yang Jiali se sonrojó de inmediato y abofeteó las manos de Ye Ting con la palma.

Ye Ting retiró su mano y la volvió a meter en la colcha, sus ojos eran suaves y expectantes: "Ya que hoy violaste una regla, entonces quédate más conmigo, ¿esta bien? una vez que me haya dormido, puedes irte".

Yang Jiali tiró de la manta por él y emitió un profundo sonido apagado.

Cuando Ye Ting estaba borracho, la persona no era tan tranquila y severa como cuando estaba sobrio, en cambio sonreía como un niño al que le han dado una merienda, sus ojos reflejaban la sombra de Yang Jiali en las gotas de sus ojos, y sus ojos parecían brillar: "Cuando estuviste fuera durante un mes, realmente lo pasé muy mal durante ese mes. Solía pensar que un mes era poco, pero cómo es que esta vez fue...tan duro..."

Algo en el corazón de Yang Jiali fue pinchado por estas palabras y se movió suavemente.

No pudo evitar agacharse e inclinarse junto a Ye Ting.

El aliento de Ye Ting todavía olía a alcohol y se revolcaba por todo el lugar. Él y Yang Jiali se acercaron y se miraron: "Cariño, ¿has tenido un buen mes?".


Capítulo 109: Confusión (2/2)

Yang Jiali asintió: "Sí".

"Sí ". Terminó Ye Ting con una sonrisa, pero sus ojos estaban secretamente húmedos, "Tienes que vivir una buena vida antes de que pueda estar tranquilo y dejarte ir. Cuídate mucho en el futuro también, y si tienes la oportunidad, búscate un nuevo novio, debe ser mejor que yo. Tiene que ser gentil, aprenderte a respetar, saber entender tus sentimientos, y la primera regla es que no debe intimidarte, como yo lo hacía antes". <<(ay Ye Ting me dueles)

Los ojos de Yang Jiali enrojecieron: "¿Por qué dices esto?".

Ye Ting estiró la mano para tocar la cara de Yang Jiali y suspiró: "En realidad, entiendo todo esto. ¿Pero no crees que es demasiado tarde?"

"Cariño, tengo tantas ganas de volver a empezar contigo, como ese año de entrenamiento militar. Estabas en un grupo conmigo y te acercaste a mí, con tu cara muy blanca y limpia, aún sudorosa, sonriendo, extendiendo tu mano hacia mí y diciendo: "Hola, mi nombre es Yang Jiali, como en árbol Yang, Jia como en elogio, y Li como en erguido. Y yo sólo te miré y dije: "Me llamo Ye Ting".

"Anoche soñé con esta escena y fue hermosa. Pero cuando me desperté y me di cuenta de que era sólo un sueño, de repente fue como si todo mi cuerpo se hubiera congelado en un sótano y mi cerebro estuviera todo blanco. Fingía estar tranquilo, iba al trabajo como siempre, iba a las reuniones como siempre, comía y dormía como siempre, pero cada vez que estaba libre, me sentía perdido. He hecho algo muy malo y ya no me quieres".

"Piensa en el día de hoy como un sueño que tuve cuando estaba borracho, y cuando el sol salga mañana por la mañana, ambos lo olvidaremos. Tú sigue con tu nueva vida, yo seguiré con mi rutina, y un día todo estará bien". 

Ye Ting divagó durante mucho tiempo. Una persona borracha era realmente interminable.

A Yang Jiali no le importó, así que escuchó las palabras de Ye Ting.

Sólo cuando Ye Ting se había dormido, se levantó y arropó la manta de Ye Ting.

No pudo evitar mirar la cara dormida de Ye Ting y las inconfundibles ojeras de Ye Ting durante un rato más antes de que Yang Jiali saliera del dormitorio, cerrara la puerta y abandonara la villa de Ye Ting.

Al día siguiente, Ye Ting no llamó, y todo estaba tranquilo como siempre.

Yang Jiali se sentó solo en casa, sosteniendo a los peludos Xiao Huang y Ah Fu, observando desde el amanecer hasta el atardecer.

Sabía que mientras no se pusiera en contacto con Ye Ting, éste no tendría motivos para molestarle. Su vida seguiría como hasta ahora, paso a paso, de forma suave y ordinaria, y él y Ye Ting no tendrían más contacto, ninguna otra relación, hasta que fuera viejo, incluso hasta que muriera.

Yang Jiali se sintió repentinamente vacío por dentro.

Por primera vez, sacó su teléfono móvil, miró el número de Ye Ting y dudó.

Esta indecisión duró hasta el tercer día.

Mientras Yang Jiali estaba en una batalla de cielo y tierra, recibió primero una llamada de Zhao Xianghai.

En el teléfono, Zhao Xianghai le preguntó con suspicacia: "¿Has solicitado la tarjeta de residencia en Estados Unidos?".

Yang Jiali se quedó paralizado un momento: "No, no lo he hecho".

El tono de Zhao Xianghai era aún más extraño: "Entonces, ¿has cambiado recientemente tu situación de visado?"

Yang Jiali frunció el ceño, "Tampoco".

Zhao Xianghai se quedó en silencio durante varios segundos sin hablar.

Justo cuando Yang Jiali quería preguntarle, Zhao Xianghai dijo con seriedad: "Ven a la empresa, ahora".

Vigilado por mi Ex otra vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora