Adalia
En la mañana siguiente me desperté más tarde que de costumbre por que no tenía clases durante el día.
Me levanté de la cama y decidí ir a desayunar antes de darme un baño.
Bajé y noté que mis padres seguían en la casa, eso me sorprendió. Está ya era hora de que estuvieran en el trabajo.
—Buenos días. —los observé esperando alguna explicación del porqué no se habían ido a trabajar a esta hora.
—Hola, querida —mamá se acercó y me abrazó rápidamente—. Hablé con tu padre ayer por la noche y me comentó que no tenías clases el día de hoy, así que nos quedamos para pasar tiempo contigo. —me dio una sonrisa y se sentó a la par de papá.
—Pensamos que podíamos cenar fuera por la noche y mientras pasan las horas podrías hablarnos de cómo van las cosas en la universidad. —dijo papá, esperando por una respuesta.
—Me parece una gran idea, voy a desayunar y luego de bañarme bajaré para que nos sentemos en la sala. —me sentía extremadamente feliz, no recordaba cuando fue la última vez que hicimos algo así.
—Está bien, querida. —aceptó mamá— El desayuno ya está listo, come para que puedas subir a tu habitación.
Hice lo que me pidió y me senté a su lado para desayunar todos juntos.
Cuando terminé, subí a mi habitación y tomé una ducha, para luego colocarme ropa cómoda. Luego de arreglarme bajé nuevamente y fui directo a la sala, donde me senté con mis padres en uno de los sofás. Luego de un rato empecé a contarle algunas cosas sobre la universidad y mi carrera, mientras ellos me escuchaban con atención.
—¿Y has hecho amigos nuevos, Ada? —mamá me miraba con interés, sabía que sociabilizar no era lo mío.
—Pues... conocí a un chico. Su nombre es Derek. —estaba algo nerviosa de mencionarlo, no querría que malinterpretaran las cosas.
—¡Me alegra mucho escuchar eso! — mamá estaba feliz de mi círculo social aumentara de dos personas a tres.
—¿Estudia contigo? —preguntó mi padre con una sonrisa en su rostro.
—No. Estudia ingeniería química —expliqué—, creo que esta en tercer año de la carrera. —miré hacia el suelo, me sentía incomoda de hablar de Derek con mis padres.
—¿Y es guapo? —mamá me sonreía esperando una respuesta. Ella nunca supo que salí con Dylan, ni mucho menos que terminamos.
—Eh... no lo sé. —la mirada fija de mi padre me incomodaba y no me dejaba responder con sinceridad.
—Deberías invitarlo a cenar un día, nos encantaría conocerlo. ¿No es así, Henry? —Preguntó desviando su mirada hacia mi padre.
—Claro, sería un placer conocer a ese joven. —sabía que papá estaba tenso con el asunto de los chicos por lo que paso con Dylan.
—Otro día lo invitare a venir. —por supuesto que no lo invitaría a conocer a mis padres. Sería muy incómodo. Luego pensarían que era mi novio y le harían preguntas incomodas.
**************
El resto del día ocurrió de manera muy tranquila, seguimos hablando de otros temas y vimos una película juntos.
Después de un rato papá dijo que era mejor que empezáramos a preparos para la cena. Subí a mi cuarto y me di otro baño para empezar a arreglarme.
Sabía que mis padres me llevarían a un club donde habitualmente asistían personas importantes o muy ricas. Normalmente íbamos a ese lugar cuando mis padres tenían tiempo o si había alguna fiesta a la que debíamos asistir.
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Queriendo más
Teen FictionPara Adalia Ayers, el conformarse era parte de su vida, prefería callar y aceptar todo lo que pasaba a su alrededor. Prefería que nadie se enterara de sus problemas y optaba por aparentar serenidad. En su primer año de universidad todo cambiaría, co...