Humanidad demoniaca (primer presagio)

Capítulo 24

Gracias al golpe que le propine el depredador choco con una de las paredes de piedra cerca de la entrada de la cueva, el depredador se reincorporo sin muchos problemas antes de alejarse un poco de la pared para poder estar viendo en mí en dirección, aunque era poco complicado saber si me estaba viendo a mí o algo detrás de mí debido a su falta de ojos. Ambos nos observamos para después soltar un rugido cada uno y comenzar a correr hacia el otro, cuando estuvimos lo suficientemente cerca intercambiamos un golpe que logro alejarnos un poco uno del otro.

Volvimos a correr hacia el otro, pero esta vez yo espere a que el lanzara el golpe para poder agarrarme de su brazo ocupando los míos, de esta manera me impulse para atrapar su cuello entre mis piernas, una vez hecho solté su brazo mientras torcía mi cuerpo y de esta manera lo arroje hacia un árbol cercano ocupando mis piernas. No le di oportunidad de levantarse ya que le propine un rodillazo al torso que logro partir el árbol y ambos caímos al suelo, aun estando en el suelo aproveche para morder su hombro consiguiendo arrancarle un poco de carne en el proceso.

El depredador tomo mi cabeza entre sus manos para propinarme un cabezazo que logro hacer que me quitara de encima de él y el demonio aprovecho para volverse invisible ante mis ojos. Comencé a mirar a mi alrededor con la esperanza de no ser sorprendido, pero ahora había un elemento a mi favor y era que gracias a la herida de su brazo podía oler su sangre lo cual me permitió encontrarlo justo antes de ser embestido por él, sin embargo, me deje embestir para poder tomar su cuello entre mi brazo izquierdo para dejarme caer de espaldas, logrando así estrellar su cara contra el suelo.

No me detuve ahí ya que convertí los dedos de mi mano derecha en garras y se las clave en la espalda logrando absorber un poco de su sangre en el proceso. El depredador soltó un rugido de dolor antes de clavarme sus garras en uno de mis costados para hacer que lo soltara, cosa que al final consiguió.

Ambos nos reincorporamos para abalanzarnos uno contra él, desafortunadamente no conseguí conectar el golpe debido a que el depredador salto cuando estuvo lo suficientemente cerca para agarrar mis hombros con sus pies, saltar conmigo todavía sujetado a sus pies y lanzarme hacia un árbol cercano después de haber dado una vuelta en el aire. No tuve tiempo de levantarme ya que recibí un rodillazo que me hizo atravesar el árbol contra el que había chocado, en cuanto caí al suelo pude darme cuenta de que me había des transformado y ese pequeño momento pequeño de duda fue suficiente para que el demonio intentara acabarme, pero logre esquivarlo antes de reincorporarme e impulsare así otro árbol cercano.

Me estaba quedando sin opciones hasta que recordé al cazador misterioso de mi sueño así que descolgué la máscara de los lamentos de mi pantalón antes de ponérmela. Sentí una gran cantidad de poder al igual que en el estacionamiento, pero esta vez lo iba a dominar por lo que recordando lo que había aprendido en el sueño dirigí la mayor cantidad de sangre a mis manos.

-Falcatas de los lamentos-

Cerré mis manos, las junté y al separarlas había una falcata en cada una de ellas. Una vez hecho esto salte hacia el depredador que no logro ver hacia donde me había ido después de haber esquivado su golpe, esto funciono a mi favor ya que lo tome completamente desprevenido al momento de propinarle un tajo horizontal hacia abajo con mi falcata derecha, el demonio retrocedió un poco, pero no iba a dejar que escapara por lo que en un rápido movimiento me agache para lograr acertar un corte a su pierna derecha con mi falcata izquierda.

Estaba a punto de propinarle un tajo al cuello cuando el depredador saltó hacia atrás logrando esquivar mi ataque, a lo que yo conteste arremetiendo contra él mientras activaba mis extremidades demoniacas para poder saltar, conectar un rodillazo a su cara con mi pierna derecha, girar en el aire antes de propinarle una patada usando mi pierna demoniaca y terminar clavando mi falcata derecha en su hombro del mismo lado.

Saque el arma de su hombro de manera rápida para poder deslizarme por debajo de su brazo antes de realizar un giro para propinarle un corte en la espalda del depredador. El demonio se volvió invisible nuevamente, lo cual a pesar de haberlo presenciado dos veces aun así logro tomarme desprevenido el golpe que acertó contra mi cara, mismo golpe que consiguió elevarme hacia una de las copas de los arboles cercanos. Afortunadamente esto me había dado la oportunidad de crear un espejismo que fui quien bajo del árbol mientras que yo me reposicionaba ocupando las ramas de los arboles como apoyo.

Lo que no me esperaba era que el depredador no estaba reaccionando de ninguna manera ante mi espejismo, sin embargo, parecía distraído así que salte del árbol en el que estaba hacía él para intentar atacarlo, pero el demonio se volteo a tiempo para tomarme por el cuello y de esta manera evitar mi ataque.

-¿Cómo es que sabía que el espejismo no era yo si no puede verme?- me pregunte mentalmente

Gracias a que el agarre del depredador estaba aumentando me di cuenta de que no tenía tiempo para buscar la respuesta a esa pregunta así que use las falcatas de los lamentos para cortarle el brazo con el que me estaba sujetando al demonio. El depredador se alejó un poco debido al dolor provocado por la herida, pero eso no evito que arremetiera contra mí para intentar atacarme con las extremidades que le quedaban aunque ahora era más fácil esquivar sus ataques e incluso se volvió más sencillo contraatacar sus ataques, lo cual me permitió hacerle suficiente daño como para que no pudiera siquiera intentar detener la hemorragia de su brazo derecho.

Su nueva desventaja me hizo sonreír sádicamente debido a que esto hacia que crecieran más mis ganas de hacerlo sufrir así que junte las dos falcatas desde los extremos inferiores para formar la lanza de doble filo antes de lanzarla hacia el hombro en el cual aún tenía su brazo para luego arremeter contra él. En el fondo quería seguir peleando con él, pero ya no podía continuar perdiendo el tiempo, entonces en cuanto estuve lo suficientemente cerca salte sobre el mientras sacaba la lanza de su hombro, una vez estando en el suelo me levante rápidamente antes de cortarle la cabeza con la lanza.

Hice desaparecer la lanza antes de quitarme la máscara de los lamentos y presentar mis respetos para luego absorber su sangre. Una vez hecho esto me acerque nuevamente a la cueva en la que había visto al guerrero de la tribu para poder enterrarlo junto con las demás victimas que se encontraban dentro de la cueva. No pude evitar sentir nuevamente el deseo de querer hacer sufrir al demonio, tal parece que este sadismo está incrementando, solo espero tenerlo controlado en peleas futuras para no parecer un animal.

Después de haber terminado de enterrarlos regrese al sendero para continuar con el camino hacia la gruta en la cual se encontraba el pilar, pero ahora caminaba con un mejor control sobre la máscara de los lamentos y una nueva extremidad demoniaca.