Perdidos entre nosotros

Capitulo 14

Aurora

En el camino hacia la casa de la madre de Will, trato de conversar acerca de otras cosas para distraerme y no estar tan nerviosa.

Will está realmente guapo, muy guapo. Con su esmoquin negro y su moño que me parece muy tierno. Se trató de peinar pero sus rizos son un poco rebeldes.

Trato de fijarme en él para no estar nerviosa.
Usualmente cuando estoy nerviosa o ansiosa, muevo mucho mi pierna izquierda y Will se ha dado cuenta de ese hábito así que evito hacerlo porque quiero demostrarle que estoy bien y segura.

Pero no me tardo mucho en darme cuenta que algo sucede en Will. Ósea esta normal y responde a todas mis preguntas pero siento que algo lo perturba, como si sus respuestas estuvieran programadas mientras que su cabeza está realmente en otro lado.

¿Habrá sucedido algo? ¿Estará tan nervioso que actúa así? Aunque realmente lo dudo.

Una de las cosas que he aprendido de Will y que admiro, es que nada lo pone nervioso. Nunca está ansioso y nunca duda.
Siempre está seguro de que hacer o de qué pasará o si no lo sabe, sabe que lo podrá manejar.

Will parece siempre tener la delantera, así que me parece raro que esté nervioso porque nunca lo está.

No, no es eso.
¿Pero entonces que es?

No me dio tiempo para responder a esa pregunta ya que ya habíamos llegado.

En comparación a la casa de Will. Su mamá vive mucho más cerca a la mía y será porque su casa si está en la misma ciudad y no en una residencia exclusiva apartada del mundo.

Su casa es linda, antigua y preciosa.
Como un cuento de hadas.
O bueno, como un libro de Jane Austen.
Veo que los gustos de Will y su madre no son tan diferentes.

Will se estaciona en la puerta y mira la camioneta azul que está al frente.

- James ya llegó - me avisa apagando el auto. Pero no sonaba tan contento de que su hermano ya hubiese llegado. ¿Quería llegar primero?

Solo asiento mientras agarro mi bolso y bajo del auto antes de que Will llegue.

Will me extiende su mano y la tomo mientras nos dirigimos hacia la puerta principal.

Will

Nos abre la puerta la ama de llaves quien nos dirige hacia la sala donde asegura que estaban todos.

Llegamos a la sala y al primero que veo es James, claro que si.

Parado junto a la chimenea con una copa de vino. Su mirada de inmediato se posa en mí en cuanto entramos a la habitación.
Levanta suavemente su comisura derecha del labio pasando su mirada a Aurora.

- Señora Victoria - comenta el ama de llaves a mi madre, que estaba sentada en el sillón conversando con, según yo, era Patrick - Llegó el joven Will.

- ¡Hijo! - exclama mi madre notando mi entrada mientras se levanta de su asiento.

- Madre - sonrío saludándola con un fuerte abrazo que ella siempre da, nos separamos y me volteo para señalar a Aurora - Aurora...

- Aurora...- repite mi madre sonriendo mirando de pie a cabeza a Aurora, ella solo sonríe media incómoda.

- Qué tal señora Victoria... - comenta Aurora acercándose. - Un gusto conocerla al fin.

- Que linda eres - asegura mi madre dándole dos besos en las mejillas - Muy guapa.

- Usted luce deslumbrante - elogia Aurora risueña.