No olvides que te amo ~ KM.

𝑷𝒓𝒐𝒎𝒆𝒔𝒂.

Jungkook fue el primero en despertar y percatarse de que ya eran más de las tres de la tarde, miró hacia el chico se aferraba a su pecho desnudo y sonrió. Recorrió con sus dedos las curvas del delgado cuerpo entre sus brazos, hasta que llegó a la cara y quitó hebras grises del rostro de Jimin. 

—Mm... —ronroneó Jimin, removiéndose entre sus brazos, sin despertar. Sonriendo, Jungkook llevó sus dedos a la pequeña nariz de su chico y la apretó, impidiendo el paso del oxígeno— ¡Puaj! —se sentó rápidamente de manera incómoda, tomando bocanadas de aire mientras sentía de fondo la risita de Jungkook empezó a reír— ¡Jungkookie casi muero! —se quejó.

—No lo hacer, ven aquí —acercó el cuerpo desnudo de Jimin hacia su pecho nuevamente y lo abrazó— ¿Como tú dormir?

—Bastante cómodo. No pensaba que dormiría tan bien en un sofá —dio un corto beso en los labios del mayor— Pero lo mejor de todo, es despertar a tu lado —volvió a depositar otro beso— ¿Y tú?

—Yo bien —giró su cuerpo y quedó encima de Jimin, sin dejar caer su peso en él para unir sus labios en un beso más profundo; sus lenguas se encontraron y se saborearon mientras danzaban en un ritmo lento. Jimin dejaba escapar pequeños soniditos que hacían sonreír a Jungkook. 

Completamente perdidos en su mundo, sumergidos en el placer de ser besados por el otro, un pequeño rugido los hizo volver a la realidad.

—C-Creo que tengo hambre... —dijo Jimin, ignorando el calor en sus mejillas. 

—Tomar baño juntos y salir a comprar para comer —sugirió, acercando sus labios y presionandolos con cariño en las sonrojadas mejillas de Jimina— Compar muy cosas ricas —besó la pequeña nariz de Jimin, haciéndolo sonreír ante aquellas muestras de amor.

—¿Cosas ricas? —preguntó emocionado.

—Sí, ricas. Yo piensar que ser buena idea hacer carne en parrilla, ahí fuera más noche. Solo si a ti gustar idea, sino hacer algo diferente —llevó sus labios al cuello de Jimin, donde dio un lametón y un pequeño mordisco. 

—Uhm... me parece b-bien... —gimió. 

—Bien - salió del cuello y besó fugazmente los esponjosos labios de su chico. 

Se alejó del cuerpo desnudo de Jimin y se levanto, buscando con sus fanales negros su ropa interior. Pudo ver como Jimin hacía un puchero al dejarlo medio excitado luego de los besos y simplemente sonrió. Cuando logró ponerse el pantalón, tomó las llaves y fue por las maletas al auto.
 
Luego de unos minutos, Jungkook apareció completamente desnudo en el baño y se metió a la ducha, sorprendiendo a Jimin quien enjuagaba su cabello. Ambos se bañaron sin prisa, entre besos y caricias. Una ducha lo bastante extensa como para poder saciar toda la lujuria que sentían ante el más mínimo roce de sus pieles.

***

—¿Algo de ahí gustar? —habló Jungkook, mientras se acercaba a él con un carrito. Jimin lo miró y sonrió. 

—No. ¿Has comido de estas? —le enseñó un pequeño paquete de galletas sabor a tomate.

—Hm... Sí, pero yo no comer eso, no ser ricas para mí. ¿Te quedar aquí viendo o caminar conmigo?

—No, voy contigo —lo tomó del brazo— Luego me pierdo —sonrió.

—Yo te buscar por todos lados —lo besó rápidamente y las mejillas de Jimin se tiñeron de rojo.