El Diario de Julia

Día 23

Matt

Qué les puedo decir...
Ha sido una semana interesante y estresante a la vez.

Pero toda la carga y la adrenalina la he liberado haciendo lo que hago en estos momentos.

Pasar tiempo con Éragon.

He afianzado más los lazos con él, es algo que no podría explicar. Es como sí él y yo nos entendieramos perfectamente.

Cuando lo acaricio mis manos se amoldan a su pelaje de manera perfecta, y todo alrededor desaparece. Es como sí solamente existieramos él y yo. No hay problemas, no hay preocupaciones.

El señor Archer me ha permitido recibir clases de equitación. Al inicio me tocó con otro caballo menos fino. Pero al ver que aprendía rápido, el señor Archer me permitió tomar las clases con Éragon.

Aún recuerdo la primera vez que lo monté. Sentí una seguridad increíble, fue como si él nunca me fuera a traicionar. Esa vez lo acaricie y hablamos un rato. Luego empezamos a cabalgar lentamente...

Fue la mejor cabalgata de mi vida. Sin miedo, con confianza y era como si él supiera cómo quería ir de rápido, o cuando quería que parará. En definitiva este caballo es especial.

En los siguientes entrenamientos fui subiendo la velocidad un poco, pero a pesar de eso nunca tuve miedo. En cambio era como si fuera invensible.
La velocidad me daba la adrenalina, pero lo bien que nos entendemos con Éragon es lo más mágico de cada cabalgata.

Acabo de terminar una cabalgata nocturna con mi querido amigo. Lo estoy peinando y reviso que tenga comida y agua suficiente. Sé que hay un chico encargado de eso, pero me es grato cuidarlo a mi también.

Al cabo de un rato dejo a Éragon en su caballeriza y me devuelvo a la casa.

Justo cuando entro me avisan que el señor Archer me necesita. Me dirijo a la misma sala repleta de pantallas en la que descubrimos que Maggie muy probablemente sabía lo de Adam.

Desde ese día él señor Archer no sale de ahí. Por eso y porque gracias a esas cámaras se han conseguido muchas pistas.

En este momento la teoría más importante es que el lugar desde donde opera Adam es su propia casa. Sin embargo, el señor Archer tiene los planos y no hay tanto espacio para vivir ahí y controlar un grupo criminal a la vez.

Pero es una teoría que se tiene debido a que en las cámaras de la calle se alcanza a captar cómo todas las noches llega un grupo de hombres a esa casa. Vestidos igual a los que estaban cuidando a Adam y a Druke el día que mataron al líder de la Mafia Inglesa.

Sin embargo, no se alcanza a captar sí entran como tal a la casa o no.

Abro la puerta entrando a la sala repleta de pantallas y me paro al lado del señor Archer.

- ¿Me necesitaba señor?

- Sí, Matt. Mira, ¿reconoces a estas personas?- me dice mientras señala otras capturas de las cámaras.

Y claro que los conozco, ojalá no los conociera, pero al parecer hay más gente implicada a parte de Margarita.

Las imágenes muestran diferenres carros que se nota van cargados con muchas cosas y según el video de las cámaras. Todos van deprisa.

- Sí- me limito a decir y sigo mirando. Todos me dan unos segundos, pero entonces el Francés insiste:

-¿Quiénes son?

- Las del carro negro son mi vecina Elena con su hija Nataly. - las señalo- Las del carro rojo son Margarita y su madre Lydia. - miró la tercera imagen y no me creo lo que veo. Hace mucho que no veía a esa persona. - Y en la camioneta negra está la familia Rogers. La de mi otra mejor amiga Julia. Seguro ella va atrás con su hermana Abi, y adelante van sus padres Ester y Emiliano. - El padre de Juls... eso sí es un milagro.