Get away with me (Choni)

7

Toni POV
Después de un incómodo silencio me levanté de ahí sin decir nada y volví dentro.

Y si, no puedo creer que ya haya pasado más de una semana de lo acontecido.
Y para mi mala suerte hoy en domingo, Cheryl finalmente se casaría con mi hermano.
Todos están tan emocionados excepto yo, el hecho de que Cheryl sepa de mis sentimientos hacia ella no hace mejor las cosas.

Y para no hacer más incómodas las cosas Cheryl tuvo que dormir con Veronica, nadie hizo ninguna pregunta porque para ellos soy aveces "rara" y saben que puedo ser muy "bipolar" aveces.

— Antoinette, tu vestido está listo, no olvides usar tu corset. –mi madre entra a mi habitación y deja mi vestido para la boda, es color caqui y muy esponjado.

— No me gusta usar el corset, no lo usaré.

— Lastima, tienes que usarlo. –salió de mi habitación con prisa y cerró la puerta.

Es demasiado incómodo usar corset, no me gustaba usarlo y mi madre siempre me obligaba a hacerlo. Y como no quiero estar luchando con eso en la estupida boda, no haré caso a mi madre.

Me puse el vestido con cuidado y lo ajusté un poco. Poco después me peinaron "elegante" porque al parecer yo no podía hacerlo.

Una vez que terminaron conmigo salí de mi habitación y desde las escaleras vi que todos estaban abajo listos, excepto Cheryl.
Caminé silenciosamente para la habitación de mi hermana y la puerta estaba medio abierta, me acerqué para ver y Cheryl estaba de pie viendo por la ventana mientras vestía un vestido de boda, por lo que veo es el que la familia a usado por generaciones. Se ve muy linda.

Baje las escaleras antes de que me viera, seria incomodo que me descubriera viéndola cuando no hemos hablado en una semana.
Salí al campo para estar sola, y ademas tenia tiempo porque mi vanidoso hermano aun no terminaba de prepararse y se que durara mucho mas.

Traté de concentrarme en el sonido del viento, para tratar de olvidar el hecho de que Cheryl se casaría hoy con mi hermano, pero no funcionaba.

— Toni.

Y menos si ella aparecía a mi lado.

Me gire lentamente a verla, ella se sentaba incómodamente a mi lado, sabía que quería hablar.

— Me caso hoy. –soltó como si no fuera obvio y miraba al suelo.

— Lo se, no tienes que recordármelo. –mi boca hizo una mueca sin mirarla, viendo el mismo punto en el suelo que ella.

— Lamento decir que quería entender esto como si fuera algo anormal, definitivamente no es algo que esté mal, los sentimientos de una mujer a una mujer... son completamente normales.

Ella por supuesto que pensaba que estaba mal, una parte de mi se molestó por eso. No le hable en un rato porque ella estaba siendo muy grosera siendo tierna. Diciendo que quería entenderlo, pero solo se que ella estaba confundida.

— Me alegra que lo entendieras.

— No quiero casarme con tu hermano, digo... el es atractivo y de vez en cuando me trata bien, pero tu eres mas linda y me entiendes mejor.

— Hm... –murmuré con una mueca, por supuesto que ella me tenía que decir esto cuando justo se casa hoy, pero no me molesta–, lastima, pudimos tener una boda más linda que esta. –bromeé.

— ¡Podemos tenerla aún! –exclamó con los ojos abiertos.

— Claro que no –me reí–, tu te vas a casar hoy, no puedes tener dos parejas.

— Puedo estar mentalmente y físicamente en secreto contigo. –sonrió inocentemente.

Me reí profundamente con algo de nervios, me sorprende que ella esté siendo tan confiada, ella siempre suele ser tan tímida que es tierna.

— Está bien, puedes estar conmigo. –le di una gran sonrisa.

— ¿De verdad? –casi grita emocionada.

— Oye estoy bromeando, al igual que tu también se que estás bromeando. –reí y su cara cayó.

— ¡No estoy bromeando! ¿Por qué estaría bromeando? –se puso de pie y me extendió las manos para ayudarme también a levantarme.

Yo sabía que ella estaba bromeando, pero ahora que se puso de pie tan decidida me hizo dudar.

— ¿Hablas en serio? –pregunté esperanzada, si ella decía que era broma... la mataría. No hablo en serio, jamás la mataría.

— ¡Si! Yo de verdad extrañé que me hablaras, incluso extrañé tu mal humor y que te quejaras conmigo.

— ¿Qué? Yo no tengo mal humor, soy una persona muy agradable. –murmuré, sabía que ella tenía razón, yo aveces podía ser muy sensible y me enojaba por todo pero no quería aceptarlo.

— ¿Podemos? –hizo una boba sonrisa que me hizo reír.

— ¿Qué hay de mi hermano? –pregunté sarcástica, tratando de sonar preocupada pero inocentemente bromeando. Espero que ella entienda el sarcasmo.

— Al diablo con tu hermano. –hizo una mueca de asco, no debería sentirme bien porque ella le haga eso a mi hermano, pero se siente bien. Además no es como si el le hubiera preguntado si quería casarse, todos ellos la están obligando.

— Si, que se vaya al infierno.

— Entonces... ¿Puedo besarte? –preguntó con una gran sonrisa y mi boca cayó como nunca, yo nunca había besado a nadie antes, y ella pues... besó a mi hermano.

Podría permitirme una última broma.

— Mm... no, besaste a mi hermano, es como si besara a mi hermano y eso es asqueroso. –traté de contener mi risa cuando su boca cayó por segunda vez.

— No... lo prometo, yo me lavo la boca todos los días... y ademas solo me ha besado unas cuentas veces.

— ¡Lo ves! Hubiera preferido que lo dieras conmigo.

— Yo puedo olvidar eso... y fingir que lo di contigo.

— Ajá, puedes definitivamente olvidarlo.

Ella no me permitió bromear más, y bruscamente juntó sus labios con los míos mientras me tomaba de los hombros. Yo lo tomé con mucha sorpresa, se supone que debo cerrar mis ojos, Cheryl tenía los ojos cerrados y yo los tenía abiertos.
Sus labios comenzaron a moverse sobre los míos y decidí que era hora de cerrar mis ojos y comenzar con la seriedad.
Mis labios se movían con mucha inexperiencia al igual que los de Cheryl, pero ella parecía más experta porque con sus labios guiaba los míos.

Nunca creí que mi primer beso sería momentos antes de la boda de mi hermano... con su futura esposa. Pero aún así fue perfecto.