Un viaje en el tiempo | HP

XVII

Capítulo 17

Había pasado un día entero desde la presentación de Dianne, después de todo lo revelado, el profesorado al igual que el director estaban de acuerdo en que el resto del día debían tomarlo para digerir todo aquello. Pero nuevamente era la mañana y nuevamente estaban en el Gran Comedor, aguardando.

Muchas personas discutían lo que era más que obvio: El famoso trío de oro se estaba separando.

Y es que así era.

Molly y Arthur Weasley estaban allí, conversando con sus dos hijos mayores, mientras que Rondald, era regañado por Percy por su forma de comer. Pero Ginny y los gemelos no se encontraban allí, ni siquiera Harry o Hermione.

Ellos estaban en una mesa cerca de la de Slytherin, que había hecho aparecer el profesor Flitwick. Junto a ellos los merodeadores, junto a Lily; Sirius y ambas Marlenne, y los hijos de estos que les acompañaban.

Remus y Nymphadora tuvieron un gran debate interno sobre si abandonar la mesa de Gryffindor o no, ya que sentían deberle algo a los Weasley por algún motivo... Pero claramente, abandonar a lo más cercano que tenían a una familia, no les parecía nada bien, así que también se marcharon a la otra mesa.

Ginny tenía los ojos hinchados por el llanto nocturno, causando que sus hermanos no pararan de intentar hacerla sonreír. Y lo lograban. Ellos eran los únicos que lo lograban.

Harry conversaba con Dianne. La rubia le comentaba que por un tiempo pensó en ser auror, y confesó también que no se anotó porque el Jefe delos aurores era muy exigente. Harry se preguntaba quién había suplantado al gran Alastor Moody.

—Y Hermione, ¿qué quieres estudiar? — preguntó Lily interesada.

—Oh, bueno, sonará aburrido, pero me gustaría trabajar en el Departamento de Aplicación de la Ley Mágica... Aunque me gustaría involucrarme en el de Regulación y Control de Criaturas Mágicas.

— ¿Por qué en el Departamento de Regulación y Control de Criaturas Mágicas?

—Por su raro club. — dijo Harry, que estaba al tanto de la conversación.

—No es un "raro club" Harry James Potter Evans. — fulminó al chico, haciendo que Lily sonriera y Harry se encogiera en sí mismo.

—¿De qué habla Harry? — preguntó Lunático.

—Habla de la Plataforma Élfica de Defensa de los Derechos Obreros, P.E.D.D.O para simplificar.

—O simplemente "pedo". — se unió Fred, mientras George hacía una pedorreta con su boca.

La castaña bufó.

—Fundé el club en 1994, aunque me gustaría que en un futuro se convierta en una organización, pero por ahora eso no es posible por la falta de éxito. — rio. — La gente cree que los elfos no quieren tener nuestros mismos derechos, ¡pero vaya que sí! Que uno sea egoísta no respalda el maltrato. Además, será algo que convertiría una sociedad igualitaria a la comunidad mágica.

Todos en la mesa la escuchaban.

—Mi intención es ser la voz, no solo de los elfos, sino de todas las criaturas posibles. Todas aquellas que estén de acuerdo en poseer estos derechos. Ya sea un horario entendible de trabajo, una paga que cubra sus necesidades, el fin de los maltratos constantes, entre muchas otras cosas.

Sus padres ya lo sabían, pero confirmaron en ese momento que suhija sería una gran líder.

—No es como si quisiera que dejaran de prestar atención a tía Herms, pero me gustaría iniciar mi presentación.