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—Listo, toma

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—Listo, toma.-

Baji y Chifuyu estaban en las escaleras de emergencia como últimamente hacían, la escalera quedaba justo en sus ventanas así que se quedaban ahí hasta altas horas de la noche sin que sus madres supieran.

Chifuyu le entregó a Baji el peyoung yakisoba que recién preparó mientras el abría una lata de bebida.

—Gracias.- comenzó a comer mientras que Chifuyu tomaba un sorbo de bebida.

—Quiero ir a la playa.- Baji lo miró sin dejar de comer.

—¿Para qué?- dijo con la boca llena y Chifuyu le pasó unas servilletas.

—¿Cómo para que? A lo que uno va a la playa-

—Hace frío aun para ir a la playa.- Baji lo interrumpió.

—Se puede ir a caminar, no sé.- bajo la cabeza y se encogió de hombros.

—¿Que es lo que quieres hacer allá? No quieres ir solo a caminar.- dijo Baji pasándole el peyoung yakisoba, el pelinegro sabia que Chifuyu no quería ir solo por gusto.

Chifuyu lo miró, aceptó el peyoung yakisoba y le pasó la lata de bebida. —Acompáñame, va a ser entretenido.- mostró una sonrisa y Baji negó con una pequeña sonrisa.

—Dime que vamos a hacer.- pidió y Chifuyu negó.

—No, porque vas a decir "que aburrido"- imitó la voz grave de Baji. —Sólo acompáñame, te compro algo.- Baji rodó los ojos.

—Bien, vamos mañana.- dijo y tomó un sorbo de bebida.

—En la tarde.- declaró y comenzó a comer, Baji asintió en silencio.

Se quedaron en las escaleras hasta como las 2 de la mañana, la verdad ninguno de los dos quería ir a dormir pero mañana había escuela y Chifuyu se preocupaba por sus estudios.

—No quiero ir mañana.- dijo Baji desde la escalera, Chifuyu ya había entrado a su cuarto.

—Vas igual.- dijo simple.

—No me mandes.- su tono era de que claramente no lo decía en serio.

—No me pidas ayuda después.- Baji lo miró con los ojos entrecerrados.

—No te acompaño a la playa mañana.- Baji se levantó para irse.

—Baji-Saaan.- lo llamó antes de que se fuera.

Baji se dio media vuelta y miró a Chifuyu, se pasó una mano por la cara.
—No pongas esa cara.- Chifuyu frunció el ceño.

—¿Qué cara?.-

—Cara de...- se quedó en silencio unos segundos para encontrar la palabra perfecta.
—De gato, como de gato abandonado.- Chifuyu se empezó a reír a carcajadas y Baji lo miró serio. —Cállate, siempre pones esa cara cuando quieres algo y-y no.- Chifuyu puso la cara que pensó que era y Baji lo señalo con el dedo mientras abría más los ojos. —¡Si! Esa cara, no, no la hagas.- Chifuyu soltó una risita mientras Baji rodaba los ojos y empezaba a subir la escalera.

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