. five more minutes ♡︎

.07

Cuando se subieron a la moto Chifuyu apoyó su cabeza en la espalda de Baji.

—Estoy muy cansado.- murmuró y Baji sonrió, claramente Chifuyu no logró ver la sonrisa del mayor.

—Conmigo manejando, llegamos rápido.- dijo y Chifuyu se enderezó de golpe.

—No Baji-san, manejas como loco, quiero dormir no morir.- escucho una risa baja de parte del mayor y comenzó a andar haciendo que Chifuyu se afirmara primero de la cintura del mayor por lo repentino del movimiento.
El rubio con un leve sonrojo quitó las manos de la cintura de Baji y se afirmó del asiento.

—¿Y si te caes?- preguntó Baji refiriéndose a que se volviera a afirmar de su cintura.

—No me caeré.- respondió entre dientes.

—¿Seguro?.- frenó un poco y volvió a acelerar haciendo que el menor se agarrara de él si o si, el mayor se rió y Chifuyu rodó los ojos mientras se afirmaba con una mano de la cintura de Baji y con la otra del asiento.

—Es un pesado.- dijo en un murmuró.

—¿Quién? .- Baji fingió desentendimiento.

—Nadie...- respondió Chifuyu también en un tono sarcástico.

Cuando llegaron fueron directo al departamento de Chifuyu, este lo primero que hizo fue darle comida a Peke J mientras Baji buscaba una toalla para ir a ducharse.
En el momento que salió Baji del baño camino hasta la pieza del menor y entró, Chifuyu estaba acostado encima de su cama con su pijama ya puesto, tenía la cabeza enterrada en su almohada por lo que no sintió cuando Baji entró.

—Préstame una polera para dormir.- dijo Baji mientras se acercaba a donde Chifuyu tenía su ropa, este giró su cabeza para mirar a Baji, el pelinegro tenía la toalla amarrada a su cintura aunque se notaba que estaba con el boxer puesto, Chifuyu sin querer miró los abdominales de Baji.
¿Qué estaba haciendo? Era su mejor amigo, hombre, eso era raro.

Se levantó rápidamente y comenzó a buscar una polera de talla más grande, ya que Baji era una talla más por su altura pero Chifuyu solía tener algunas prendas más grandes.
Cuando encontró se la pasó y volvió a tirarse a su cama.

—¿Quieres que prepare peyoung yakisoba o otra cosa?- preguntó Chifuyu mirando el techo de su habitación.

—Peyoung yakisoba está bien.- dijo mientras afirmaba la liga para el pelo en sus dientes y se hacia una coleta dejando unos mechones de adelante fuera.

Chifuyu se levantó y sin mirar a Baji fue a preparar la comida. Cuando regresó Baji estaba con boxer y su polera en su cama de la misma forma que el estaba antes. Le tocó un hombro y Baji levantó su cabeza de la almohada.

Se sentó como indio y Chifuyu le pasó la comida mientras él también se sentaba de la misma forma al lado de Baji y comenzaba a tomar un largo trago de bebida que había traído.

—¿Tu mamá sabe que te vas a quedar?.- Baji asintió mientras seguía comiendo.

Chifuyu llamó a Peke J para que se acostara en sus piernas y se quedaron en un silencio que no era para nada incómodo hasta que Baji comiera la mitad, ya que ninguno de los dos tenía tanta hambre como para comerse ellos solos uno completo.

—Ten.- Baji le pasó el pocillo a Chifuyu y este lo aceptó mientras le ofrecía bebida. —Gracias.- dijo y llamó a Peke J para que se acostara ahora en sus piernas y dejara a Chifuyu comer.

Estuvieron un rato más en silencio, hasta que sintieron las llaves en la puerta de entrada.
—¡Llegué! ¿Estás?.- escucharon a la mamá de Chifuyu y sintieron como se acercaba a la puerta, la abrió sin golpear y se asomó.
Los dos chicos la miraron con una pequeña sonrisa, en especial Baji ya que la mamá de Chifuyu parecía no caerle muy bien aunque estaba agradecida de que Chifuyu tuviera algún amigo.

—Mamá, Baji se va a quedar.- dijo con la boca llena y su mamá elevó sus cejas.

—Me fue bien, muchas gracias.- dijo sarcástica y antes de que Chifuyu dijera otra cosa, volvió a hablar. — No hables con la boca llena.- advirtió señalándolo y Chifuyu tragó lo que tenía en su boca.

—Perdón.- dijo rápido. —¿Cómo te fue?- preguntó con un tono más agudo.

—No, ya no sirve.- miró a Baji.
—Baji-kun, cariño ¿Tu mamá sabe que te quedas?.- este asintió con una pequeña sonrisa y la mamá de Chifuyu volvió a mirar a su hijo. —Mañana van igual a la escuela.- Chifuyu asintió. —Cualquier cosa que necesiten me dicen.- mostró una sonrisa. —Buenas noches.-

—Buenas noches.- murmuraron los dos al mismo tiempo y la madre salió dejando la puerta junta.

—La puert...- dijo lo último más bajo ya que su mamá ya se había ido, siempre hacia lo mismo. Baji soltó una risa y Chifuyu lo miró mientras negaba y se paraba a cerrar la puerta dejando de paso el pocillo en el velador ya que no quería más. —Voy a sacar unas mantas para que quede como colchón y puedas dormir.- dijo mientras se acercaba a su closet.

—No me molesta dormir en la misma cama contigo, si a ti te molesta duermo en el piso, no me importa.- dijo y Chifuyu lo miró unos segundos pensando.

—Mi cama es muy chica vas a estar incómodo.- realmente no le molestaba, eran amigos y ni que fueran a dormir abrazados.

—Estoy cansado no me voy a dar ni cuenta y ya voy a estar durmiendo.- dijo y Chifuyu rió bajito, se encogió de hombros y se acercó de nuevo a la cama para prender la lámpara que estaba en su velador y así apagar la otra.
Baji se metió bajo las mantas y se giró hacía la pared, dándole la espalda a Chifuyu.

El rubio sacó de la mochila algunas cosas y se sentó en el suelo, apoyándose en su cama, estaba muy cansado pero tenía que terminar unas tareas y mañana no sabría si podría terminarlas antes de clase.

Todo el rato que estuvo haciendo su tarea, se le cerraban los ojos, en el momento que terminó fue como si se hubiera apagado porque sus ojos se cerraron, quedándose medio dormido.
Una mano en su cabeza lo despertó y lo hizo pegar un pequeño saltito por el susto.

—Chifuyu acuéstate y duérmete, haz la tarea mañana .- habló Baji adormilado, el rubio no dijo nada simplemente se levantó dejando sus cuadernos tirados, apago la lámpara y se tiró a la cama para finalmente dormir tranquilo.

Baji le daba la espalda y Chifuyu se acostó enterrando su cabeza en la almohada mientras abrazaba a esta misma, durmiéndose prácticamente de inmediato.

El mayor despertó un par de horas después, al sentir a Chifuyu darse vuelta y pegar su espalda a la suya.