(Ruido sordo).
Hermione abrió los ojos para encontrarse a sí misma nariz a nariz con la gastada y descolorida alfombra del piso de su dormitorio. Maldita sea, se regañó a sí misma mientras se levantaba con un codo para poder quitar cansadamente de su rostro su rebelde cabello. No se había caído de la cama a causa de una pesadilla en más de dos años, y no era el momento para volver a caer en ese hábito.
Sacudió su manta y la devolvió al colchón, luego se puso de pie sin ninguna intención de volver a la cama. Sabía muy bien por qué había tenido la pesadilla: en pocas horas, estarían irrumpiendo en el Ministerio de Magia, el lugar más peligroso del mundo. Su sueño le develó una aterradora escena de lo que sucedería si el plan salía mal y todos eran capturados. Se estremeció de nuevo cuando la visión de Ron atado a una silla y siendo torturado apareció en su cabeza. En definitiva, no había manera en que pudiera volver a dormir, al menos no en un futuro próximo.
Un vistazo por la ventana le dijo que aún faltaban unas horas para el amanecer. No había nada más que hacer, pero hizo lo que siempre hacía cuando no podía dormir en semana de exámenes: estudiar un poco más. Regresó a la mesa de la cocina a examinar los mapas y sus planes una vez más. Se aparecerían en el callejón; abrirían la puerta del teatro abandonado; se encargarían de esa menuda bruja; la arrastrarían hasta meterla al teatro y tomarían alguno de sus cabellos - -
Una y otra vez Hermione recitó el plan, revisando las listas de vez en cuando para asegurar exactitud. Después que terminaba, iba a la bolsa de cuentas para verificar que todos los artículos necesarios estaban guardados de manera segura y al alcance de la mano. Absolutamente nada podía salir mal ese día. Sus vidas dependían de ello.
Kreacher llegó al amanecer y saludó a Hermione alegremente. Ella trató de saludarle también, pero en lugar de ello optó por volver arriba y vestirse; no le importaba llegar al Ministerio una o dos horas antes, era mejor que sentarse por allí y escuchar su corazón latir con fuerza.
En su camino de vuelta abajo, se encontró con Ron en la escalera e instantáneamente se puso mil veces más ansiosa. La semana anterior habían dejado de compartir la cama, se había enojado con él por alguna razón que ya ni siquiera podía recordar, y se había regresado obstinadamente a su antiguo dormitorio. Ron no había hecho comentarios sobre el cambio; de hecho, se le veía sombrío y solemne, como si se hubiese imaginado que eso sucedería. Hermione solamente deseaba poderse tragar su orgullo y pedirle que le permitiera regresar, pero ambos sabían que eso no sucedería en el corto plazo.
Se abrazó e hizo todo lo posible para parecer normal aunque un chorrito de aprehensión se deslizaba discretamente por su espalda. Algo estaba cambiando entre ella y Ron, podía sentirlo en lo más profundo de sus huesos; pero no tenía ni idea de qué diablos era aquello. "Buenos días".
"Buenos días" la saludó con un bostezo. "¿Estás lista para esto?"
"No" respondió Hermione con honestidad. Harry parecía estar convencido de que hoy era el día, pero a ella no le hubiera importado pasársela investigando por lo menos una semana más. Probablemente Harry estaba molesto porque Snape había sido nombrado director, y quería actuar de la manera que consideraba conveniente. Pero Hermione no estaba tan segura de que, lograr que los capturaran a todos, fuera el curso de acción más apropiado a tomar.
Ron la miró inquisitivamente. "No pudiste dormir nada, ¿verdad?"
"Lo suficiente," Hermione se defendió.
"¿Cuánto?"
"Alrededor de dos horas."
"Estás loca", Ron murmuró cariñosamente y levantó la barbilla hacia las escaleras. "¿Harry ya se levantó?"
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Hermione Granger Y Las Reliquias de La Muerte
FanfictionEl final de la serie desde el punto de vista nuestra Hermione- Descubran millones de cosas ¡que ni siquiera el niño que vivió sabía! Este fic NO ME PERTENECE, es propiedad de Ann Margaret y traducido por GrangerWeasley. Traducción de uno de los Lon...