Hermione Granger Y Las Reliquias de La Muerte

CAPITULO 16

"¿Por cuánto tiempo esto continuará?"

Hermione ni siquiera se molestó en darse la vuelta y se agachó para continuar en su búsqueda de comida. "¿De qué estás hablando?"

"De 'Esto'," Ron enfatizó. Caminó hacia ella y se arrodilló a su lado para poder tenerla frente a él. En las últimas semanas Hermione había estado tratando de evitarlo a toda costa, sólo volteaba a verlo rápidamente cuando era absolutamente necesario. "¿Cuánto tiempo más esto seguirá?" Ron repitió obstinadamente.

Hermione mantuvo los ojos fijos en la tierra, tratando de no maravillase de poder escuchar los latidos del corazón de Ron que se escuchaban a través de su propia caja torácica, a pesar de que no se había atrevido a tocarla: estaba tan nervioso. Hermione tuvo que admitir que también estaba un poco nerviosa; en las últimas semanas, se había asegurado de que ella y Ron no estuvieran nunca solos, y él no había cuestionado tal actitud, dándole espacio para tranquilizarse mientras intentaba ganarla de vuelta con su comportamiento sorprendentemente complaciente y sus chistes muy oportunos. Por poco y la atrapa un par de veces, especialmente cuando convenció a Harry para ir con los Lovegood. Estaba tan sorprendida, incluso asombrada de que por primera vez se hubiera puesto de su lado - Ron siempre había tenido dificultades para ponerse en contra de Harry - y casi le regresa una sonrisa. Ron habíacambiado, sí, no era tonta y sabía que sólo lo hacía para tenerla de vuelta a su favor, pero aún así seguía siendo emocionante. Y era cada vez más difícil permanecer enojada con él. Y luego estuvo esa ocasión cuando él le sonrió de aquella manera, al decirle que era una Genio por la forma en que orquestó su escape de la casa de los Lovegood, las esquinas de sus ojos se habían arrugado hacia arriba y brillaban con tanto orgullo y alegría, incluso con amor -

Pero no. No podía pensar en eso. No podía perdonarle y hacer como si  nada malo hubiese ocurrido alguna vez entre ellos. No sólo los había traicionado, también la había devastado, casi más allá de toda posibilidad de restauración. Eso no desaparecía con unas cuantas sonrisas.

Mal interpretando su silencio como incierta vacilación, Ron siguió adelante con entusiasmo. "¿Por cuánto tiempo esto seguirá?" dijo Ron una vez más.

Esta vez, Hermione tenía lista una respuesta. "Tres años".

Ron parpadeó. "¿Tres años? ¿Me estás dando una sentencia?"

"¿Por qué no?" Hermione se puso de pie para cruzarse a un arbusto más prometedor, sacudió rápidamente sus pantalones de mezclilla cuando se alejó. Una ligera llovizna comenzó a golpetear contra la sombría tierra, fue entonces que Hermione aceleró su paso para poder terminar su tarea antes de resfriarse. A pesar de que estaba inusualmente cálido para ser febrero, todavía había un definido frío en el aire y se estaban agotando sus reservas de Poción de Pimienta. "Y si vas a seguir insistiéndome, al menos deberías de ser útil cuando lo hagas y así me ayudarías a buscar un poco más de bayas."

Hermione medio esperaba que Ron comenzara a gemir por tan raquítica dieta, pero aún estaba jugando  a traigamos-de-vuelta-a-Hermione-a-su-buen-ánimo, y se apegaba a todas y cada una de sus demandas, por lo que Ron se mantuvo en el lugar que Hermione acababa de dejar y continuó la búsqueda. "¿Por qué tres años?"

"Porque fue el tiempo que te llevó darte cuenta que yo era una chica", respondió Hermione rápidamente.

Podía oír la sonrisa en la voz de Ron, incluso desde donde estaba. "Bueno, eso no es verdad", no estuvo de acuerdo con ella. "Me di cuenta de que eras una chica desde mucho tiempo antes, justo cuando te conocí. ¿Significa eso que me has perdonado?"

Hermione dio un paso atrás y dio la vuelta para darle su famosa mirada que a menudo causaba miedo en los de primer año haciendo que se marchitasen en el acto. "¿Ahora crees que eres gracioso?"