OUR SIMPLE STORY

Nuestra simple historia...

-Entonces retrocediste todo un día y desmantelaste el helicóptero- Hablo Kusuke con el aparato inhibidor en sus manos.

-Sabes, será muy aburrido sin ti- Siguió hablando mientras apretaba el dispositivo

-“Lo sé”-

-Pero es su deseo- Respondió su madre con una sonrisa y lágrimas en los ojos, su hijo ya no tendría que preocuparse por los enseres de último minuto.

Aclararía todo cuando ya no tuviera esos poderes…

Se lo diría.

Era el primer día, Kusuo había citado a todos en un salón de desuso para hablar acerca de sus poderes y Hiroshi estaba mas que nervioso debia ser algo grande para haber citado a casi todos sus conocidos ahi inclusive estaba el espiritista, la vidente estrella y aquel perico que no se callaba nunca.

-Aunque sabemos de lo que hablara Kusuo es divertido ver a todos aquí reunidos, hubiera preferido que aclarara la “otra cosa”- Mirando a Hiroshi pero luego volvio a hablar de otro tema

-Akechi puedes callarte- Aiura también sabía de que trataba todo eso como el espiritista a su lado.

Hiroshi estaba aun más perdido se suponía que nadie aqui sabe de que quería hablar y sin embargo aquellos tres sabían algo. Salió un momento poniéndose nervioso por la presencia de aquellas personas que comenzaron a jugar y vio a Kusuo cerca una ventana rota.

-¡Kusuo! ¿Te lastimaste?- “Pero que...” vio la ventana rota pero era demasiado grande para que lo haya dañado una fisura o inclusive una pelota.

-Estoy bien- Eso de hace un momento, habria sido eso… si era lo que pensaba tenía que correr a casa o dañaría a alguien más y eso no se lo permitiría.

Sin importarle más comenzó a correr.

-¡Kusuo!- Él no se quedaría parado tenía que ayudarlo, saber si de alguna manera aquella mirada de terror que le dedicó fue por su causa.

Echó a correr.

La carrera repentinamente se volvio pesada para el ex psíquico, la actividad física de Saiki era nula en ese momento, pues su cuerpo normal no lo soportaba no sabia quien lo venia siguiendo hasta que fue por una calle donde el indicador para peatones paso a rojo...

Hiroshi no vio eso y lo vio pasar la acera con relativa facilidad quiso alcanzarlo manteniendo su ritmo, corrió.

Y un claxon sonó con fuerza.

Kusuo volteo viendo algo que le helo hasta los huesos.

No supo como lo hizo pero llego a su lado, lo abrazo y alzo su mano izquierda deteniendo el coche, su cuerpo temblaba estaba aterrado.

-Ku...kusuo- Su voz salio temblorosa “Como lo…” -Ahg- El abrazo se intensificó tronando sus huesos Saiki rindió cuenta y dejo de abrazarlo checando su rostro, ninguna herida ningún rastro de sangre todo bien…

-Saiki tus ojos…- Espantado tambien tomo el rostro del peli rosa y limpio las gotas que caían de sus ojos… no eran lágrimas -Sangre…-

La cara de Hiroshi era de terror cosa que noto el pelirosa tocando sus pómulos vio algo que no era normal, debía apurarse para llegar a su hermano.

Constatando que Hiroshi siguiera bien, soltó su agarre.

-¡Espera!- Eso era demasiado para Hiroshi primero el susto del carro, segundo el repentino choque en la mano del peli rosa que dejo una huella en la cajuela. El conductor igual de espantado se bajo reclamandole su insensatez y se marcho constatando por igual que el chico estuviera bien. De seguro eran muchas horas sin dormir concluyó al no darle una razón lógica a tremendo golpe.