Canciones del pasado

"Martes"

Las bromas siempre buscan ese rastro de inocencia, el que no busca hacer daño a nadie, pero a veces pueden llegar muy lejos a pesar de no ser del agrado de nadie, y en esta oportunidad...naah, a todos les gustó o les dio igual, excepto a quien todos ya conocemos bien como el aguafiestas, a quien no le gustan las bromas, mucho menos si son dirigidas a su persona.

Lastimosamente no le pareció gracioso ese paquete de broma que le armó Michael. Tenía unas ganas insaciables de venganza hacia él, aunque si lo hiciera no se vengaría con una bromita de regreso o lanzarle un balde de agua en la cabeza, no no no, si va a hacerlo deberá ser como mínimo romperle una pierna, hacer un nudo con sus brazos o colgarlo boca abajo desde el techo, cualquier cosa que lo haga sufrir y no lo mate, así es más divertido.

Su sentido de venganza y diversión están más que alejados de lo que es una simple broma...

— Veamos quién se reiría después de 72 horas colgado en el techo...

— ... ¿Qué?

— No estoy hablando contigo.

— ...Ya supéralo, ¿quieres?

— No es tu problema.

— ... ¿Sigues planeando tu venganza? Solo fue una broma, dramático.

— ¡CÁLLATE!

— ...NO ME GRITES.

— Grrr....

Y ahí estaban ambos, peleando nuevamente.

Sorpresivamente Freddy no había montado un alboroto después de ver a los ahora conocidos como "Marvelous melodies", conociendo su actitud exasperante y dramática; en cambio, se quedó ahí, mirándolos en silencio por un rato sin reaccionar a nada ni nadie, o al menos hasta que un simpático elefante de color naranja se acercó a saludar, haciéndole varias preguntas y reflejando lo emocionado que estaba por conocer a la banda de los Rockstars del que tanto les habían hablado.

El oso castaño simplemente le dedicó una sonrisa bastante extraña, parecía una mueca, daba miedo, parecía una bestia a punto de atacar...y así fue cuando Michael se acercó.

Gracias a eso lo habían regañado y ahora estaba encerrado en la oficina de Helpy y Michael hasta que el local cerrara. Según el chico, esa no era la actitud que un líder debía tomar y mucho menos frente a los invitados, pero esto solo lo decía para deleitarse aún más con la notable ira del oso.

¿Y Lefty qué hacía ahí? Pues Michael lo encerró con él para que "le hiciera compañía", pero en realidad el chico solo quería ser algo más precavido con él y mantenerlo lo más lejos posible, si había cumplido con su misión, entonces habría dos ojos más, mirándolo fijamente y esperando para atacar...o al menos esa era la percepción que tenía sobre esos "monstruos", y quizás no eran muy exageradas del todo.

Ah sí, y Helpy también le había pedido que le acompañara. Se hubiera quedado él mismo, pero estaba molesto con Michael y Freddy por sus tonterías y también estaba ocupado.

— Tsk, ¿¡por qué rayos me toman a mí para sus estúpidos juegos!?

— ...Porque eres el más idiota.

— ¿Aparte de eso?

— ...Porque es fácil hacerte enojar, supongo.

— ¡Tú también eres así!

— ...Pero a mí me da igual.

— Les juro que si me vuelven a hacer una broma como esa, los dejaré sin dedos.