"Bienvenido, Rockstar Foxy"

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– ¡Aún no llegan y ya casi es tiempo de abrir! ¡Aaaah esto es un desastre!

– Uuuh, Helpy, qué no falta como...No sé, ¿Dos horas para abrir?

– Seeh, ella tiene razón, ¿Para qué nos despertaste?

– ¿Y les parece que dos horas alcanzarán para las cosas que debemos hacer?

– Helpy, sé que esto de los escenarios es emocionante, yo también estoy muy ansioso, pero es demasiado temprano, lo más seguro es que siquiera lleguen a la hora acord-...

– ¡Ahí vienen, ahí vienen!

– ¡FUERA DE MI CAMINO!

Freddy corrió hacia la ventana empujando salvajemente a sus dos compañeros en el proceso. Llevaba toda la noche sin poder dormir y disimulando su ansiosa espera para poder presentarse de una vez con el resto de la banda. Ya hasta había planeado su primer saludo y qué hacer si este llegaba a salir mal, todo estaba bajo control, o al menos en su mente.

Pegó su rostro a la ventana junto con Helpy, ambos con una sonrisa infantil observando a cuatro hombres bajar de una camioneta y dirigirse a la puerta del establecimiento.

Inmediatamente el pequeño oso blanco saltó de la silla que usaba para llegar a la ventana y corrió hacia la puerta con la misma sonrisa para recibir de la mejor manera a los trabajadores. Tuvo que pedirle a Freddy que la abriera, era una puerta muy grande y pesada para él, pero no le tomaba mucha importancia, ya estaba acostumbrado a que su tamaño le limitara algunas cosas, pero al menos confiaba en su intelecto.

– ¡Buen día, señores! – los cuatro sujetos miraron a Freddy, pensando que era quien había saludado, pero él solo cambió su sonrisa por una mirada seria y obvia, apuntando hacia abajo. Bonnie y Chica también apuntaron hacia el pequeño oso con cierta mirada de burla. – Uuuh, aquí abajo...

– Oh, disculpa, uh... – sacó un papel del bolsillo de su camisa y lo leyó. - ...Helpy, ¿Cierto?

– ¡Así es! – contestó con una sonrisa ignorando el momento bochornoso de hace unos segundos. – Un gusto conocerle, señor Steven.

– El gusto es mío. – devolvió el papel a su bolsillo. – Dime, ¿ya podemos iniciar con la instalación del escenario nuevo?

– Desde muy temprano. Sígame, los llevaré al almacén.

– No te preocupes, yo remodelé este lugar, me sé la dirección. – sonrió con amabilidad y cierta pizca de presumido.

– Oh cierto, jejeje... – colocó sus bracitos detrás de su espalda con un leve sonrojo. – ¿Entonces no necesita ayuda por aquí?

– No con los escenarios, mis compañeros me ayudarán, pero sí con el resto. Ya sabes, traer a esos otros para tomar las medidas y tener las pruebas de resistencia, aunque no me preocupo, la madera que traje siempre la uso y es igual de efectiva.

Ay no – pensó Helpy al recordar la pequeña y cruel bromita de Michael hacia el líder de la banda. Ahora él tendría que aguantar los reproches. – ¡C-claro! Los tendremos listos para c-cuando ya esté el escenario. – sonrió con nerviosismo en su voz.

– Dígame doctor, ¿A qué hora estará listo? – preguntó Freddy.

– ¡Pff- jajajaja! No soy doctor, soy un profesional graduado en albañilería. Mi trabajo es básicamente arreglar edificaciones grandes o pequeñas como esta, o también construirlas, depende de lo que el client-...

– Sí, sí, sí, todo eso es muy interesante – interrumpió temiendo un discurso. – ¿A qué hora dijo que estará listo?

– Como en una media hora, tal vez un poco más, es solo poner piezas y tornillos después de todo, pero... – miró al contrario de pies a cabeza – Pensé que el escenario final era el predicho para ustedes, no este. Si no es así, estamos en problemas.

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