CAPITULO 13.

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CAPITULO 13

FRANCISSCANA

Faddei y los demás esperan a que Abby y yo salgamos del probador con los vestidos puestos, este vestido azul me gusta mucho, debo admitir que la elección de Laureano ha sido acertada.

Un leve enfado se ha instalado en mi desde que insinuó todas esas cosas sobre mí, queriéndome dejar por el piso, estuve a punto de lanzarme sobre él y deshacerle la cara con mis puños, pero me contuve.

No puedo dejar que él esté varios pasos delante de nosotros, él tiene que ser el sorprendido, no nosotros.

Sacudo la mano de pensamientos que me aturden, saliendo del vestidor al mismo tiempo que Abby, su vestido es majestuoso, se ve realmente hermosa. Ella me sonríe al verme, me observa detenidamente mientras alza sus pulgares en señal de aprobación.

---No se ha dónde mirar---la voz de mi hermano nos llama la atención.

---Es cierto, lucen hermosas, pero Feddei les ganara---el enclenque se encuentra al fondo del lugar, casi cerca de Laureano, quien sostiene un vestido rojo.

Este al verme me sonríe, su mirada me recorre y un frio me atraviesa, causándome estragos.

---Lo dices porque estás enamorado---le digo mientras le sostengo la mirada a mi supuesto primo.

---Es cierto---se ríe, trae dos pares de tacones, unos plateados y otros dorados---toma---me entrega los plateados y los dorados a la rubia que está a mi lado.

---Excelente elección---le digo al paisa.

---Vámonos ya---tan cariñosa como siempre la Feddei.

--- ¿Celosita?---la observo con burla, Faddei se está reventando de la risa ante mi comentario.

---Francisscana---me reprende.

Entro nuevamente al probador para quitarme la pieza, mañana en la noche será el gran día, la bomba reventará.

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---Hasta que regreses a clases te quedaras con nosotros---nos encontrábamos en el Encore Boston Harbor.

¿Una habitación para todos?

Claro que no, y eso que no tenemos que llamar la atención, pero a mi gran hermana la pitufina mandona se le dio por pedir todo el hotel.

--- ¿Y Abby?---le pregunto al mayor de nuestra progenie.

---Se quedará allá en el campus, es por su bien, pasare por ella en la noche y ya---sale del recibidor.

---Se la quiere coger---vuelve a decir Feddei.

--- ¿Y a ti qué?---le responde Dylan algo irritado---solo sabes repetir se la quiere coger, por Dios Feddei ¿Quién no quiere coger?---nunca lo había visto hablándole así.

---No lo entiendes---le dije---no es que Feddei quiera juzgar las acciones de nuestro hermano, critica que la vaya hacer caer---salgo del recibidor viendo el lugar---las costumbres de nuestra casa son diferentes a la de los americanos.

---No justifica---lo detengo.

---No justifica los pensamientos de mi hermana, pero cuando te enseñan algo que ves a tus padres poner en práctica, crees que está bien---sé que ella no lo hace por malo---voy a cumplir veinte años y nunca he dado un beso y Feddei esa ni se diga, nos enseñaron que solo estando en el altar se podría hacer tal cosa, las mujeres que toman la decisión de dar esos pasos no la hacen menos mujer, creo que ellas son más libres que nosotras---paso mi mano por el enorme sofá que se encuentra en la primera sala---ellas son autónomas de sí mismas, nosotras estamos atadas a un pensamiento que ni siquiera creamos por nosotras mismas.

ROMPE CRANEOS (Reescribiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora