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DE VUELTA A NEW YORK

La primera semana de vacaciones la familia Kang pasaría un rato con los abuelos en Busan para después irse a Nueva York una decisión importante que tomaron sus padres e importante para la rubia pero sabría que este viaje sería distinto ahora tenía a Jungwon y con el sus planes no se llevarían a cabo si hubiera una probabilidad de ser novios unos años más hasta que cumpliera los veintiuno ella regresaría pero ¿y Jungwon? en donde diablos entraría en sus planes es más probable que el no iría con ella a vivir en el apartamento que dejaron allá. Miles de pensamientos comenzaron a darle dolores de cabeza.

— ¡Argh!

— ¿Margot estás bien? — pregunta despacio.

— Creo que me estoy mareando por el movimiento.

— Hija no vayas a vomitar aún no llegamos a una caseta.

Asintió pesadamente que mejor cerró los ojos esperando a que su padre llegará lo antes posible.

Se detuvieron en una gasolinera en medio de la nada que estaban baños y tienda de convivencia para llevar algo con que comer.

— Diablos si necesitaba ir al baño — llega con su hermana recostándose.

— Ten para las náuseas te ayudará hasta que lleguemos a la casa de la abuela.

Mientras bebía miro el lugar donde estaban sentadas a lo lejos era bosque se oía el canto de los pájaros queriendo estar un rato más.

— ¡Vamos chicas todavía tenemos camino que recorrer! — grita su mamá ya entrando al auto.

Ambas con pereza se levantan del mesón de madera.

...

Con siete horas llegaron a las doce a casa de su abuela a pasar un fin de semana, el lugar donde vivían los abuelos era un pueblito pero uno adinerado por lo que puedes ver las casas o cabañas del lugar todas y cada una tenían chimenea por el frío que se avecina en estas épocas.

— Abuela es un gusto verte, te extrañe.

— Nari, Yunseo las esperaba desde hace rato tardaron mucho.

— Mamá hubo tráfico al llegar.

— Que bueno que están aquí todos — sonría a todos.

— Iré a la cama me duele la cabeza desde hace un rato.

— Descansa mi adorable rubia — le deposita un tierno beso.

A la mañana siguiente comenzarían desayunando y jugar en el prado. Por alguna razón debía de quedarse en casa para hablarle a Jungwon y platicar acerca del viaje a Nueva York quería que fuera.

Entre pesca y dardos su día finalizó por último los abuelos pondrían leña para contar historias de terror al igual que preparar una taza de chocolate. Por otra parte Tay su mascota estaba acostada a un lado de ella mientras ella leía un libro.

Llega un mensaje por parte del pelinegro.

Jungwon<3
¿Puedo marcarte?
22:15

𝐈𝐫𝐫𝐞𝐯𝐞𝐫𝐬𝐢𝐛𝐥𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora