Temporada II. Capítulo IV.

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La líder de Amegakure, es conocida por todos como la ex-miembro de la organización terrorista que años atrás aterrorizó a las cinco naciones. Su historia después de su "muerte" la conoce una sola persona en específico, se dice que murió a manos de Uchiha Obito pero no fue así. 

Flashback

Después que Obito la atravesará y cayera "muerta" el recuerdo fue borroso, solo pudo ver una sombra y todo negro.

Tiempo después se despertó cuando la guerra estaba en auge, pero no se pudo mover su cuerpo le dolía como el infierno, trataba por todos los medios de levantarse e ir con sus amigos, pero pequeñas gotas saladas cayeron por su mejilla, su único amigo vivo había muerto por usar todo su chakra. 

No le quedaba nada que la atara a esta vida, no quería estar sola. Miró alrededor de la habitación y vio una pequeña mesa de luz con una lámpara, ese brusco movimiento hizo que su cabeza empezara a doler, cayó de nuevo en la cama, miraba el techo como si fuese lo más interesante. 

La puerta fue abierta por un hombre de unos treinta y dos años, de cabellera negra y ojos azules que reflejaban felicidad y esperanza, ella no supo por qué. 

—Me alegra que estés viva— dijo por fin el hombre acercándose a ella para ver si sus heridas por fin sanaron.

—A mi no. ¿Por qué no me dejaste morir?—. El hombre pensó la respuesta. 

—Porque la vida no es para desperdiciarla—. 

—Yo quería morir— dijo, pensó la respuesta unos segundos y volvió a hablar —No, quiero morir—. 

—¿Por qué?—. 

—Nada me ata a ese mundo, no tengo a nadie—. 

—Sé quien eres y aunque no soy nadie para decirte que hacer, creo que deberías vivir—. Konan lo mira y el hombre a ella. 

—¿Por qué?—. 

—Porque tus seres queridos así lo querrían—. Dicho eso, se levantó y desapareció de la vista de ella. 

Konan pensó en las palabras del extraño, Yahiko y Nagato hubieran querido que viva y aunque no confiara en él extraño lo haría, viviría y no solo por ella, sino también por ellos y para poder ver la luz del mundo que su amado y amigo querían. 

Después de finalizada la guerra, un período de paz se instaló en las naciones, Konan veía esto con una sonrisa y dispuesta a seguir con la paz, se volvió líder de una Amegakure destruida trabajo día y noche por varios años después Amegakure fue consolidada como una gran Aldea por las otras cinco. 

Tampoco se quedó estancada con recuerdos del pasado, a pesar de todo logró enamorarse de un hombre maravilloso que la quería con su pasado oscuro, fueron tres años de lucha para ella, no aceptaba estar enamorada hasta que un día sucedió, él la invitó a salir y acepto, ahora solo recordaba a Yahiko como un amigo, su corazón pertenecía a otro. 

No tardaron mucho en dar a conocer su compromiso, la boda fue la mayor fiesta organizada por el pueblo y su más grande regalo fue que por ese día no llovió. 

Fin flashback.

Esa paz llegó a su fin cuando la Tsuchikage llegó sin previo aviso y solicitó hablar con ella, Konan aceptó la reunión, pero nada fue como la pelinegra lo planeó, terminando con la oficina destruida pero su líder a salvo. 

Desde ese día ha habido ataques contra ella y su Aldea, se han podido defender pero hay un punto donde ya no se puede.

—Esa zorra cree que le tengo miedo— murmuró mirando por la ventana, su mano derecha entra en la habitación, trae un pergamino con el sello de la arena, ella lo lee atentamente y un poco de esperanza se instala en su pecho. 

Himawari Uzumaki-NamikazeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora