Capítulo nueve:

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La alegría de un común fin de semana tiende a rotar para él, a veces puede estar de lo mejor y emocionado por ver a su novio de vuelta, o; contrario a ello, ni siquiera querría verle

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La alegría de un común fin de semana tiende a rotar para él, a veces puede estar de lo mejor y emocionado por ver a su novio de vuelta, o; contrario a ello, ni siquiera querría verle. Como ahora.

Día sábado por la mañana; sabe que él no tarda mucho en llegar junto a la otra chica, es más, escucha y puede entender la emoción de los demás niños mientras él, simplemente ha decidido no levantarse de la cama. Aún con su cobija cubriéndole el cuerpo entero, siente un peso a la orilla de su cama, sabe que se trata de Minhyuk en cuanto un leve golpe le da a su pierna, obligándolo a salir de su mini cueva improvisada.

— ¿Pasa algo? Wooyoung hyung viene en camino y tú, que deberías ser el más emocionado aquí, ni siquiera te has levantado... ¿Estás enfermo? — cuestiona, acercando su mano hacia su frente para asegurarse que está equivocado y que, en efecto, algo más allá de una fiebre podría estar ocurriéndole a su amiguito.

— Paso de hyung ahora, Minhyuk. Me ha hecho enojar.

Desde el último fin de semana, San ha retenido ese pequeño coraje de haber tenido que soportar ver una escena acaramelada entre su novio y la otra escuálida; como se ha acostumbrado a  llamarle. Alegando que, han terminado y no quiere volver a ver a Wooyoung de vuelta.

Quiere decir, en teoría, le ha puesto los cuernos.

— ¿Pero por qué? Si hyung es increíble, además, Soojin dijo que traería más juguetes...

— ¡Que no! ¡Que no seré ningún cuernudo! — de alguna manera, ha dejado salir ese estúpido pensamiento de su cabeza, liberándolo así en voz alta, causando que su amigo simplemente se ría como un desquiciado y él, ha acabado cubierto por su cobija de nuevo.

— ¿Qué has dicho? ¿Cuernudo? San... — nota al chico limpiar unas lágrimas, mientras libera un suspiro y vuelve a él. — No eres un animal para tener cuernos...

— O que me los pongan... - responde por lo bajo.

— Como sea, sal, o le diré a Chae que le dices escuálida a su sobrina. — amenaza, y San se reincorpora de golpe, y sabe perfectamente que haberla llamado así frente a su amigo, había sido su total perdición.

— ¡Que no quiero, Minhyuk! Me siento enfermo — si es que la decepción puede considerarse una enfermedad, pues él la tiene. Y no, no gusta de ver a nadie ni por un ratito más, exceptúa a su mejor amigo Minhyuk porque... bueno, es Minhyuk.

— Le diré a Chae que venga a cuidarte entonces. — y se va, dejándolo solo de vuelta.

Pasados unos minutos, logra escuchar con claridad que aquella pareja ha llegado, lo deduce, por los gritos de los pequeños gritando "Wooyoung" por doquier, y porque Chae no ha llegado a verle, quiere decir, si supuestamente está enfermo, ¿No debería haber llegado ya con el jodido botiquín para exagerar?

Decidido a, realmente no salir en lo absoluto, se esconde bajo su cobija de vuelta, cerrando sus ojitos y esforzándose un ciento por ciento para no llorar... porque estar solo en su habitación, supuestamente enfermo y de repente siendo un cuernudo, haría llorar a cualquiera. Así, hasta que cayó dormido.

♧ 𝐂𝐡𝐢𝐥𝐝𝐡𝐨𝐨𝐝 𝐥𝐨𝐯𝐞𝐫𝐬 - 𝐖𝐨𝐨𝐒𝐚𝐧 ♧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora