𝙃𝙖𝙞𝙠𝙮𝙪!! [𝙤𝙣𝙚-𝙨𝙝𝙤𝙩𝙨] ( EDITANDO )

♡ Bokuto Koutaro - Game

⚠️ Bokuto timeskip, top surgery scars. ⚠️

Ahora son cerca de las diez de la noche. El último partido de Bokuto acaba de terminar hace solo unos cuantos minutos y esperas sentado en las gradas a que todos los presentes poco a poco comiencen a retirarse a sus hogares.

Cómo siempre, te ha pedido que vayas a verlo. Te sientas tan cerca de la cancha como puedes cada vez que vas, de esa forma te aseguras que te reconozca entre las personas y voltee a mirarte cada vez que anota un nuevo punto, tal como lo hacía en la secundaria. Aún es tan adorable.
Eligieron caminos diferentes al acabarla, pero nada entre ustedes había cambiado lo suficiente para que, por algún motivo, dejarán de ser amigos, así que ahí estabas cada fin de semana o cuando te hacías un tiempo en el trabajo o... Realmente, cada vez que él te lo pide. Siempre estás ahí, igual que él para ti.

Pero ahora el partido ha acabado, así que no tiene demasiado sentido seguir sentado en las gradas. Te levantas y te diriges hacia los vestuarios que, en secreto, él te enseñó cómo llegar; uno, dos, tres pasillos hacía la derecha y luego uno hacia la izquierda. La tercera puerta blanca, la que tiene las estrellas doradas.
Siempre tienes que quedarte escondido durante un par de segundos antes de poder entrar, esperas a estar seguro de que el resto del equipo ya se ha marchado antes de girar el picaporte y colarte dentro. De alguna manera Bokuto siempre consigue engañar a todos con una excusa tonta que le permite quedarse ahí por más tiempo o incluso saltarse las celebraciones extravagantes del equipo.

- ¿Bokuto-san? - preguntas en un ligero murmullo mientras te adentras en la pequeña habitación luego de haber contado a los últimos siete chicos dejar la sala solo unos segundos antes. Alzas la cabeza y los ves ahí, sentado en una de las bancas mientras termina de ponerse unos calcetines blancos que le cubren prácticamente toda la pantorrilla.

- ¡( t/n )! ¡por fin llegas, llevo una eternidad esperando verte! - salta encima de ti, abrazándote como si de verdad hiciera años desde la última vez que ustedes dos se han visto, pero estás bastante seguro que estuviste aquí el martes pasado... También el jueves y apenas es sábado. - estoy esperando hace una eternidad.

Técnicamente, eso tampoco es verdad, porque los últimos chicos del club acaban de dejar la habitación segundos antes de que tú entraras, pero hay una regla no escrita sobre evitar a toda costa negarle cosas a Bokuto-san cuando está haciendo pucheros... Exacto, como ese que está haciendo justo ahora.

Le sonríes con ternura, dándole un par de palmadas en la cabeza para, de alguna forma, intentar decirle "ya estoy aquí, no hay por qué sentirse triste". A veces parece tan tierno que no es difícil pensar en comérselo a besos.

- Sabes que siempre vengo... - dices con suavidad y él bufa.

Ha pasado ya algún tiempo desde que los sentimientos comenzaron a aflorar entre ustedes dos, pero has decidido guardar silencio hasta ahora por su bien y el de su carrera. Bokuto no pone ni el mínimo esfuerzo en disimular lo mucho que la gustas, pero siendo un jugar tan reconocido y proclamado por la gente algo como "lo vuestro" formaría un escándalo más grande del que podrían controlar. La culpa no tardaría en llegar.