Ukiyo 🐱 Chifuyu Matsuno

🐱 5. Compañero

El cielo estaba gris, y la lluvia caía sobre Tokyo. Chifuyu y Takemichi sujetaban sus paraguas transparentes, viendo a Mikey quien estaba agachado delante de la tumba de la Familia Sano; tras él estaba Draken, sujetando el paraguas para cubrirlo de la lluvia.

– Ya veo. Te enteraste de lo de mi hermano.

– Shinichirō era un tipo genial.

– Sí.

– Takemicchi –lo miró de reojo.– Lo sabemos. No puedes hacer nada a estar alturas –volvió la vista hacia adelante.– Y no es que Baji o Kazutora quisieran que eso hubiera acabado de ese modo.

– Sí... –se levantó.– Sé que ya no se puede hacer nada. Pero mi corazón aún no lo ha procesado.

Mikey tomó su paraguas y lo abrió sobre su cabeza. Los cuatro comenzaron a caminar, para salir del cementerio.

– La CB250T que intentaron robar Baji y Kazutora era de mi hermano. Iba a ser mi regalo de cumpleaños –se detuvo y giró un poco, mirando a Takemichi mientras sonreía.– Es todo lo que me queda de mi hermano. Es mi fiel compañera –volvió la vista hacia adelante.– Hace dos años de ello –se acercó a la moto.– Ya perdoné a Baji. Pero...Aunque no lo supieran y ya no se pueda hacer nada...Kazutora mató a mi hermano y nunca se lo perdonaré –giró, mirando al chico de uniforme escolar de nuevo, quien había tragado saliva nervioso.– Ni a Baji que se fuera con Kazutora. Takemicchi, recuerdo haberte pedido que me trajeras a Baji. ¿Qué haces aquí con su Sub-Capitán? ¿Qué es lo que pretendes, Takemicchi? ¿De verdad quieres morir?

– Pues... –bajó la mirada, pensativo. Frunció el ceño y miró de nuevo a aquel chico.– Mikey-kun –se acercó a él.– Yo...Quiero ser el líder de la ToMan –aquel abrió los ojos con sorpresa.– Algún día me ganaré tu reconocimiento. ¡Eso es lo que quiero!

Tras despedirse de sus superiores de la ToMan y salir del cementerio, ambos jóvenes comenzaron a caminar, alejándose de aquel lugar.

– Estás demente –dijo Chifuyu.– Es como si no pudieras leer entre líneas.

– Es verdad...No sé por qué le habré dicho eso –bajó la cabeza.– Aún tengo el corazón acelerado...

– Hm –sonrió y se detuvo, colocándose delante de él y hacerlo detenerse también.– ¿Qué te parece esto? –extendió su mano a él.– Te ayudaré a alcanzar la cima de la ToMan, si me ayudas con lo que intento hacer.

– ¿Eh? ¿Significa que crees que puedo convertirme en el líder de la ToMan?

– Ni un poquito –negó moviendo su mano.

– ¡Lo sabía! ¡¿Me estás tomando el pelo?!

– Pero pienso ayudarte.

Takemichi miró a aquel chico unos segundos y suspiró.

– De acuerdo –estrechó su mano.– Yo también te ayudaré.

Chifuyu sonrió ampliamente.

– Será un placer, compañero –soltó su mano.– Y tenemos la misma edad, así que no estés tan tenso –giró, llevando su mano libre al bolsillo de su chaqueta.

– ¿Eh? ¿De verdad? ¡¿Por qué no me lo dijiste antes?!

Chifuyu rió, comenzando a caminar de nuevo.

– Cambiaste de golpe.

– Como eres Sub-Capitán, creí que eras mucho mayor que yo –confesó, siguiéndolo.– Pero igual eres mi superior en la ToMan... –llevó una mano a su mentón, comenzando a murmurar cosas.