14. Nueva vida

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Han pasado dos meses desde que no he vuelto a ver a Charly, pero para mí, han sido años. Que mal aferrarse a una persona que cuando no está, piensas que nada tiene sentido. Y lo peor es que ha llamado a todos menos a mí, ¿por qué? Pues según Ligia quiere que me olvide de él, según mi hijo quiere que siga con mi vida, y según Vane — que sigue enojada con él — dice que me usó como si fuera un juguete al que dejó botado cuando vio que lo necesitaba más. Y sí, he ido a visitarlo pero me ha rechazado. No puedo hacer nada más, me tocará seguir adelante con mi vida.

Juancho vino a hablar conmigo, y que solo pidiéndole perdón y arrastrándome podría conservar su amistad con él. Mi respuesta era obvia, nunca me voy a arrastrar por nadie, y no él no va a ser excepción.

Y aquí estoy, en mi casa, esperando a Jack de Castillo y a Zulma para que me ayuden con un nuevo proyecto. A nadie le hace gracia que sea precisamente él quien me ayude, pero realmente necesito la compañía de un amigo. Y para mí sorpresa, ha aceptado tras lo mal que lo traté.

El timbre me saca de mis pensamientos. Seguramente sean Jack, o Zulma.
O los dos a la vez.

— ¡Ey! ¿ cómo están? — corro a abrazarlos.

— ¿Cómo estás? — dice Jack son una sonrisa amplia.

— ¿Cómo no me dices que tenés un amigo así? — me susurra Zulma. Esbozo una sonrisa traviesa.

— ¿Ya se conocieron? — les pregunto.

— Sí — me contesta Jack amablemente.

— Y cuéntanos ese secreto tan misterioso. Ve, me tenés toda la noche sin dormir — dice Zulma irónica.

— Tengo en mente un nuevo proyecto — digo al fin. Ambos me miran confundidos.

— ¿Ese era el secreto? — pregunta Zulma ofendida, haciendo que Jack se ría.

— No.

— ¿Entonces? — dice ansiosa.

— Zul, callate — digo entre risas.

— Un nuevo proyecto — repite Jack pensativo. — ¿Y yo qué tengo que ver ahí?

— ¿Y yo?

— ¿Se callan? — le digo a los dos. Me hacen un gesto para que hable. — Gracias.

Mi teléfono interrumpe la conversación y yo maldigo en silencio. Al leer el nombre, me preocupo.

— Hola Ligia, ¿todo bien?

— Hola Yeimy. Pensé que le gustaría saber cómo está Charly....

— ¿Le pasó algo? — digo rápidamente.

— Lleva dos días en el hospital.

— ¿Qué le pasó? No sabe que, deme la dirección....

— No, es que él me pidió que no le dijera nada. Ya está mejor, pues todo quedo en un susto.

— Pero, ¿qué fue lo que le pasó?

— Se metió en una pelea, y le apuñalaron... . No se preocupe, ya está mejor.

— Ligia yo quiero verlo, ayúdeme por favor — le suplico.

— ¿Cómo le ayudo? Si se entera que yo le conté....

— No le voy a decir que usted me dijo, solo dígame dónde está para verlo.

— Yo le mando la dirección. Pero Yeimy, no lo altere ¿si?

— Se lo prometo. Gracias — y cuelga.

Me giro para mirar a Jack y a Zulma que dejar de hablar para que yo lo haga.

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