Mago de Walking Dead

Capítulo 37

"Oye," murmuró Luna, hablando con Carol que estaba despierta y preparando el desayuno para todos. Perritos calientes, salchichas y frijoles. Luna abrió la puerta y colocó las llaves en el gancho, notando que faltaba el otro juego. "¿Dónde está Harry?" sus ojos habían mirado automáticamente a Daryl Dixon pero él estaba allí, durmiendo, rara vez se encontraba uno sin el otro, estaba sorprendida, pero nada en su rostro mostraba que lo estuviera. Se dejó caer en la silla junto a Carol.

"No estoy segura", admitió Carol, mientras removía la gran olla de comida. "Me di cuenta de que las llaves se habían ido cuando me levanté hace media hora, ¿asumí que Harry quizás había salido con Anubis?" dado que el perro también había desaparecido, había hecho esa suposición.

"No está afuera", declaró Merle, de eso estaba cien por ciento seguro, a menos que de alguna manera se las hubiera arreglado para hacerse invisible, dada su magia, podría no estar tan lejos del reino de lo posible. Luna se había quedado dormida mientras estaban en el llamado "deber", y Merle la había dejado descansar, estaba tratando de parecerse demasiado a Harry demasiado rápido. Quería aliviar la carga de él liderando, él apostaba, pero todo lo que estaba haciendo era agotarse. Harry no estaba durmiendo debido al hecho de que no podía dormir, Luna por otro lado no tenía ese problema en particular. Demonios, desde el momento en que el niño se despertara en la cabaña de él y sus hermanos después de esa pequeña exhibición mágica, no dormiría más de cuatro horas, y eso es si tiene suerte. No fue una gran sorpresa Merle todavía estaba convencido de que el niño sufría de algún tipo de trastorno de estrés postraumático; había visto a muchos otros en el ejército atravesarlo, hasta que la cagó y se enojó con su oficial al mando y le dio un puñetazo en la garganta y se hizo patear. Irónicamente, en realidad, podía respetar a Harry más que a su oficial al mando. Nadie lo va a tratar como una mierda, como si no importara, especialmente no a un imbécil como su CO.

"Voy a ir a buscarlo, avisarle que el desayuno estará listo pronto", dijo Luna, levantándose de nuevo después de sentarse. "Tengo la extraña sensación de que ya ha comenzado a limpiar la prisión". Suspirando con resignación, negó con la cabeza, solo era Harry por todas partes.

"¿Es eso lo que Harry planea hacer hoy?" Carol preguntó, preparando el primer lote, entregándoselo a Merle, recibiendo un gruñido y un asentimiento del hombre.

"Probablemente, pero tendrías que preguntarle", respondió Luna, "¿Cómo está Sophia?"

"Ella durmió bien", dijo Carol dándole a la niña una sonrisa de agradecimiento.

"Regresaré pronto," comentó Luna, tomando las llaves rápidamente encontró la correcta y abrió la puerta, solo para encontrar a Merle siguiéndola, su plato vacío ya en el piso. "Cierra la puerta detrás de nosotros." agregó, esperando hasta que lo hubieran hecho antes de comenzar a moverse, una vez fuera de la vista y de los oídos, murmuró el hechizo de localización, su varita se movió en la dirección en la que había entrado, por lo que él estaba en el otro bloque de celdas. . Al menos esperaba que fuera allí.

Al doblar la esquina, ella lo notó de inmediato, "Oye, ¿incluso pudiste dormir un poco?" Luna le preguntó, apoyándose en la puerta abierta. Al ver a Harry hacer su magia en el bloque de celdas, Merle notó que se estaba concentrando en los movimientos de la varita y las palabras. Tendría que preguntarle sobre eso en algún momento. Anubis saltó, moviendo la cola mientras exigía su atención, tanto Luna como Merle, emocionados de verlos como si no los hubiera visto en años, no solo unas pocas horas.

"Sí, dormí casi cinco horas seguidas", comentó Harry, "Las camas dejan mucho que desear, a la primera oportunidad que tenga voy a una tienda a comprar una colcha de madera adecuada y un colchón que no puede ser difícil de conseguir. encuentre una manera de quitar esas literas a menos que estén excavadas en el cemento ".