Mago de Walking Dead

capitulo 119

"Michonne, Carl, estén atentos a la situación, tengo otras dos situaciones que contener". Harry llamó a través de la radio: "Carol, voy hacia ti, ¿hay alguien o algo en la criatura que acabas de describir?" corriendo hacia el centro.

"Copie eso", dijo Carl, "Actualice cada dos minutos". Todos habían aprendido de Harry, así que sabían exactamente qué hacer. Cuál fue el proceso, y también sabían mantenerse a salvo ante todo. Se habían entrenado en todos y cada uno de los procedimientos tácticos. Si en realidad eran procedimientos tácticos por los que pasaron los militares o no, era lo que sabían.

"Realmente no puedo distinguir nada", les informó Carol, mirando directamente a los animales que se dirigían hacia allí. Por alguna razón, se había acercado, miró a su alrededor antes de despegar de nuevo hacia el cielo. "¿La criatura bajó, miró a su alrededor antes de despegar hacia el cielo? Oh, hay más de ellos, se están moviendo como una densa nube oscura".

"¡Haz que todos retrocedan! ¡No entres en las casas! ¡Retrocede!" Harry gritó por la radio: "¡AHORA! ¡Viene más de uno!" y no tenía a nadie que allanara el camino a las criaturas. No quería arriesgarse a aparecerse en su condición, la magia era quisquillosa, no quería hacer nada peligroso que pudiera causar daño a sus hijos.

"¿Qué crees que es? ¿Dragones?" preguntó Daryl, fácilmente capaz de seguir el ritmo de Harry. Todos habían pasado por el entrenamiento y lo mantuvieron mientras tanto. Cazar requería sigilo y silencio, ese era su punto dulce, pero esto de correr no era algo que hiciera fuera del entrenamiento.

"¿Según su descripción? Es de Thestral", le dijo Harry, sonando sin aliento, "pero puedo pensar en algunas otras cosas que podría ser".

"Es un avance lento, parecen exhaustos, solo están tratando de mantenerse por delante de la manada que avanza hacia ellos". Michonne explicó: "Nunca había visto un grupo tan grande de caminantes, hay cientos y aproximadamente de cuarenta a cincuenta personas". Gracias a Dios por los omnioculares, de lo contrario no podría verlos.

"¿Ningún auto? ¿Nada de nada? ¿Están a pie?" Merle preguntó desconfiada como el infierno, jadeando, eran los cigarrillos que todavía fumaba, estaba segura.

"Lo son", confirmó Michonne, "¿Quieres que retrocedamos?"

"No, manténganse ocultos, pero miren lo que está pasando, manténganos actualizados". Luna dijo: "Pueden ser personas necesitadas".

"¿Tantos sin embargo?" preguntó Michonne, cautelosa y preocupada. Nunca se habían enfrentado a un grupo tan grande, ¿cómo diablos podrían asimilarse? Habría enfrentamientos, ¿seguro?

"De acuerdo", refunfuñó Merle, su voz metálica llena de un conocimiento que vino con una historia compartida y una comprensión profunda.

"Observaremos y veremos, si se trata de eso, distribuirlos en las comunidades". La voz de Harry llegó antes de que todo en la radio quedara en silencio.

"Algunos de ellos están peleando, golpeando a los caminantes que avanzan antes de retirarse, pero no van por el tiro mortal". declaró Michonne.

"Excepto por tres, parecen saber lo que están haciendo, tus cuatro en punto". Llegó la voz de Carl, a través de la radio de Michonne. "¿Crees que es la única razón por la que han sobrevivido hasta ahora?"

"Probablemente", Michonne los miró con una mueca, ¿tan adentro del apocalipsis? ¿Ser tan incompetente? Era difícil de creer. Ciertamente no serían más que un estorbo, un peligro si estuvieran fuera. "Tienen un niño con ellos".

"¿Parece que están en peligro inmediato?" preguntó Harry, dando vuelta en la esquina, la última antes de llegar al centro de Pensilvania, que es donde socializan afuera.