Tal y como acordamos, pasaron dos semanas antes de que la delegación del noble volviera, esta vez siendo dirigidas por un joven robusto y de pelo corto, cuyo cuerpo presentaba algunas cicatrices bajo la armadura y con ropa simple pero de tela gruesa, junto a él venían dos guardias un poco mayores, al llegar a la aldea este se presentó amablemente ante mí.
-Es un placer señor tendero, mi nombre es Marcus Donovan y estaré a sus servicios. -Admito que esta amabilidad sí me sorprendió.
-El gusto es mío y no hace falta ser tan formal, siendo que es un noble, debería ser yo quien muestre respeto. -Dije mientras inclinaba mi cabeza con la mano cruzada en el pecho.
-No hace falta, puesto que usted es quien aseguró que aún tengamos súbditos, soy yo quien está en deuda, por eso mi respeto, pero dejemos eso de lado, mi padre me dijo que usted tendría un plan para atraer nuevas personas al territorio. -En ese momento asentí.
-Sí, aunque más correcto sería decir que es un plan de dos partes para enriquecer el territorio y poblarlo.
-Le escucho. -En ese momento desplegué un mapa del terreno sobre la mesa.
-Para hacer las cosas fáciles, primero planeo crear un entramado de caminos que recorra de punta a punta el territorio y que tendrá seguridad anti monstruos y bandidos, de esa forma el territorio podrá enriquecerse como ruta de comercio aprovechando los peajes.
-Perdone que dude de que funcione el plan pero ¿Cómo vamos a mantener fuera de los caminos a monstruos y bandidos?
-De la misma forma que los alejamos de los cultivos externos del pueblo.
-¿La barrera invisible?
-Puedes llamarle así si quieres. -Después de ver lo efectivo que fue para alejar a los monstruos, está claro que una cerca eléctrica podría beneficiar mucho los caminos, aunque usaré paneles solares para cargarla ya que sino necesitaría demasiadas baterías para un proyecto tan grande.
-Así que convertirá el territorio en una ruta comercial para enriquecernos... pero eso no soluciona el problema de los habitantes.
-Esa es la segunda parte, crearemos aldeas en ciertos puntos del camino para que los viajeros lleguen a ellas específicamente al anochecer, de esa forma estas tendrán un mercado interno al vender comida y hospedaje a los aldeanos residentes.
-Aún sigo sin ver como esto atraerá súbditos.
-Ahí es donde entra usted.
-¿Yo?
-Si no me equivoco participó en campañas militares para el rey.
-Sí ¿Qué tiene eso que ver?
-Si participó en tales campañas, significa que tiene contactos en la capital, dígame ¿Cuántas personas viven en barrios pobres o marginales en la capital? -Tras pensar por unos segundos respondió.
-Bueno, contando huérfanos y prostitutas, yo diría que al menos 5000 ¿Por qué? -En ese momento sonreí.
-Porque su tarea será usar tales contactos para que esparza un mensaje por los barrios marginales "Cualquiera que esté dispuesto a trabajar queda formalmente invitado a unirse a las nuevas aldeas a formarse en el territorio del ducado de Donovan, todos los que pasen las pruebas del general Donovan serán aceptados, incluso los inválidos y enfermos" -En ese momento el noble se levantó con enojo.
-¡¿Piensa llenar nuestras tierras de bandidos y borrachos?!
-Le ruego se siente señor Donovan. -Tras unos momentos se calmó y volvió a sentarse.
-Tienes cinco minutos para explicarte antes de que me vaya y olvide tu plan.
-Es una pena general, siendo un hombre de guerra, pensé que estaría consciente de la cantidad de soldados caídos en desgracia que habitan los barrios bajos. -En ese momento Donovan quiso hablar pero se detuvo a media palabra antes de cambiar su frase.
-Es verdad...
-Además, creer que todos los niños que roban en los barrios marginales lo hacen por gusto y no por necesidad es una declaración muy fuerte, no niego que haya malicia en ese sitio, pero también hay, por estadística, al menos una persona honesta allí que quiere un trabajo decente y no lo consigue.
-Así que tú plan es traer a los honestos desafortunados a nuestras tierras.
-Claro, sólo recuerde no estigmatizar a las prostitutas que se presenten, si tienen buenas intenciones, todos deberían recibir una oportunidad.
-Entonces ¿Quién se encargará de las rutas y la barrera?
-Si me dan un presupuesto adecuado la tendré lista en tres meses...
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mi tienda en otro mundo
FantasíaDespués de ser rechazado de 100 entrevistas de trabajo los dioses del multiverso me hicieron una oferta "Ven a trabajar a mi mundo" Así, armado con las habilidades de puerta dimensional y bendición del comerciante terminé abriendo mi propia tienda e...