Capítulo 5

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Tuve un sueño muy extraño que no sabía como interpretar, en mi sueño me veía en una hermosa pradera llena de flores amarillas, eran pequeñas margaritas, el cielo estaba dorado cómo si estuviera apunto de atardecer, había un árbol grande y verde justo en medio de todo, me había sentado bajo su sombra y de repente una chica había aparecido a mi lado, era una chica hermosa como de mi edad, tenía el cabello castaño y largo, usaba un flequillo que le cubría la frente, sus ojos eran amarillos como las margaritas, sus labios eran carnosos y rojos y su piel muy blanca, y un vestido tan brillante como sus alas, un color blanco que me cegaba, me miraba y sonreía, pero esta chica no tenía nada de normal, tenía dos grandes y hermosas alas, cada una posiblemente media un metro y medio, me separé de ella asustado y ella dijo:

-Tranquilo, soy yo, Tamy.

-¡Tamy!

Quedé sorprendido de lo hermosa que era mi ángel, ella se acercó más a mi y nos besamos, entonces desperté asustado y ya era de día, me quedé sentado en la cama analizando mi sueño y la ventana se abrió de par en par dándome los buenos días.

-Hola Tamy, buenos días, sabes... Soñé contigo... No sé si eras tú.

De inmediato la computadora se encendió y escribió "SI"

-¡Vaya! Si que eres hermosa, ¿Entonces, porqué nos besamos?

Y ella escribió, "No sé..." con puntos suspensivos.

Habíamos aprendido a comunicarnos de esta manera, se que no era nada "celestial" pero hasta los seres ocultos usan las tecnologías modernas.

-Adiós Tamy, hasta más tarde.

Sabía que ella me acompañaba a la escuela, pero siempre le decía adios, no sé, es la costumbre, pero hoy era un día diferente, pensaba en ese sueño una y otra vez, me enloquecia pensar en ese beso, la forma de sus alas abrazandome, no es normal que un chico piense eso de su ángel guardián, pero ahora que sabía como era ella no quería dejarla...

Los sueños cada vez se hicieron más parte de mi vida, soñaba con ella siempre en la misma pradera, aveces íbamos a lugares increibles, eran mundos paralelos a los que nisiquiera hubiera imaginado, peces flotando en el aire, nubes de oro, un mar de plata, una jungla con animales gigantes, un espacio sideral, un profundo mar azul con peces surrealistas, eran cosas tan extraordinarias que no podía describir, pero la estúpida alarma me despertaba haciendo que deseara con todas mis fuerzas volver a soñar... Y verla...

En los sueños hablábamos, pero no mucho casi siempre nos concentrabamos más en nuestras aventuras, ella era muy tímida y encantadora.

-¿Que se siente volar?

-Es hermoso, es una sensación de libertad y paz que no se compara con nada.

-Desearía volar.

-Te llevaré a volar.

Me tomó en sus brazos y sus alas brillantes se agitaban en pleno vuelo, estaba volando, era casi tan real que podía sentir el viento en mi cara y mi boca secándose al tragar aire, era esa sensación de libertad que ella había descrito.

Me llevó de nuevo a nuestra pradera y nos sentamos bajo nuestro árbol, me tomó de las manos y nos dimos un beso, este beso era largo y podía sentir lo real que era, un beso que jamás me habían dado con tanto amor y tanta vergüenza, entonces desperté de nuevo y esta vez a mitad de la noche, entonces sentí como alguien se levantó de la cama, pude ver ese lado de mi cama hundido y levantarse cuando aquello se movió, ese lado estaba cálido y supe que era Tamy, ¡Que extraño! Tamy dormía conmigo, ahora entendía porque soñaba con ella, retorne a mi sueño pero esta vez no estuvo presente.

Al cumplir los 16, estaba empezando un nuevo año, ahora Tamy era parte de mi vida y era muy especial para mi, de nuevo comencé a aislarme, prefería quedarme en casa con ella que salir con mis amigos, era más emocionante dormirme por las tardes y soñar con ella y nuestras aventuras surrealistas. Como era de esperarse, también me aleje de mamá y de mi hermana, pasaba dormido, no comía mucho, no hacía mis tareas y mis calificaciones estaban por el suelo, obviamente mamá se preocupó mucho.

-Hijo, ¿Estás enfermo? ¿Te sientes bien?

-Si mamá, ¿Porqué preguntas?

-Bueno, he notado que siempre duermes mucho y pasas muy cansado y apagado, ya ni sales con tus amigos.

-Si, supongo que me siento cansado, pero es por mucha presión de la escuela, no te preocupes.

-¿Quieres que te lleve al médico?

-No mamá, en serio estoy bien.

Era obvio que si le decía a mamá que todo esto era por Tamy, ella querría llevarme al psicólogo, hace mucho que supuestamente para ella Tamy no existía más, por lo tanto ahora no debía decirle, menos si yo planeaba nunca dejarla...

Estaba en un estado entre la fantasía y la realidad, la fantasía era mejor para mí, estar en la escuela era nefasto, deseaba que terminara la clase y poder irme, pero Tamy siempre estaba conmigo, sentía su respiración en mi cuello mientras estaba sentado en mi pupitre, era una sensación de paz y excitación.

Ha medida que pasaba el tiempo me di cuenta que mis relaciones iban mal, cuando tenía una novia terminabamos en tiempo record, entonces supe que algo no andaba bien, ¿Soy yo? No lo sabía pero nada más había tenido dos relaciones, no siempre se puede conocer gente nueva en la misma escuela de siempre, pero era extraño, trataba de compararlas con mi ángel pero era obvio que no eran como ella, sentía que a lo mejor ya tenía una relación, pero esta era en mis sueños y con mi ángel, seguía sin entender esos besos en mis sueños, ¿Acaso es ella la que quiere que eso pase? ¿O es mi subconsciente? Yo jamás lo hubiera imaginado pero desde que supe como era físicamente supongo que me estaba enamorando de ella, pero esto era absurdo, un ser celestial con un humano mortal, ¿Es eso posible?

Sabía que no podía hablar de esto con nadie, era un secreto estúpido que si alguien más lo sabría diría que estoy loco, tal vez tenga razón y estoy enloqueciendo, es algo que no podía describir, cada noche los besos con mi ángel eran más largos, no sólo era uno, eran varios, nos abrazabamos, nos tomábamos de las manos, era como una relación entre ambos. Del mismo modo, ella dejó de ser poco menos perceptible en el mundo real, sabía que me veía y estaba ahí, pero jamás volví a ver la formación de humo o que me diera las señales de siempre como apagar y encender la luz, en los sueños nos reencontrabamos y era como si eso bastara, pero despertar era terrible, siempre quise preguntarle porque nos besabamos en nuestros sueños, pero no sabía si era yo el que me proyectaba eso en la mente...

Mis amigos comenzaron a mantener distancia, normalmente me invitaban a salir y yo siempre les decía que no podía, mamá creyó que nos habíamos enojado pero la verdad era que yo prefería ir a ese mundo al que Tamy me llevaba, moría cada noche por dormir y besar sus labios.

Era de noche y como siempre soñaba con ella, estábamos frente al mar y ella se acostaba en la arena y yo me acercaba a sus labios y los besaba, sentía como las olas alcanzaban mi ropa y la mojaban, sentía la arena enterrarse en mis dedos y sentía la brisa y sobre todo el beso, entonces desperté porque la sensación de ir al baño fue más fuerte que todo, comencé a tratar de levantarme y no podía, estaba atado en la cama y sentía aún sus labios besando los míos, abrí los ojos y no podía ni respirar, podía sentir como su cuerpo estaba sobre el mío, quería abrir la boca o decirle algo, pero era imposible, entonces dejó de besarme y sentí como aquello se quitó de encima y luego la nube blanca se comenzó a formar y se dispersaba en la habitación, mi corazón se agitaba y finalmente pude respirar, corrí al baño y luego no pude dormir, me quedé entonces en la computadora tratando de que me diera sueño, ahora sabía que los besos si eran reales, no era un sueño, no era sólo yo, era mi ángel también, ¿Porqué entonces mi ángel haría algo así? ¿Porqué me besa? ¿Esta enamorada de mi? Ahora no entiendo nada...

Mi Ángel OscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora