Un Aura Llameante

Prologo: "Un nuevo comienzo"

Bueno gente, parto este proyecto remasterizando de mi anterior fic. publicado originalmente en Foros Dz. Espero que les guste los pequeños cambios a aquellos que conocían el fic. y a los nuevos, los saludo y espero que disfruten de esta pequeña aventura.

Sin nada más que decir, les dejo el cap.

Un pequeño barco navegaba lentamente a través de los turbulentos mares de Johto, gritos se podían oír de la barcaza mientras se acercaba lentamente a una pequeña isla a lo lejos de la espesa niebla que la oculta.

Muchas historias y leyendas locales se relacionan a esta lejana isla perdida en el mapa, los lugareños a menudo la llaman la "Isla sin nombre", no porque este sea su nombre real, sino a un acuerdo común entre los marineros.

Es mejor que esta isla no existiera.

Muchos hombres y mujeres valientes se han adentrado a mar abierto en búsqueda de esta isla solo para no volver a ser vistos. Muchos no saben en camino a este lugar, pero los pocos que lo conocen, saben que la niebla oculta numerosos arrecifes y peligros, ocultos a los ojos del marinero más habilidoso. Es una conocida zona de muerte.

Viajar en pokemon tampoco hace las cosas más sencillas, ya sean un pokemon acuático o un pokemon aéreo, ambos son incapaces de orientarse dentro de la niebla. Si no tienes cuidado puedes acabar en un nido de pokemon salvajes, y será mejor que te olvides de todo lo que conoces, porque más temprano que tarde, descubrirás que su nivel es mucho más elevado que en cualquier parte del continente.

Son pocos los que se atreven a navegar por estas aguas, y mucho más los que realmente conocen el camino dentro del laberinto de la niebla. El capitán de esta pequeña barcaza es uno de los pocos, sino el único que ha podido llegar a este lugar, sin embargo, ni él, deseaba volver a este lugar.

Sin embargo, la visita de un joven cliente, cargando con él una carta que no pudo ignorar, lo obligaron a volver a navegar a través de este lugar.

- ...Este lugar es tan malo como de costumbre, bien podría estar bebiendo en casa tranquilo... –

- Lo siento –

El capitán no pudo evitar maldecir, mientras miraba al joven que lo obligó a navegar por estas aguas que detesta.

"Es muy joven, apenas un mocoso". 

Esta fue la sincera opinión del hombre, mientras miraba al joven que lo miraba con una cara complicada.

El joven no tendría ni 15 años, su vestimenta es propia de los jóvenes entrenadores del continente, un conjunto de chaqueta roja, camiseta blanca y jean, junto a un par de zapatillas deportivas. Su único punto distinguible es la gorra roja sobre su cabeza, la cual le da algo de singularidad a su cabello azabache. Si tuviera algún otro punto de interés, sería el alegre Pikachu, parado sobre su hombro y mirando a su alrededor con curiosidad.

- ¿Me pregunto quién me mandó esta carta? - (preguntó el azabache mirando al pokemon, quien estaba tan confundido como su entrenador)

- Pika pi - (respondió el pokemon bajando sus orejas, mientras su entrenador le acariciaba la cabeza)

- No te preocupes, no creo que pase nada malo - (susurró el entrenador tratando de calmar a su compañero, mientras su mirada se posaba sobre la silueta de la isla, a la cual ambos se dirigían)

Mientras el joven miraba a su próximo destino, no pudo evitar recordar los sucesos que llevaron a su actual situación.

Un par de semanas habían pasado desde su regreso de la región Kalos, y el joven ya comenzaba a pensar en volver a emprender un nuevo viaje. Gracias a su madre, se enteró de la existencia de la alejada región de Alola, la emoción lo consumía mientras pensaba en las aventuras que podrían esperarle en esa región.