Un Aura Llameante

Capítulo 2: "Retorno del Entrenador Legendario - Parte 2"

El ocaso, es un momento de gran aprecio por los habitantes de la Ciudad Carmín, la vita maravillosa mostrada en el mar era capaz de atrapar hasta el más infeliz espectador, haciéndolo olvidar todo a su alrededor. No importa la edad, ni las cargas y obligaciones, todo el mundo era feliz, apreciando aquél espectáculo.

O eso es lo que todos desean creer...

Cierto azabache miraba desinteresadamente el ocaso, sentado en una banca frente al puerto, con una mirada llena de ira. A su lado, varias bolsas con recuerdo para sus conocidos, esperaba regalárselos como regalos.

- Llegué antes del mediodía... y nadie hizo el jodido esfuerzo de venir a buscarme... - (susurró el azabache, mirando al cielo con la mirada perdida)

- Pika... - (murmuró el pokemon, en el mismo estado que su entrenador)

- ...Vámonos Pikachu, luego pensaré en como vengarme de ellos... - (murmuró Ash, con un par de venas asomándose en su frente)

El azabache se levantó de aquella banca con un suspiro, y se encaminó al Centro Pokemon. En el camino, pudo ver como las personas vivían en armonía con los pokemon, a los jóvenes entrenadores peleando entre si, con grandes sueños, metas y objetivos.

- Parece como si hubiera sido ayer cuando inicié mi viaje pokemon... - (susurró el azabache, mirando a los jóvenes entrenadores con nostalgia)

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..

...

Hace 4 años

Ash estaba enfrente de aquel hombre, que anteriormente vestía una capucha, su cabello peli plateado y su mirada fulminante habían logrado intimidar al entrenador. Pero su anterior pregunta había logrado que el azabache, despertara de su mundo

- Perdona, pero... ¿Qué dijiste? - (preguntó el azabache mirando curioso al peli plateado)

- Aura... ¿Sabes lo que es el aura, mocoso? - (repitió el hombre, sin cambiar su expresión)

- El aura... una vez escuché que, así es como se le llama al poder que se encuentra dentro de todos los seres vivos, ¿no? - (respondió el azabache) – algo como la esencia de la vida... -

- Mmm, no del todo correcto, pero si pareces conocer un poco sobre el tema... por cierto, soy Steel - (comentó el hombre, lanzando una pokeball, de la cual salió un Aggron gigantesco) – Bueno, eso a parte, ¿Qué te parece si comenzamos nuestro encuentro, mocoso? -

- ¿Mocoso?... ¡Escucha, soy Ash Ketchum, de Pueblo Paleta!, ¡Jamás he rechazado un reto! - (gritó el azabache, mientras Pikachu bajaba de su hombro y se ponía frente a él)

- Oh, bien dicho, entonces puedo ir con todo desde ya... ¡Aggron, usa Garra de Acero! - (dijo el hombre, mientras su pokemon atacaba a Pikachu, con sus poderosas garras)

- ¡Pikachu, esquívalo! - (ordenó el azabache)

El pokemon amarillo rápidamente se movió logrando esquivar el ataque de Aggron por poco, sin embargo, debido a la devastadora fuerza del ataque, no pudo evitar que los escombros le golpearan, mandándolo a volar por la fuerza de estos.

- ¡Pikachu! - (gritó el azabache corriendo a ver a su compañero) - ¿Cómo estas, amigo? -

- Pikaa - (murmuró Pikachu débilmente, cayendo debilitado en los brazos de su entrenador)

- ¿Eso es todo?, esperaba más que solo un movimiento - (preguntó Steel, mirando fríamente al azabache)

- ¡Maldición!, ¡No perderé! - (contestó Ash, tomando otra de sus pokeball)