Dentro de un libro (Harry Potter y La Orden Del Fenix)

Prólogo.

-Lily, quedate quieta, no corras ¡Cuidado! -dijo el padre, intentando que su pequeña hija no tropiece con las cosas de su área de trabajo.
-Perdón papi -le contestó la niña tres años. La pequeña tropezó con sus propios pies y lastimando su rodilla- ¡Ay!
-¡Hija! -el hombre dejó salir un suspiro- te dije que estuvieras quieta.
Tomó a su hija en brazos, poniendola arriba de su mesa de trabajo, junto a unos químicos.
-Espera aquí, voy por una bandita -le dice su papá dejándola ahí, sola, solo unos segundos.
La niña observa a su alrededor, le encantaba ese lugar. Donde su padre realizaba todos sus experimentos, el laboratorio. Al lado de ella observa un liquido de curioso color, azul eléctrico. Lily lo toma entre sus pequeñas manos, pensando que es jugo, bebe un gran trago. Lo deja caer, después de descubrir que el sabor no es igual de bonito que el color, y comienza a toser.
-Lily ya... -su padre al verla toser corre hacia ella. Observando en el suelo la botella que una de sus investigaciones- Oh no, ¡Lily!
Solo unos segundos a solas, ella sabía que no debía tocar nada, pero la curiosidad de los niños no suele entender límites. Cargando a su hija, toma su celular, llamando a su esposa, mientras corre al estacionamiento.
-Mary, es Lily, la llevare al Hospital Central, te lo explico haya -cuelga sin esperar una respuesta más allá del "¿qué...?" Suben al auto y se ponen en marcha.
-Papi, tengo sed -le pide la pequeña.
-Lo siento Lily, no puedes tomar ahora, porque podría hacerte daño.
La niña mira a su alrededor, ligeramente molesta, ella tenía sed y quería quitarse ese feo sabor de la boca, finalmente ve una botella con algo de agua. La toma y bebe.
-¡Lilian! ¡NO! -su padre le quita la botella, pero algo tarde.
Llegan al hospital en 20 minutos, después de unos cuantos semáforos en rojo, sonidos de claxon y evitando choques. Lily es atendida en la sala de urgencias, después de contar lo ocurrido; unos minutos después llegó su madre y siendo informada por de lo sucedido, solo espero a que su niña saliera sin problemas mayores.
-¿Familiares de la señorita Lilian Collins? -sale el doctor, un par de horas después.
-Somos nosotros ¿Como esta mi hija? -contesta la madre, con la preocupación notoria en sus ojos azul celeste, de igual forma que su marido, de ojos café claro, como los de su hija.
-La niña se ve y esta saludable hasta ahora -contesta.
-Y el químico ¿Pudieron hacer algo al respecto? -pregunta el padre.
-Realizamos un lavado de estomago, pero no hizo mucho -explica el hombre de bata blanca- el agua que bebió hizo que viajara más rápido por su sistema digestivo. No sabemos que reacción puede tener, esta en observación por ahora.
-¡Doctor Adams! ¡Doctor Adams! -llegó una enfermera agitada- la niña Collins.
Doctor Adams, señor y señora Collins, se apresuraron a ir con la niña, dejando a la enfermera atrás. Llegan rápidamente y ven algo que los paraliza.
-¡Papi! ¡Papi! ¡Mi pelo es azul! -les dice alegre la niña con el cabello azul eléctrico.

*12 años después*
12 años en los que cambio su vida. 12 años en los que buscó ocultar esa habilidad que había obtenido, por su bien y el de su familia.
Una alarma es apagada por una adormilada chica de 15 años. Se levantó lentamente, dirigiendose a su baño, 10 minutos después sale para cambiarse la ropa de dormir. Se pone unos simples jeans azules gastados y una playera algo holgada verde claro y un suéter de tela delgada azul marino. Tomando su celular, audífonos, cartera con suficiente dinero, un brillo labial, un pequeño espejo y su libro de Eleanor y Park, poniéndolo en su mochila, bajo a desayunar.
-Buenos días, mamá -saludó alegre, dándole un beso en la mejilla.
-Buenos días cariño -la mujer le brindó una sonrisa, poniendo en la mesa dos platos con Hot Cakes.
-¿Y papá?
-Se esta arreglando, le hicieron ir hoy al trabajo -suspira- y él que quería pasar el día con nosotras.
Lily observa como su madre cocina más Hot Cakes. La verdad ella también esperaba que su padre se quedara, pero estaba más ocupado en estos días por su nuevo descubrimiento en el laboratorio, de el cual no estaba segura lo que trataba. Como de muchas más investigaciones que no conocía, después del accidente de su infancia, su padre no la había llevado a su trabajo.
-¿Como están mis dos amores? -les preguntó el hombre, en cuanto entró a la cocina.
-Bien -contestan al unísono, sonriendo.
Terminó el desayuno con sus padres, despidiendo a su padre cuando este se fue de casa, para después ella saliendo a su trabajo de fin de semana.
-Me voy, mamá-plantó un beso en su mejilla.
Salió de casa, cerrando la puerta detrás de ella. Caminando alegremente, escuchando música con sus audífonos. Para después llegar a la gran bodega, que funciona como laboratorio de Richard, un científico mayor, al que ayudaba como trabajo.
-Buenos días -saluda a la nada, sin ver al doctor.
-¡Lily! ¡Tienes que ver esto... es maravilloso! -le da por respuesta, en alguna parte del lugar.
Lily se acerca a donde provino la voz y lo primero que ve es una gran máquina.
-¿Qué es? -le pregunta curiosa.
-Algo que cambiara la historia... es grandioso -la emoción se podía notar a kilómetros de allí- es un portal dimensional.
-¿Portal dimensional? ¿A que dimensión lleva? -era muy grande la curiosidad que sentía.
-Oh, ¡a varias! Entre ellas, y esto te encantara, a una dimensión de los libros.
-¿En serio?
-Claro.
Prende la maquina, que comienza a zumbar con suavidad. Le pasa una hoja de papel.
-Esto es la forma en que funciona, unas reglas, que espero se cumplan, aunque lo sabremos mejor cuando comience las pruebas -comenta, mientras la chica alza en su bolsillo trasero de el pantalón la hoja, sin prestarle mucha atención, más encantada por la maquina.
Unos minutos depués de ser encendida y un cuanto tecleo por el doctor, logró abrirse una especie de agujero negro en miniatura, o Lily esperó que así fuera.
-Aun no la he probado, vamos a comenzar con objetos inorganicos -le aclara Richard, dando a entender su trabajo de hoy.
-¿Por qué no con un persona? -preguntó Lily.
-Porque aún no considero que sea estable para eso, por eso los objetos serán pequeños, equipados con cámaras, por ahora -el hombre la miró, sonriendo- venga, dime el nombre de un libro de ejemplo.
-Harry Potter y la Orden del Fénix -contesta sin pensarlo.
Richard escribió el nombre en su computadora y el agujero se hizo un poco más grande. Lily se acercó lentamente, y antes de llegar demasiado cerca, sus pies terminaron enredandose entre sí, haciendola caer por el agujero. "Maldita sea"
-¡Lily! -es lo último que escuchó, antes de sumarse a una oscuridad.

Pequeño aviso, *capítulo editado* el prólogo y el primer capítulo (El Portal) fueron unificados, y con pequeñas correcciones, nada muy diferente.
L Nico👻