Capítulo 13

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Maya se removió sobre la cama, al decir que había varios muertos pensó en todos los disparos que ella misma había hecho, pero también temió que su mejor amigo hubiese sido alcanzado después de la llamada que habían tenido.

Carina se dio cuenta de que la agente del FBI se había quedado muy pensativa y además se notaba que estaba bastante nerviosa lo cual no ayudaba a que ella misma se tranquilizase. En su mente seguía dando vueltas la idea de que hacía unas horas ella era una persona normal, con una vida de lo más típica y que ahora estaba huyendo de algo que no sabía con una agente herida.

- ¿Cree que su amigo puede ser uno de esos agentes?- Preguntó Carina intentando mostrarse lo más calmada y comprensiva posible.

- Espero que no lo sea.- Dijo Maya.- ¿Me ayuda a levantarme un poco?.- Pidió la rubia que en ese momento lo que necesitaba era salir corriendo para intentar desfogar toda la rabia que estaba acumulando.

- Esta bien, pero no demasiado sino saltarán de nuevo sus puntos.- Contestó Carina que se levantó para acercarse de nuevo a la cama y ayudarla un poco. Cogió a la rubia por los hombros y poco a poco fue alzándola con ayuda de un cojín.

Estaban a punto de soltarla cuando la rubia soltó un quejido de dolor que provoco que se asustase y casi cayese sobre ella. Ambas se miraron a los ojos y sus labios se quedaron a pocos centímetros notando ambas sus respiraciones aceleradas.

Pasaron algunos segundos en esa posición, ninguna de las dos parecía poder o querer separase. Ambas fueron conscientes en ese momento de la atracción que había entre las dos, una química que se podría notar a kilómetros a la redonda.

Carina fue la que se dio cuenta de lo que estaba sucediendo y tras dar un pequeño paso atrás se quedó mirando a la rubia que tampoco parecía saber que hacer o decir al respecto de lo que acababa de suceder.

- Voy al baño.- Se disculpó Carina que no quería seguir sintiendo esa presión sobre ella.

La puerta de la habitación sonó en ese momento, Maya intentó levantarse para coger su pistola, pero no le dio tiempo a hacerlo pues Carina salió del baño asustada y una mujer muy mayor entró por la puerta.

- ¿Estas bien?.- Preguntó la mujer mayor mirando a la rubia que ahora se había destapado al intentar coger su arma para protegerse.

- Me has dado un susto de muerte.- Dijo Maya dejándose caer de nuevo en la cama más relajada pero con un fuerte dolor en la herida debido al brusco movimiento.-Si estoy bien, solo un poco dolorida.- Dijo para quitarle importancia y no provocar más miedo en la mujer mayor.

- Lo siento, no era mi intención. Jack me pidió que te diese esto, me dijo que estabais en problemas. ¿Qué habéis hecho?.- Preguntó la mujer que no había sido consciente de la presencia de Carina pues esta había vuelto al baño al ver que la mujer era conocida de Maya.

- Nada Abi, pero creo que nos están metiendo en problemas de alguna manera que aun no sé.- Dijo la rubia cogiendo el móvil que la mujer le estaba dando.- Creo que de alguna manera nos están inculpando de algo que no hemos hecho, pero buscaremos la manera de solucionarlo, no tienes que preocuparte.

- Yo siempre estoy preocupada por vosotros...- Aseguró la mujer dándose la vuelta para marcharse. - Te traeré algo de comer en un rato.

Carina salió del baño cuando escuchó que la puerta se cerraba, creía que era mejor no interrumpir la conversación pues parecía que la mujer mayor no se había dado cuenta de su presencia y prefería que siguiese siendo así.

- Ya tenemos forma de contactar con Jack.- Dijo Maya mirando a Carina y enseñándole el móvil que parecía bastante antiguo en su mano.

Al límite del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora