Amor instantáneo [Libro #2 Saga Destinos]

23. nuevos compañeros

RHETT

Avery consiguió llegar a casa antes que yo y cuando yo lo hice no quise ir a molestarla. Sabía que le había hablado de mala manera y no tenía derecho ninguno a ignorar su decisión de no querer hablar conmigo y su necesidad de quererme lejos de ella. A pesar de que llevamos una semana aquí todavía se siente raro vivir con Avery y no ver a  Grayson saliendo de la habitación que está frente a la mía. 

En cuanto a Grayson, parece que nuestra relación ha mejorado un poco. Nos llamamos algunas veces por semana y aunque al final no fui capaz de preguntarle sobre si ocurrió algo entre Ava y Ezra en el viaje él tampoco sacó el tema. Ninguno de nosotros habla sobre lo ocurrido. La mayor parte del tiempo hablo con Noora. La pequeña metiche que no se da cuenta de nada de lo que pasa a su alrededor. Tras terminar las prácticas le ofrecieron un contrato de un año en el hospital y no pensó dos veces en cogerlo a pesar de que su familia la echaba de menos y le suplicaba que volviese a casa. Ella sabía que su casa estaba donde estuviese Grayson así que se quedó allí. Me gustaría ir junto a Ashley a pasar un par de días en casa de esos dos pero sé que ahora mismo no es el momento, ya no solo por mi economía personal.

Puesto que Avery no quiere saber nada de mi enciendo la play para jugar un partido y pasar la tarde encerrado en mi habitación. Los entrenamientos no empiezan hasta la próxima semana así que la mitad de los chicos todavía no han llegado y los que ya están aquí tienen más confianza con Erza que conmigo. No me siento bien invitándolos a tomar una cerveza inventando alguna excusa de por que no ha venido Ezra. 

La puerta de casa se abre y escucho la voz del susodicho. Me pongo tenso. Parece que no viene solo. Una voz de un chico que no reconozco se escucha por toda la casa junto con el grito de Avery. Salgo corriendo de la habitación para ver que le ha ocurrido. La puerta de Avery está abierta. Ella mira con ojos asustados a los tres tipos que estamos frente a ella. Avery apenas lleva una pequeña toalla envolviendo su cuerpo.

—¿Quién eres y que haces aquí?—pregunta Ezra.

—Soy vuestra nueva compañera—Avery busca mi mirada.

Ezra, quien no se había dado cuenta de mi presencia, me mira por primera vez en meses.

—Él es nuestro nuevo compañero—señala al chico a quien reconozco como el nuevo novio de Ava. ¿De verdad es tan retorcido para hacer esto?

—No lo es—niego—Ella llegó primero.

—Deberías habérmelo consultado.

—Podría decir lo mismo—miro al chico de arriba a abajo.

El chico entra en la habitación sin importar que Avery esté dentro. Deja las maletas en el suelo.

—No me importa de quien haya sido el error—dice—Pero no pienso irme de aquí—se deja caer en la cama.

—¿Qué?—Avery grita—¿Estás jodiendome?

El chico mira a Avery de arriba a abajo.

—Aunque es algo que te gustaría, no jodo con vírgenes—su rostro se vuelve rosada y veo como la vergüenza recorre cada pulgada de su cuerpo.

—Suficiente—digo—Fuera de la habitación—tomo al chico de  la camiseta para sacarlo de allí pero él me empuja lejos. Tiene más fuerza de lo que parece.

—No vuelvas a tocarme—me amenaza.

—¿O qué?—doy un paso hacia el.

El chico se acerca a mi con una sonrisa de autosuficiencia en su rostro.

—Suficiente— Avery repite mis palabras—¿Podríais dejar que me vista y hablar esto como personas normales?

El chico y yo nos miramos y asentimos. Busco a Ezra quien ya no está en la habitación y parece ser ajeno a todo este drama. Sigo mi camino hasta el salón seguido del chico que se sienta frente a mi en el otro sofá. Mis piernas están abiertas, mis brazos sobre ellas con las manos unidas balanceándome hacia delante y hacia atrás. Ezra aparece en el salón con un par de cervezas. Le ofrece una al chico y otra se queda para él.