cinco | quizás nunca

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Capítulo cinco

Capítulo cinco

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16 de Julio.
Los Ángeles, California.

Alice se despertó lentamente, frotando el sueño de sus ojos y apagando la alarma que sonaba a su lado. 

6:45am. 

Sacando sus piernas de la cama se puso una sudadera para protegerse del aire frío en la casa de Nathan. Bajo las escaleras y se puso a hacer café, espiando un post-it rosa en el refrigerador cuando fue a tomar la crema.

Fui a la casa de James para la reunión. Después estaré en el estudio, así que trae a Char cuando salga de la escuela. 
Gracias de nuevo. 
Besos, N.

Alice sonrió ante la nota, Nathan era un encanto. 

Alice se estaba emocionando de llevar a Char al estudio con ella porque los chicos estaban grabando algunas partes de una nueva canción y la niña siempre tenía un buen rato con ellos. 

Char había estado yendo al estudio desde que era una niña; Nathan tenía una oreja cubierta por sus audífonos para escuchar la pista y una mano alimentando a una Char somnolienta en sus brazos mientras cantaba.

Los chicos anticiparon que tener un recién nacido sería un gran problema, pero en realidad resultó ser algo bueno. A los chicos les encantaba tener a Char en el estudio y se turnaban para entretenerla si Nathan realmente tenía que dejarla.

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Alice se preparó su taza de café y terminó de preparar el desayuno, que consistía en waffles, fresas y una taza de jugo. 

Regresó al piso de arriba para despertar a Char, al entrar en su habitación, vio su diminuta figura todavía se acurrucaba profundamente dormida en su cama. Alice sacudió ligeramente a la niña, apartando el pelo de su cara.

—Char, es hora de levantarse.

La niña se dio la vuelta y dejó escapar un profundo suspiro. Abrió los ojos lentamente y Alice le sonrió, alborotando su cabello. 

—¿Quieres elegir un atuendo antes o después del desayuno?

 —Después. 

—Muy bien, hay waffles esperándote abajo, vamos –Alice le frotó el brazo y tomó su mano, caminando con ella por las escaleras.

Después de que Char terminó su desayuno, se cambió y Alice la peinó dejándola decidir lo que quería y la niña eligió coletas para el día. Una vez que ella estuvo lista, Alice la detuvo en la puerta principal.

—Déjame enviarle a papá una foto tuya –dijo y la niña sonrió ampliamente, frunciendo los ojos. 

Alice le devolvió la sonrisa y le envió la foto a Nathan.

Ángel<3
foto enviada
Tenía que enviarte esto. 
Ella es la más linda.
 ¡Te veo luego!

Alice bloqueo su teléfono, metió a Char en el auto y comenzó a conducir hacia la escuela. 

Al llegar, se detuvo y la acompañó hasta la entrada. Alice saludo a la maestra de Char y se puso de cuclillas para hablarle a la niña.

—Está bien pequeña. Regresaré a las 11:30 para recogerte. ¡Que tengas un buen día! –dijo antes de besarle la frente.

—¡Adios Alice! 

Alice regresó a la casa de Nathan y para pasar el tiempo hasta las 11:30 se puso a leer el próximo manuscrito que tendría que editar.

Al hacerse la hora, Alice recogió a Char y condujo hasta el estudio, tratando de mantener al mínimo su rabia en la carretera hacia el tráfico de Los Ángeles. Al llegar, ayudó a Char a bajar del auto y tomó su mano para entrar. Saludando a la recepcionista ambas siguieron su camino hasta el estudio de los chicos.

Tan pronto como Alice abrió la puerta, Nathan vio a las dos desde el otro lado del vidrio y sonrió. Levantó un dedo diciéndole a Alice que esperara un minuto, pero John salió de inmediato.

—¡Mi Denari favorita está aquí! –gritó y levantó a la niña, haciéndola girar. 

—¡Tío Jo, detente! ¡Eso me hace cosquillas! –ella se rió y él hizo una pausa.

—Oh, ¿te refieres a esto? –él continuó haciéndole cosquillas en los costados y ella se rió hasta que no pudo respirar.

—¿Es Char o estoy escuchando cosas? –dijo Matthew mientras entraba al estudio.

—¡Estoy aquí! ¡Tío Matthew! –chilló ella y él la besó en la mejilla.

—Hola, calabaza. 

Alice se detuvo a un lado y miró a Char jugar con ellos hasta que Nathan finalmente salió.

—¡Estás aquí ángel! –sonrió y besó la mejilla de Alice. —Y ahí está mi chica.

Nathan levantó a Char y ella lo abrazó con fuerza, envolviendo sus pequeños brazos alrededor de su cuello.

James salió y saludó a todos, se paró junto a Dean, dándole un codazo en el costado. —¿Ves lo que estoy viendo? –sonrió.

Dean volvió su atención hacia Alice y Nathan, sonriendo y jugando con Char. 

—¿Cuándo finalmente le dirá que está enamorado de ella? –Dean dijo.

James suspiró. —No estoy seguro. Quizás nunca.









Hola, holaaa!!!

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Hola, holaaa!!!

Hacer a mis personajes simps >>>

La verdad que hoy no quería actualizar porque no se si alguien lee la historia pero bueno, ya fue no?

Nos leemos la semana que viene, rockstars!

Abrazo de oso,
Agosto.

Angel ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora