Capítulo 7

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Keanu tuvo que admitir para sus adentros que aquella situación era insostenible. ¿Cómo podría ocultar sus verdaderos sentimientos hacia River ante él? Y, ¿ante Jonathan? Pero sobre todo no podía seguir engañándose a sí mismo.

En el pasado lo había logrado con relativo éxito. Pero la presencia de River era mucho más poderosa. Sintió que estaba navegando directamente rumbo al triángulo de las Bermudas a una velocidad de vértigo.

Keanu llevó a River a la oscura habitación y lo acomodó en la cama. Escuchó cómo su ex mejor amigo cerraba la puerta principal al salir. Descalzó a River con cuidado y lo cubrió con el edredón. Salió del dormitorio y fue derecho a la cocina. Se sirvió una taza de café regada con un buen chorro de brandy.

Se quedó sentado en la minúscula cocina de su apartamento con la mirada fija en el contenido de la taza antes de ir a buscar su ordenador portátil. Era igual que un libro negro de pequeño formato.

Empezó a escribir nombres por orden alfabético. Keanu transfirió otros nombres a otro archivo titulado «Fiesta» con el mismo entusiasmo con el que habría anticipado un choque de trenes. Dicaprio.Deep ... Keanu hizo una pausa. Ese tipo tenía una mirada sospechosa. Borró el nombre. Wil Wheaton, en cambio, era un buen tipo. ¿Jerry O'Conell? Tenía su propia empresa, un par de perros y una auténtica familia...

Los padres de Keanu habían estado divorciados tres años. Se había traslado a vivir con su madre. River y Jane se habían mudado con su padre. A primera vista, Keanu había despreciado tanto a River como a Jane. River había sido un niño precoz, bastante alto y con una melena rubia similar a la crin de un caballo adulto. Irradiaba dulzura, tristeza y anticipaba un montón de problemas. Y lo peor de todo era que su padre lo había querido con toda su alma, al igual que Jonathan, pese a que fuera un muñequito. Y ahora estaba dispuesto a conseguir su trofeo. Keanu bebió un sorbo de la taza, avergonzado al comprobar cómo el torrente de recuerdos que acudía a su memoria reflejaba su más que dudoso comportamiento.

Tenía que reconocer que en aquella época ya era terriblemente celoso. Había sentido una secreta emoción cuando su padre le había anunciado, un año después, su inminente divorcio. Keanu había experimentado una inequívoca satisfacción. Nunca se había sentido cercano a la madre de River. El único punto negro había sido que Jane iba a abandonar a su pequeño. ¿Qué clase de mujer dejaría a su hijo de siete años al cuidado de su ex marido? Pero su padre se había mostrado encantado ante la perspectiva de cuidar de él y se había entregado a fondo. Keanu nunca había deseado un hermano, y menos aún, a él. Y se lo había hecho saber en más de una ocasión con toda la arrogancia propia de la juventud y sin la menor consideración hacia los sentimientos de River. Más adelante, había comprendido que el rubio solo había soñado con lo mismo que él. Había querido una familia, sentir el cariño de unos padres y un sitio en el mundo.

Keanu sintió el aguijón de la culpa mortificándolo nuevamente. La verdad era que se había comportado como un niño. También se había sentido abandonado y relegado a un segundo plano. A sus trece años, no se había preocupado por cómo se podría sentir aquella criatura.

Keanu continuó el repaso de la lista hasta llegar a la última letra. Dillon era el último. Aun eliminando todos aquellos que, por alguna razón, no estimaba adecuados quedaba una lista respetable. Apartó el ordenador, decidido a equilibrar la lista más adelante.

Escondió la cara entre sus manos. No quería dar una fiesta. No quería presentar a River a un hombre que no supiera cómo tratarlo. Ya había sufrido bastante a lo largo de los años. River necesitaba a alguien que lo quisiera y cuidara de el. Se levantó de golpe, tiró la silla hacia atrás y entró en el salón. Se había preparado la cama en el sofá. Se tumbó y apagó la luz. Sabía que tendría que tragarse sus sentimientos y ayudar a River a encontrar al hombre de sus sueños. Incluso si eso destrozaba su corazón.

My Own Private RiverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora