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La espera es tan abrumadora y más cuando la mujer que amas está preocupada por saber el resultado de lo que más quiere, cuando ella desea algo y no puedo lograr dárselo por más que quiera hacerlo.
La veo salir del baño algo intranquila y me acerco a ella con una sonrisa cálida, para poder sentarnos en la orilla de nuestra cama.
— Cariño, tengo miedo.— Ver su cara de preocupación hace que mi corazón duela al verla.
Tomo en mis manos el Test de embarazo que ella tiene en sus manos para poder observarlo primero, al verlo bien siento una gran desilusión del destino ante nosotros.
— Salió negativo otra vez, ¿Verdad?.— Observó el rostro con lágrimas de la mujer que amo, asiento para luego abrazarla y escuchar sus sollozos.— Lo siento, y-yo...
Duele, duele ver a la mujer que uno ama sufrir de esta forma.
— Cariño, tranquila... .— Acarició su cabeza para consolarla, aunque mi garganta duele al igual que mi pecho.— Prometo que todo estará bien, Cariño.
Es un tema sensible para los dos pero más para ella, desgraciadamente por todo el daño qué pasó en su infancia y más por lo del secuestró sufrió algunas secuelas, la doctora nos advirtió que sería demasiado difícil tener hijos. Si eso sucedía sería un gran milagro, porque gracias a los golpes que le daban dañaron por completo sus ovarios, útero y demás, por lo que la probabilidad que ella quedara embarazada era de un 2% de 100%.
Disfrute tanto torturando a ese maldito desgraciado, por todo lo que hizo sufrir a mi pequeña princesa, a mi pequeño angelito y todo lo que sufrí yo sin ella, lo hice pagar por todo y lo disfruté como nunca.
Hemos intentado demasiadas veces, este es como nuestro noveno test de embarazo en estos nueve meses. Ha sido demasiado difícil, yo le he dicho que no importa si no podemos tener a un hijo entre los dos ya tenemos a Noah, pero ella lo desea y no poder dárselo duele.
— Cariño, he pensado en algo para esto.— Ya se encuentra más calmada y así poder hablar del tema, ella se separa y me mira con sus ojos brillantes por las lágrimas.
— ¿En qué?.— Su voz sale suave y un poco cortada por su momento anterior.
— Se que no es como lo deseabas pero es una linda y hermosa opción, Cariño.— Tomos sus manos y beso cada una de ellas para luego observar sus ojos.— ¿Que piensas si adoptamos, Cariño?
Veo el brillo en sus ojos y la sorpresa que muestra su rostro, así que sigo hablando.
— He investigado bastante del tema, tenemos la mayoría de requisitos que se piden y quería saber cuál es tu opinión, por mi no hay ningún problema. Estamos casados, tenemos trabajos estables, bienes, casa propia y nuestros antecedentes están... .— ¡Carajo! Eso lo podré arreglar y todo saldrá bien.— Bueno eso es un tema que puedo arreglar y...