𝓢𝓸𝓵𝓪𝓶𝓮𝓷𝓽𝓮 𝓽𝓾𝔂𝓸. (+18) [02]

21|| En un grave problema II

— ¡Oh mierda!.— Es la única exclamación que sale de mis labios al darme cuenta de la persona que está amarrada ahí.— ¿Estás bien?

Solo gruñe y lágrimas salen de mis ojos, me acerco para poder ayudarlo y sacarlo de ahí, pero fue la peor decisión que pude haber tomado. Es como si fuera un maldito perro con rabia, al acercarme a él teniendo una ventaja de altura intenta morder mi rostro pero evitando eso coloco mi brazo derecho como escudo. Pero el grave error fue que me mordió sin importar nada, duele como la mierda y un grito de dolor sale de mis labios al igual que lágrimas.

Intento alcanzar un palo que estaba a mi izquierda no tan lejos, lo tomo y golpeó su cabeza débanlo inconsciente, sacó mi brazo derecho con cuidado de lastimarme aún más y lo observo. Por poco me saca un gran pedazo, reprimo mis sollozos de dolor y intento alejarme un poco, ¿Que mierda le hicieron?

Tomo mi arma y mi linterna con dificultad, ya que mi brazo derecho duele un montón, intento hablar con los chicos y no obtengo respuesta alguna. En eso resido un mensaje no deseado:

Desconocido

¿Te gusto mi sorpresa?
Debes portarte bien, pequeña Black.

— ¿¡QUE MIERDA QUIERES DE MI, HIJO DE PUTA!?.— Gritó desesperada, siento esas risas otra vez.

— Te quiero a ti.— Una voz robótica suena por todas partes haciendo que me estremezca.— Todo de ti, Pequeña Black.

— Todo de ti.— Vuelve a sonar esa voz, lágrimas se escapan de mis ojos y corro en dirección a la puerta cerrada. Me tropiezo con alguien y caigo haciendo que me golpee muy fuerte la cabeza, me maree y intento levantarme pero me caigo en el intento.

Mis ojos pesan, pero observo a una silueta mirarme desde arriba, se acerca y siento su respiración en mi cuello. Vuelvo a ser una maldito mar de lágrimas, mi cuerpo no responde y el tipo lo sabe, antes de caer en la oscuridad escucho su susurro.

— Presto sarai solo mio, Piccolino Black Pronto serás sólo mía, Pequeña Black.— Siento su acento italiano. Al caer inconsciente por unos minutos solo recuerdo sus últimas palabras.

Abro mis ojos y observo el lugar, me encuentro en la maldita bodega. Me levanto con cuidado y un gran dolor se siente en mi cabeza e brazo, veo que por culpa de Josh caí al suelo. Siento sus ronquidos desde aquí, ¡Maldito Idiota!

— ¡RICHARDS!.— Lo llamó haciendo que de un brinco y se levante de inmediato.

— Juro que yo no me comí ese pedazo de pastel... .— Su inocente mirada me dice que es una falsa, ahora se quien se comido mi trozo de pastel de chocolate. Pero eso no viene al caso, observo su cara que ahora muestra confusión y preocupación.— Un tipo me noqueó, ¿Esta bien?