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"Yo me esforcé..." Intentaste explicar.

"¡Pues no te esforzaste suficiente!" Exclamo tu madre.

"Yo-"

"Nos decepcionaste." Dijo tu padre. "Nosotros hacemos todo por ti, ¿y así nos pagas?" Empezaste a llorar.

"Lo siento. ¡No volverá a pasar lo prometo!"

"Lamentarlo no sirve de nada. Vete a tu habitación, no te quiero ver." Tu hiciste como se te ordeno. Lloraste hasta quedarte dormido, tú te habías esforzado, ¿Por qué no pueden verlo?

[...]

Te levantaste con las pocas fuerzas que tenías te levantaste por el sonido de tu celular.

"Mierda..." Pensaste, intentando parate sin levantar a los mellizos. Saliste de la habitación en silencio, no sabías cuanto habías dormido, pero no parecía tan tarde.

"¿Hola?" Susuraste alejandote de la habitación.

"T/N."

"¿Huh? ¿Miya?"

"Si, perdón la llamada de la nada...Solo, Amm, quería saber si todo esta bien, parecías preocupado en la escuela." Estabas sorprendido, ¿Miya se preocupo? Entendías qué se llevaban bien, pero no pensaste que fueras especial o algo así.

"Oh, amm, si estoy bien, solo unos problemas con Mio, pero todo bien." Se podría decir que ahora estabas despierto. "Gracias."

"No es nada." Miya sonaba sincero, era un lindo sentimiento saber que alguien se preocupaba, sin contar a tus familiares. "Solo quería chequear." Miya te regreso a la realidad. "Tengo práctica, nos vemos T/N."

"Esta bien, adiós gatito." Te despediste, Miya rodeo los ojos ante el apodo.

"Adiós." Colgó. Tu inconscientemente sonreiste. Puede que hayas agarrado confianza, al menos así era tu comportamiento cuando agarrabas confianza, lo que no era muy rápido.

"¿Era tu novio?" Preguntó Kira. Diste un pequeño saltó, al escucharla.

"¿Qué? No, ¿desde hace cuanto estas ahí?" Preguntaste.

"Suficiente para saber que era tu novio." Kira sonrió. "¿Estoy equivocade?"

"Miya no es mi novio." Respondiste.

"¿Cuando mencione a Miya?" Preguntó Kira. Elle camino hacia la habitación, en un rato seguramente se irían. Rodeaste los ojos.

Después de un esto, los mellizos se fueron, según sus padres ellos estaban en la biblioteca o algo así, sus padres no dejaban que se quedaran en la casa de otra persona sin importar fuera familiar o algo, siempre fue así. Ellos tenían una cierta hora para irse y regresar, tener padres estrictos no es fácil.

Te despediste y ambos se fueron, Mio tendría que ocultar sus sentimientos, al menos hasta en la noche. No es saludable, pero es mejor eso a que tus padres te regañen porque no estas en una edad adecuada para tener novia, y digo novia, ya que sus padres son homofobicos y no aceptaría a cualquier hijo homosexual, ellos mismo lo han dicho.

Fuiste a tu habitación te acostaste en la cama, te pusiste tus audífonos y empezaste a escuahr música y olvidar la realidad, la música te ayudaba a olvidar tus problemas, más bien estabas más ocupado pensando en escenarios imaginarios, pero te distraía.

"What if he wanst Ken not Barbie, why should he have to say sorry?..." Cantabas algunas partes de la canción. Esa canción, la escuchabas demasiado. "We can love who we want to..." Las canciones tristes eran relajantes y habían veces que te hacían llorar, pero es mejor llorar por una canción que por tus problemas familiares. "He always wanted Ken not Barbie, he never ever has to say sorry, nobody is gonna listen...to all the dumb shit you're slipping, we can love who we want to..."

Estuviste acostado escuchando música por un buen rato, pasaron más de al mitad de las canciones de tu playlist.

"¡T/N llegué!" Exclamó Reki. Eso te saco de tus pensamientos.

"¡Voy!" Exclamaste. Te sacaste los audífonos y te levantaste de la cama en camino a la sala, donde se encontraba Reki. "¿Como te fue?"

"¿Eh?" Reki estaba en la cocina, buscando algo de comer en el refrigerador.

"En tu cita, ¿como te fue en la cita con Langa?" Preguntaste. Reki sacó un refresco de la refri.

"Estuvo bien." Reki actuaba bastante normal, como si no fuera la gran cosa.

"¿bien? ¿Eso es todo?" Estabas indignado.

"No sabría que decirte, fue como una salida de amigos, pero con lindos nombres." Reki tenía las mejillas un poco rojas ante el último comentario.

"Ohh~ ¿Y que nombres te llamo?" Reki tenía las mejillas aun más rojas.

"Fueron lindos nombres, pero nada de otro mundo." Reki sonrió inconscientemente. "Cómo love, Reki my love, amor, mi vida..." Las mejillas se volvían cada vez más rojas, mientras nombraba los nombres que Langa lo llamaba. "¡¿Por qué te estoy diciendo esto?!" Reki se tapó la cara o intento disimular lo rojo que estaba, tu te empezaste a reír.

A fin de cuentas Reki se fue a su habitación y tu a la tuya, pero aprovechando que estabas en la cocina agarraste un bocadillo y fuiste a tu habitación.

Estuviste leyendo mangas y viendo animes, Masae llegó y con ella Tsuhiki, Nanaka y Chihiro, bajaste a ayudar con lagunas cosas y preguntar como les fue.

Al final la noche llegó, te acostaste a dormir despues de la cena y cepillarte los dientes, te acostaste a dormir de un solo porque tu celular estaba cargando y no tenías donde conectarlo cerca de la cama, así que decidiste intentar dormir, aunque te tardarías un rato por culpa de la insomnia.

Y como de costumbre empezaste a pensar en las cosas más vergonzosas de toda tu vida, en traumas, y dudar de tu sexualidad e identidad de género, pero esta vez tus pensamientos se centraron en Miya.

¿Desde cuando le importó?
Se que somos "amigos", pero ¿cuando fue el momento que le empeze a importar? No pudo ser de la noche a la mañana...

Agh, lo pienso demasiado, solo fue un lindo gesto de un amigo...

Oh solo se lleva contigo a fuerza porque Reki es tu primo.

No, osea puede- ¡no...! Ni que fuera un historia de amor o algo así, y si lo hiciera no debería sorprenderme. Igual se irían como todos los demás, si tuviera un monstruo debajo de mi cama se iría como todos los demás, asi que da igual.

¡¿Por qué mierda pienso en esto ahora?!

Agh, ¡Dios déjenme dormir en paz! ¡Malditos pensamientos intrusivos!

Después de insultarte y pensar cosas que no te servirían de nada, te quedaste dormido.

Dos DesconocidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora