mi amor de fuego y hielo -todoroki x tu

en el paseo

Narra todoroki

Habíamos acabado de cenar.

Quería llevar a ______ a un sitio. Me hacía ilusión. Me estaba aguantando las ganas de decirle lo perfecta que estaba. Decidí aguantarme hasta llegar al sitio que le quería llevar. Estabamos caminando a la luz de la luna. Todo estaba iluminado. Era brillante y su reflejo en el agua del mar lo era aún más.
Ibamos agarrados de la mano cuando me sonó el telefono. Habia recibido un mensaje de Izuku diciendome que esta noche dormía en otra habitación.

– ¿quién es?– preguntó _____ en un tono curioso.

– es Deku. Dice que esta noche no duerme en nuestra habitación. Oye ya de puestos, ¿por qué no vemos una película juntos?– pregunté. Ví como se lo pensaba pero acabó aceptando.

Ya habíamos llegado al sitio donde la quería llevar. Era un campo como al que fuimos el primer día. Solo que este tenía algo de especial. El árbol. Ese árbol alto con hojas blancas y rosas. Eso lo hacía especial. Tenía vistas al mar. Ella caminó hasta el pie del árbol y se sentó. Yo copié la acción. Iba a decirle lo perfecta que estaba y lo mucho que la quería cuando ella interrumpió mis pensamientos.

– me gustas.– dijo. Creo que era la primera vez que me hablaba en un tono tranquilo y no se había sonrojado. Se me quedó mirando unos instantes esperando a que dijera algo.

– tú también me gustas.– dije. Se sorprendió un poco al escucharme pero no dijo nada. Solo se acercó más a mí. Cuando estuvo lo suficientemente cerca se apoyó en mi hombro y se acurrucó a mi lado. Yo pasé un brazó por encima de ella y la rodeé con mis brazos intentando proporcionarle seguridad y cariño. Me miraba fijamente a los ojos parecía que me estaba escaneando. Quería besarla y probablemente ella a mí también. No me lo pude pensar dos veces y la besé.

Narra ______

El beso era lento, cálido y tierno. No era nada de otro mundo solo que él me besó. Sus labios eran suaves. Estuvimos unos segundos con los labios pegados hasta que los separé.

-Vámonos a tú habitación. Allí podremos seguir esto y ver la película. - Él asintió. Al ponerme de pie me empecé a marear. Me apoyé en el árbol. Shoto notó que no le seguía y se volvió rapido hacia mí.

– ¿te encuentras bien?– preguntó preocupado.

– me estoy mareando, nada preocupante. Debo de haberme levantado muy deprisa. – le contesté.

Él no se quedó mucho más tranquilo.

Quise dar un paso, pero caí al suelo desmallada. No recuerdo nada mas. Solo recuerdo aparecer en mi habitación. O eso creí yo.