¿Quien es?

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Algunos años después

Un día normal.

Narra Camus.

Hoy vine de visita a casa de mis padres, dato graciosos, mí madre me pidió que le ayudara a bajar un montón de cosas que ya no necesitaría al sótano de la casa. Yo vine de visita no para que me tratarán de esclavo... En fin, mí padre trabaja en la empresa que creo con mí tío Deuteros, la cuál es una empresa de de robótica, dónde se crean los mejores robots ayudantes más útiles de todo él planeta, ya que mí padre se a encargado de crear un robot asistente el cuál te ayudará a hacer cualquier tarea sin que tú tengas que mover un dedo, pero para mí desgracia, apesar de ser su hijo...

¡Jamás me a dado uno >:v!

Lo cual yo siento muy injusto, yo debería ser el consentido, pero no... Se encargan sólo de mimar a mis hermanos menores Hyoga eh Isaac, cuando llegue abajo, solté de golpe las malditas cajas y me senté en el sillón que ahí había mientras suspiraba cansado.

Camus: ¿Porque son tan crueles conmigo? - dijo dramáticamente mientras se recostaba y extendía sus brazos, pero sé dió cuenta que tiró un libro así que se levantó y lo recogió, pero al abrir él libro sé dió cuenta de que tenía una llave, curioso la sacó de dónde estaba y la vió por breves momentos para después comenzar a buscar él cerrojo de la llave.

En otra parte.

Deuteros sé encontraba dando vueltas en su lugar, exigiéndole a Kardia respuestas sobre su proyecto, del cual aún no tenían buenos resultados.

Deuteros: Kardia, necesitamos resultados, oh si no, todo esto será un gran fracasó - comento dando vueltas en su lugar.

Kardia: ya te dije que hago lo que puedo, pero simplemente él programa aún está teniendo fallas - dijo ya aburrido.

Deuteros: ¿Cómo que "simplemente sigue teniendo fallas"?, Kardia lo necesitamos ya... Oh sí no, ¡Esa porquería no nos servirá para nada! - alzó la voz molesto mientras se iba y de un sólo golpe cerró la puerta, mientras Kardia suspiraba cansado.

Con Camus.

Había logrado encontrar una pequeña cerradura detrás de uno de los libreros dónde puso la pequeña llave, la giró y la pared sé movió dejando ver algo que hizo retroceder a Camus mientras se tapaba la boca y gritar...

Camus: ¡¡¡UN CADÁVER!!! - gritó asustado, mientras veía el "cuerpo" del  jóven - ¡Yo no hice nada, juro que yo no hice nada! - dijo asustado mientras se escondía detrás el sillón, después asomó un poco su cabeza y otra vez sé acercó - ¿Pero quién es él? - sé pregunto mientras lo veía.

Pasó así unos minutos, después vió hacia todos lados y sé acercó más, notó que no era una persona, tranquilo suspiró, pero sé preguntaba, ¿Qué hacía un robot escondido en las paredes?, Por mucho que lo pensaba no encontraba explicación, su padre no podía ser ya que todos sus proyectos estaban en la empresa y no sabía de dónde hubiera podido el sacar un modeló tan lindo para crear una belleza física de ese estilo así que llegó a la conclusión de...

Camus: bueno, la verdad se ve bastante nuevo y no puedo dejarle a mí madre aquí basura ¿Verdad?, Y tampoco puedo llevarlo al basurero porque al momento de destruirlo haría mucho dióxido de carbono, lo cuál causaría que se dañará más la capa de ozono, así que yo me lo llevaré, total nadie va a extrañarlo - dijo para después acercarse y tomar al robot, se dió cuenta de una cosa y esa era... - por dios, apesar de que es más pequeño de tamaño que yo pesa mucho.

Comento mientras a esfuerzos lo llevaba a su auto, cuando por fin lo logró lo dejo en los asientos de atrás para seguidamente regresar a cerrar la puerta y vaya que lo hizo porque en ese instante su madre había decendido para buscarlo.

Dégel: ¿Camus? - le llamo mientras bajaba, Camus rápidamente se volteo, escondiendo la llave en su espalda.

Camus: Ho-hola mamá - respondió al llamado nervioso.

Dégel: cómo ví que no subías vine a ver si te sucedía algo, ya llevas mucho tiempo aquí y sabes que a tú padre no le gusta que estés aquí - comento parando de caminar justo en frente de su primogénito.

Camus: lamento mucho él haberte hecho bajar por nada mamá, ahora mismo iba a subir pero la cuestión es que me quedé viendo un poco todo lo que hay en él sótano, no puedo creer que acomodamos tanta basura - dijo mientras sonreía nervioso.

Dégel: eso lo hablaras con tú padre después, ahora vamos que hay que ir a servir la co... - él sonido de los platos caerse al suelo proveniente de arriba lo interrumpió - ¿Que pasó? - se preguntó preocupado al momento que comenzó a subir.

Camus aprovecho está distracción para dejar la llave dónde la había encontrado y también comenzo a subir corriendo las gradas, al llegar arriba y acercarse al comedor pudo ver a sus hermanos menores recogiendo los platos rotos, mientras su madre los veía molesto y con una chancla en la mano, con la cuál los amenazaba.

Dégel: no van a levantarse de ahí, hasta que me recojan hasta él último cristal - decía molesto, de brazos cruzados y amenazándolos con la legendaria y siempre temida chancla.

Isaac: ¿Y porque tengo que recogerlo yo si él que boto los platos fue él bruto de Hyoga? - pregunto molesto.

Dégel: Porque yo lo ordenó - dijo simple.

Isaac: Pe... - Dégel le dedicó una mirada asesina, haciendo al menor temblar del miedo.

Dégel: Nada de Peros... Isaac, yo soy tú madre y por lo tanto tienes que obedecer me - sentenció molesto mientras les amenazaba con aquella arma mortal.

Hyoga/Isaac: ¡Ahora lo levantamos! - respondieron con miedo, para después empezar a recoger todo rápidamente para después jalar él bote de basura, echar todo ahí rápidamente y salir corriendo de la vista de su progenitor, que orgulloso por saber que sus demonios todavía le tenían miedo a su poderosa chancla se la volvió a colocar mientras que Camus se comenzó a reír mientras llevaba nuevos platos.

Continuará...

Él Proyecto Venganza [Camus X Milo Oh Milo X Camus ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora