¹𝑴𝒆𝒎𝒐𝒓𝒊𝒂 𝒂 𝒄𝒐𝒓𝒕𝒐 𝒑𝒍𝒂𝒛𝒐||𝐀𝐔 𝐀𝐃𝐑𝐈𝐍𝐄𝐓𝐓𝐄

•|ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 19|•

Narra Lila

Observé como Marinette copiaba lo del pizarrón en su libreta, alcé mi ceja, era tan... básica y no tenía nada que Adrien pudiera verle.

¿Porqué debía importarle tanto? Era una estupidez.

—Vamos a almorzar juntos de nuevo,¿Verdad? — pregunté jugando con un mechón de mi cabello.

Adrien asintió y yo sonreí, pronto lo tendría comiendo de la palma de mi mano y nadie podría quitarmelo, nisiquiera aquella que se hacía llamar su mejor amiga.

Tenía un plan, iba a funcionar; lo sabía.

—Adrien...— escuché que dijo aquella mientras guardaba sus cosas en su mochila, este la miró de inmediato sin embargo no la recordaba o eso era lo que yo pensaba.

—¿Hoy también estudiarán química? — preguntó y yo asentí. Adrien solo la miró — Comprendo... lo que pasa es que ya no me resulta divertido tener que almorzar sola en la biblioteca, estoy acostumbrada a almorzar contigo...— mencionó haciendo una mueca.

—¿Conmigo? —dijo el muy confundido.

—¡Oh lo siento! ¡Se me olvidó! — dijo de repente ella y sonrió.

Tenía que admitirlo, aquella sonrisa acompañada con unos braquets hacían mucha diferencia... lucía linda y eso en parte me alteraba porque podría lucir de igual forma para Adrien.

—Soy Marinette, tu mejor...— la interrumpí.

Si quería que mi plan empezara bien, debía evitar esto a toda costa.

—Disculpa, debemos irnos... el examen de química es esta semana y realmente no puedo reprobar — di una excusa tonta y ella abrió su boca.

—Oh, Lila no tienes que preocuparte... seguro vas a pasar, eres muy inteligente — sonrió a mi parecer muy sincera.

Demasiado sincera que incluso me sentí rara pero no me importaba..

—Debemos irnos...— dije y jalé el brazo de este para ir hacia a la salida del aula.

—¡Adios chicos! — se escuchó la despedida de aquella.

Caminé junto a Adrien, había entrelazado nuestras manos, debía admitirlo, esto se sentía demasiado bien... El era simplemente la persona más genial que nunca había conocido.

—¿Quien era esa chica? — preguntó y yo reí.

—¿Quieres manzana o fresas? — dije cambiando el tema.

Adrien debía pensar en lo más mínimo posible acerca de ella. Pronto recordé sus dispositivos, estos le avisarían si mal no recuerdo cada 30 minutos.

—Adri, debo hablar con mi madre pero he dejado mi celular en mi casa ¿Puedes prestarme el tuyo? — pregunté inocente y el de inmediato asintió.

Sacó este y me lo pasó a lo que yo hice una pequeña sonrisa para luego alejarme un poco.

Busqué entre sus recordatorios.

Habían más de 100 veces para que este le recordara sobre el casting. ¿Como era posible?... aquella chica si que no valía la pena.

"Casting de Marinette, No olvidar"

Se leía en la pantalla con letras pronunciantes. Deslicé el botón y este de inmediato se apagó desconfigurand todos los dispositivos que estuvieran conectados a este.

Ahora seguía sus dichosos post its, había visto en su libreta varios recordatorios, era tan frustrante todo esto.

Volví a dónde estaba el y devolví el celular, este lo tomó sin mucha importancia.

Los próximos minutos, solo estuvimos platicando y haciendo ejercicios de química, Adrien era muy bueno en esta materia pero seguía sin entender porqué, ¿Como era que se olvidaba de las cosas o de las de personas pero no de química?

—Oh, vamos... es hora de volver al salón — sonrio y guardo sus cosas, observé como tomaba aquella libreta y la metía a su mochila.

Esa era la clave.

Regresamos al pasillo pero el habló.

—Tengo que ir al baño, ¿Te alcanzo en el salón está bien? — dijo y yo asentí. Al notar como iba a entrar con su mochila rápidamente lo tomé del brazo.

—Si quieres puedo llevar tu mochila...— ofrecí y este se encogió de hombros para luego posteriormente darmela.

El entró y yo retrocedí para alejarme un poco, abrí el cierre de la mochila y busqué entre sus cosas aquella maldita libreta.

—Aquí estás...— susurré y mordí mi labio.

Observé alrededor, nadie se encontraba en el pasillo más que un chico quien estaba en su casillero con rizos pronunciados. Sin más, cerré la mochila de Adri y guardé aquella libreta entre mis cosas.

Una vez hecho esto, caminé hacia a el salón.

—Hola Lila — saludó Marinette.

—Hey — devolví sin importancia y me senté en mi lugar. Aquella se encogió de hombros y miró hacia a la puerta. Sabía que esperaba a Adrien.

—¿Dónde está Adrien?... siempre viene contigo y tienes su mochila — preguntó.

—Dijo que debía ir al baño, me ofrecí para traer su mochila... no te preocupes — dije alzando mi ceja y ella asintió para luego volver a lo suyo.

Ella en serio se preocupaba por el, pero ese no era mi problema. Mi problema y objetivo ahora mismo era el de estar con Adrien Agreste sin interrupción de nadie.

¡DE NADIE!

Nisiquiere de aquella enana de 14 años quien esperaba atentamente a que su "mejor amigo" llegara.

—Hey, Adri...— llamó esta cuando entró. Este se sentó y la míro — No te vayas a olvidar de eso, sabes que es muy importante para mi...— dijo y sin más se dió vuelta ya que aquellos 2 se sentaba uno tras el otro.

Lo observé, su mirada de confusión demostraba que no entendía nada. Sonreí y lo próximo que hice fue mirar al pizarrón.

Todo estaba listo.

Nada, absolutamente nada iba a salir mal el día de hoy. Ella debía entenderlo por más que le doliera...

Adrien me escogería a mi por sobre todas las cosas. Lo cual, se sentía realmente bien, esos eran avances muy comprometedores. Demasiado y si tenía que seguir alejando a sus amigos para que al fin pudieramos estar juntos lo haría.

Maldita sea, lo haría con tal de todo.

De TODO.

Lo haría con tal de estar con aquel perfecto chico de ojos verdes, grandes y relucientes

Lo cual no debería de presumir pero brillaban al verme. Un claro ejemplo de que mi belleza no podía compararse con nadie.

Nisiquiera con ella.

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¡Uff! Tremendo capítulo
Supongo que ya se imaginan lo que pasará, es algo obvio y triste :(

Quiero que noten muy bien este capítulo porque les servirá en un futuro 😉

Me dicen si ven alguna falla ortografíca.

Espero les haya gustado, si es así denle estrella y síganme si no lo han hechoღ