(¡EN EDICIÓN!)
Namjoon y Jin no esperaban tener tanto chamaco, pero a final de cuentas así pasó. Una familia divertida, desastrosa, numerosa, inigualable y, sobre todo, amorosa.
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- ¡Hyung! – exclamó con emoción y una gran sonrisa, no dudó en salir corriendo hacia aquel chico que le daba vueltas a su corazón y mente.
- Kookie... - no pudo hablar.
Jungkook le había saltado, enrollando sus piernas a la cintura del mayor, por reflejo, Taehyung lo agarró fuerte y colocó sus brazos bajo el trasero de Jungkook.
- ¿No es una imaginación y no estoy en el suelo imaginando abrazarte cuando sólo estoy tirado en él? – preguntó emocionado.
- Jungkook, estás abrazando un árbol. – bromeó el chico que iba desde Seúl.
- No lo puedo creer, – murmuró contra el cuello de su hyung, eso ocasionó cosquillas al nombrado. - ¿me viste anotar esos goles? – preguntó, esta vez, mirándolo a los ojos.
Taehyung sonrió y asintió, carajo, los ojos de su menor lo hipnotizaban, brillaban tan lindo por la emoción.
- ¡Se me cayó un ídolo! – gritó el entrenador.
Seokjin y Namjoon ya le iban a decir hasta de qué se iba a morir, pensando que lo decía de una forma homofóbica o algo así, pero fue todo lo contrario.
Vieron que Junhoe le entregó dinero a Chan y el entrenador le entregaba la misma cantidad.
- Les dije que era Bottom. – habló con orgullo el australiano.
Jungkook los miró mal, pero no le importó tanto, ¡su hyung había ido a verlo!
- Todos mis goles fueron para ti. – comentó con timidez.
- Eres tan lindo. – apretó suavemente la mejilla de su menor, hacía unos segundos lo había bajado y los dos se encontraban al lado del otro.
- Nos vemos el lunes. – se despidió Donghyuk, en nombre del equipo, de Kook.
- Te guardaremos pizza con lágrimas de felicidad. – bromeó Junhoe, el de rulos le dio un golpe en el brazo.
Jungkook ya se había dado una ducha en casa de los abuelos, en ese momento habían aprovechado para que Tae dejara sus cosas en la habitación del menor, bajaron entre risas.
Taehyung pidió permiso a los papás Kim, para poder llevarse a cenar a Jungkook, Jin y Nam aceptaron, con la condición de que no llegaran tan tarde a casa.
