Capítulo 14

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Deva

No quería levantarme de la cama, estaba agotada, desanimada y el médico me dijo que debía alejarme lo más posible de cualquier cosa que me causara estrés, pero estaba hasta cansada de hacer nada. Estaba harta.

♥︎

Tahiel

Tenía veintisiete años, dentro de un mes cumpliría veintiocho. Me sentía confundido, poco realizado, mis amigos, John y Dilan, estaban casados, tenían hijos pequeños y grandes carreras, mientras que yo, había aplazado la boda para octubre, estábamos a mayo, y la boda debió ser en marzo, no tenía hijos por los problemas de Deva y otros factores, y mi carrera era muy común: contador de una cadena de supermercados locales.

Deva aun no se levantaba, eran las diez am, ella solía levantarse alrededor de las siete u ocho de la mañana. Fui a mi cuarto y cerré la puerta; no quería hablar de nada con Dev, ya que las cosas últimamente eran bastante incómodas.

Pasó una hora.. tal vez dos, me dio hambre y me dirigí a la cocina, donde encontré a Deva.

— ¿Cómo estás? — Consultó ella antes de que yo lo hiciera.

— Emm... bien ¿Y tú?

— Bien — Su voz era fría y monótona.

Tomé algo de comida, antes de poder salir de la cocina, sentí como una mano pequeña — En comparación con las mías — tomaba mi mano derecha con delicadeza, volteé a ver a mi esposa y la solté despacio, pude notar como su ánimo bajo inmediatamente, dejé la comida en la mesa y fui hasta el sillón.

— Deva, ven por favor — Ella respondió a mi petición yendo hacía el living en ese momento.

— ¿Qué pasa?

— Acuéstate — Golpeé levemente mis piernas, ella se acostó y apoyó su cabecita en mis piernas, yo acaricié su cabeza y tomé su mano, me encanta estar con ella, cada segundo a su lado es perfecto.

— ¿Un mes?

— Sí, unos días antes del viaje. — Deva tenía que ir a la ciudad donde vivían sus hermanos para detalles de la boda.

— Te voy a extrañar.

— Yo también.

Ella se levantó y se sentó a mi lado, sus ojos castaños se posaron en mis ojos negros, pensé que diría algo, pero no fue así, solo me miró durante unos segundos, antes de estallar en risa.

— ¿Qué carajos? — Reí con ella; era la primera vez que la oía reír desde los últimos meses.

♥︎

— ¡Camina rápido tortuga! — Dijo John a la vez que empujaba a Dilan.

— ¡Cállate patán!

— Mejor cayense los dos ¿Quieren?

— Ajá — John rodó los ojos.

— ¿Qué te pasa Tahiel? — Dilan me miró y luego pateó una piedra — Has estado actuando raro desde hace unos meses...

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