Mi Pobre Amor [PeruxBoliviaxChile]

capitulo 2

Si, se que tengo poca experiencia y corta edad para esto, pero agarraré trabajo de lo que sea. El jefe no me quiso dar el trabajo, talvez, ¿por qué soy muy chico? ¿No se permite omegas? ¿O porque piensa que no puedo lidiar con la gente? Después de criar yo solo un bebé sin ayuda, domine algo llamado "paciencia"  Dejo a mi hijo algunas veces con la dueña de la casa, es que esta muy encariñado con él desde la primera vez que nos vio, de todos modos es una mujer y marido que viven solos así que seguro desean una pequeña compañía en casa. Aparte de cuidarme al bebé trato de ser puntual con la paga del alquiler ya que me hace un gran favor, y seguro gasta dinero cuidando de él.

Según ella es un niñito bien portado. Uf, como desearía que lo fuera conmigo.

- Así que tu ex hizo eso -dijo manejando pero se distrajo al recordar tal anecdota-

- Ja ¿por qué quieres hablar de ella? Es solo una mentirosa -dijo la acompañante femenina -

- No entiendo porque algunas personas se ponen feromonas para aparentar algo que no son.

- Dile a ella, viví casi un año engañada, ya se me hacía raro porque no quería que toque sus cosas

– Un año, es demasiado ‐doble a la vuelta de la esquina y ya estabamos en nuestro destino, bajamos del auto y entramos al restaurante-

- Uh, me hubieras dicho que venga más elegante, Chile

- ¿Qué? Vienes perfecta -sonreí y recorrí un poco la silla de nuestra mesa para que ella se siente, cuando lo hizo rodie la pequeña mesa para dos y me senté en mi lugar-

Estaba perdido viendo los ojos de mi acompañante y talvez novia después de esta cita, rápido nos atendió un camarero y nos dió los menus, no ví el rostro del mesero pero por alguna razón la sentí muy de cerca. Mi compañera empezo a citar lo que deseaba comer, y cuando fue mi momento mire al camarero y también ordene. Creía que acá había puras personas mayores, he venido acá unas cuantas veces y no recordaba la presencia de un menor en este tipo de restaurantes.

‐ ¿Algo de beber?

Deje que ella elija, y con eso termino de atender nuestras ordenes el mesero.

- Se me hizo raro que no anotara nada. -dije aún mirando al chico, junte mis manos y  entrelace mis dedos-

- Sii, ¿ya tendrá experiencia en este lugar? –también vi a su dirección-

- No estoy seguro.

El balbuceo de la gente me distrajo y la dulce voz de mi acompañante también, deje de pensar en un simple camarero y esperamos nuestra cena. Después de unos minutos mi mirada paseo por el lugar y nuevamente note un color rojo en particular, sirviendo una bebida en una mesa y mantenía una sonrisa calmada. Parece de 20, ¿o menos? Bueno quien sea.

- ¡Esto está horrible!

La piel se me puso de gallina y mire al hombre molesto limpiando su boca, por un momento mi mente de pobre quería agarrar la cuchara y probar que tenía de feo su comida porque desde que entré a este lugar mi barriga no deja de rugir de hambre. Tome su plato y le dije que traería otro

- (Ah, ¿por qué en mi primer día de trabajo recibo un grito? ) cheff. . .

- ¿que pasó?

- Dijo que la comida está horrible, creo que es la carne

El chef miro molesto al cocinero profesional del restaurante que agarró el plato y lo probó, su expresion al probar el platillo lo decia todo asi que el chef salió a disculparse con el cliente, me puse más nervioso y volvió a la cocina. Woh, crei que las series de cocina eran exagerados pero es como en la vida real, regaño al cocinero y también dijo que se vaya a disculpar, salí afuera de la cocina y me generó un poco de risa, afine mis labios para contener la risa y volví para que me den otra orden. Cuando termine de entregar el plato en especial ahora sí se veía más calmado el cliente y disfruto la comida, volví a recoger otros platos y dejarlos en la mesa que atendí anteriormente.

- Perdonen por tardar -saque de la bandeja sus platos de comida y vasos-

- Era que traigas el plato de ese señor a esta mesa, ya me moría de hambre, jaja.

‐ Ja, así es -me saque un poco el flequillo de mi rostro y mire al chico, Chile tenía razón, era muy joven-

- Mil disculpas de nuevo -sonreí leve  con un rubor en mis mejillas por la vergüenza-

El primer dia termino a las 10 p.m. saque dos bolsas de basura y las arrojé al tacho que estaba afuera de la puerta trasera del restaurante, mis compañeros de trabajo me dieron trabajo extra por ser nuevo, de seguro mañana me pondrán al limpiar los pisos. Guarde mi traje en mi casillero y la mayoria se fue temprano, teníamos un cambiador para los camareros, ya que salir de casa con tu traje de camarero es... vergonso. Este lugar quedaba lejos de donde yo vivía, así que creo que todas las noches desde ahora tendré que caminar, pero parece que hoy no sucedera eso. Sentí una luz atrás mío, mire un poco hacía atrás y un auto se me acercó, casi se me sale el alma al pensar que me robarían, sin embargo.

- ¿no es muy tarde para caminar?

Mire a los lados extrañado por esa pregunta y luego e ignore al extraño volviendo a caminar por la vereda.

-me rei un poco y emepce a conducir a la velocidad que el chico caminaba-  Hey, ¿No tienes miedo de que te roben? Te puedo llevar a casa

- Tengo más miedo de que supuestamente me lleves a casa -subí la capucha de mi buzo y guarde mis manos en los bolsillos-

- Pff, amigo, me atendiste hace unas horas, me viste con una hermosa chica y ahora te paresco peligroso?

-mire nuevamente al señor para recordarlo, y si, ya me acorde de él. Mire arriba y había una cámara de seguridad, si me pasa algo ya sabemos quien fue. Entre, me puse el cinturón de seguridad y tenía preparado un chisguete pequeño en mi bolsillo por si este acosador me hacía algo en ves de llevarme a casa-

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