Deje caer la cabeza sobre la banca de la cafeteria en la universidad donde esperaba a a Samuel, aunque no estaba seguro si iba a llegar, le habia dejado un texto pero no respondio y cuando intente llamar me mandaba a buzon. Dijo que el me contactaria pero los chicos se habian ido a casa y quedarme solo no era divertido.Tenia hambre y estaba cansado, la comida en casa casi se me terminaba y aun no encontraba el post it con mi cuenta bancaria.
Mis padres sabian que Uriel ya no vivia conmigo por razones completamente ajenas a las verdaderas, entonces decirles que me habia quedado sin trabajo y que necesitaba ayuda financiera seria como admitir que era un fracaso sin mi hermano.
Suspire por lo bajo y cerre los ojos intentando ignorar el ruido de mi estomago, pero entonces senti una mirada penetrante que por alguna razon me hizo sonreir.
- Si me miras tanto te vas a enamorar - Bromee levantandome a recibirlo.
- Estaba a punto de llamarte cuando me quede sin bateria, no soy mucho de telefonos. - Justifico ignorandome al tiempo en el que se sentaba al lado mio. - Me tome el atrevimiento de imprimir un contrato para que todo sea mas rapido y simple para ti - Agrego extendiendo frente a mi un conjunto de hojas y con un monton de texto y lineas que llenar.
- Oye son como diez hojas! - Me queje ojeando un poco el paquete frente a mi.
- Son trece, son clausulas basicas, si necesitas agregar o quitar algo no me importa, ahi viene tambien sobre costos y responsabilidades. Avisame cuando termines de leerlas y hacer los arreglos que creas convenientes - Alego deprisa mientras see levantaba de la mesa.
-¿ya te vas? - Cuestione tirando levemente de su sudadera, que fue lo primero que alcancé.
Samuel debatía con curiosidad la mirada entre mis ojos y el agarre con el que lo sostenía, entonces lo liberé.
- Solo iba a traernos algo de comer, te dije que comeríamos juntos. - Explicó vagamente acomodando su mochila sobre la banca. - ¿un sándwich está bien?
- Está perfecto! - Sonreí feliz. Y no estaba seguro de porque parte, si por la comida o por la compañía.
Samuel era raro, y no en un mal sentido, era diferente. Diferente en cuanto a personas que conocía, parecía ser molesto, incluso arrogante, pero desde que había comenzado a hablarle noté que solo era el exterior, que no le importara lo que pensaran y expresara su manera de pensar me parecía admirable, yo no podría aguantar las miradas que constantemente lanzaban contra él.
Me quede leyendo un poco los papeles, eran demasiadas cosas, conforme más leía más me daba cuenta de que esto era algo real, estaba pasando, iba a vivir con alguien.
Iba a vivir con Samuel.
El pelinegro regreso después de un rato con dos sándwiches con papas fritas y un par de bebidas.
En la carrera habíamos visto muchas veces cómo llenar un contrato y demás, pero nunca pensé que tendría que entregar uno para mi compañero de clase, mucho menos que sería fan cómodo como si lo conociera de tiempo atrás.
-Entonces mañana puedo ir a dejar un par de cosas, si te parece bien. - Finalizo firmando su nombre en la última de las hojas.
Apenas habíamos intercambiado palabra mientras comíamos, solo me preguntaba cosas básicas sobre el apartamento .
-Sip, si te parece bien hoy también estoy libre - Sonreí levantándome de la mesita metálica para poder estirarme. Aunque no hubiéramos hablado mucho, si habíamos pasado un buen rato ahí, lo noté cuando al parecer el sol estaba a nada de esconderse.
- Creo que es algo tarde, tengo que ir sacar copias- Chasqueó la lengua mientras guardaba los papeles en su mochila- Mañana te entregó la tuya.
- ¡Te acompaño! - Propuse animado.
No quería llegar a un apartamento vacío, ni siquiera podía dormir por pensamientos constantes en mi cabeza. - No tengo nada que hacer. - Justifique.
Realmente no estaba seguro de si no quería regresar o solo quería pasar un poco más de tiempo con él, no era malo querer conocerlo, después de todo íbamos a vivir juntos. ¿No?
- Se nota. - Me sonrío con burla. - Bien, vamos..
- ¡Ivan! - interrumpió Camila corriendo deprisa hacia nosotros.
-Hola Cami! - La recibí con una sonrisa.
- ¿Podemos hablar? No te quitaré mucho tiempo.
-Ah, lo siento, justo ahora yo..
- Nos vemos mañana Rodríguez. - Se despidió Sam agitando levemente la mano.
Debatí mi atención entre la chica frente a mi y el chico que se marchaba, Camila se veía realmente nerviosa. Suspire bajo y volví a sentarme para poder escucharla....
Azote la puerta molestó.
No había podido concentrarme en todo el día, ¿como era posible esto? Después de estar juntos tanto tiempo, luego de arruinar la relación con mi hermano, Sahara solo había llegado a la conclusión de que iba a esforzarse porque Ivan la perdonara .
¿En serio?
Tome mi mochila y salí deprisa directo al apartamento.
No. Las cosas no iban a terminar así, yo no iba a salir perdiendo todo y ella volver como si nada.
No me iba a quedar sin nada.
Yo no iba a quedar como el idiota al que desechan como basura.2022😱
Espero no haber perdido el toque.
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Root.
Novela Juvenil¿Qué pasa cuando confías tu sonrisa a las personas que consideras indispensables en tu vida? La historia gira en torno a Iván, un universitario que cree tener una vida plena, completa y feliz, sin embargo con el paso del tiempo se dará cuenta de que...