Las cosas se estaban torciendo más de lo que ya estaban en la casa de Doyoung. Su madre no estaba bien, últimamente parecía que nada le importaba. Y sabía muy bien que era por su padre, quien había llevado incluso a comer a casa varias veces a su ya oficial pareja.
No podía dejar que aquello siguiera así, por lo que, aprovechando que su madre estaba en el trabajo y su padre en casa, decidió hablar con él.
-Kibum, quiero hablar contigo- dijo captando la atención del hombre, el cual le miró confuso al escuchar como su hijo le había llamado por su nombre.
-Adelante, ¿De qué quieres hablar?- le preguntó incorporándose en el sofá.
Doyoung, algo nervioso e incómodo se sentó en el sofá un poco alejado de Kibum.
-¿Cuándo vas a mudarte?- le preguntó sin rodeos pillandole algo desprevenido al hombre.
-Bueno, Sooyoung regresará a su casa el próximo viernes, y me ha ofrecido ir a vivir con ella. Por lo que nos iremos con ella ese mismo día- dijo dejando ver una pequeña sonrisa en su rostro.
-¿Iremos?- preguntó confundido.
-Sí, tú, Sooyoung y yo- dijo viendo como la expresión de su hijo se volvía seria -Sé que Sooyoung no te cae muy bien, pero es una persona encantadora, ya lo verás- dijo viendo como su hijo seguía de igual modo.
-No lo entiendes para nada. El problema principal no es ella, eres tú- dijo viendo como su padre le miraba seriamente -No pienso ir contigo a ningúna parte. Solamente sigues aquí porque el juez te dejó más tiempo para recoger tus cosas e irte con algún familiar tuyo, comprar o alquilar una casa, o mudarte con alguien- dijo Doyoung sintiéndose liberado al decirle aquello.
-Por eso mismo he pedido tu custodia completa- dijo y Doyoung se tensó.
-No te la darán- dijo notando un terrible escalofrío por su cuello.
-Oh, claro que sí, porque tú les dirás que quieres vivir conmigo. De ese modo no le pasará nada a tu madre- dijo viendo como Doyoung le miraba enfadado.
-No te atrevas a hacerla nada de nuevo. Ya la has hecho pasar por mucho, déjala en paz- dijo advirtiéndole.
-Esa decisión queda en tus manos. Si vienes conmigo no le pasará nada, pero si decides quedarte aquí puedo asegurarte que nada bueno le pasará- dijo palmeando la cabeza de su hijo con una de sus manos para después levantarse del sofá y subir a su habitación.
Su propio padre acababa de amenazarle.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Doyoung le había comentado lo sucedido a su madre, la cual no podía creerse que hubiera compartido gran parte de su vida con Kibum, aquel hombre no era del que ella se había enamorado. Había cambiado, y desde luego ya no quería nada más de él.
-Mamá, prométeme que no dejarás que me lleve con él- dijo viendo como su madre fijaba la vista en la suya.
-No lo permitiré- dijo con lágrimas amenazando con salir de sus ojos.
Yerim estiró los brazos viendo como Doyoung se acercaba hacia ella para darle un abrazo.
Iban a salir adelante, desde luego.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
