Doña Antonella se nos va y es duro enfrentarnos a ello, don Luigi quiere regresar a Italia, y pasar sus últimos días en donde se conocieron, sabe que no puedo ir con ellos, no tengo papeles y sigo siendo menor de edad, la tristeza nos embarga a todos, pero debo ser fuerte, si no fuera por ellos, yo seguiría encerrado y mil cosas más me habrían pasado.
-Cuídate muchacho, no dejes que nadie te lastime.
-Usted cuide mucho a doña Antonella, los voy extrañar mucho.
Entre abrazos y lágrimas nos despedimos los tres, de verdad espero que doña Antonella se recupere y algún día volver a verlos.
ESTÁS LEYENDO
Diario de un Sumiso
Roman pour AdolescentsVoy creciendo y no ha sido fácil hacerlo, solo quisiera un poco de paz. Encontrar a alguien que no quiera lastimarme mientras voy de paso, en su vida. Este es mi Diario, uno donde existen páginas que quisiera borrar, para no haberlas vivido y otras...