El general renacido siempre se usa a sí mismo como sustituto.

Capítulo 19

Déjame tocarte.

Por la tarde, en el patio de Tiro y Equitación del palacio, a menudo en estas épocas, la lluvia comenzaba a caer. Sin embargo, el día de hoy era inusual porque el sol atravesaba las nubes y llegaba a calentar el cuerpo.

Gu Heyan estaba esperando solo en el pabellón de bambú en el patio de Tiro y Equitación mientras untaba cuidadosamente cera en la cuerda del arco. De repente, escuchó que lo llamaban con un "Shifu". Sabía que se acercaba Fu Ji'an y levantó la cabeza para encontrarse con él. Sin embargo, cuando vio a alguien venir junto a estudiante, su mano tembló violentamente y soltó la cuerda del arco, dejando marcas rojas.

"¡Shifu!" Fu Ji'an gritó y se acercó a trote. Mu Zhiming lo siguió hasta el pabellón, sonrió e hizo una reverencia a Gu Heyan: "Hermano Gu, no te he visto en mucho tiempo".

"Septimo príncipe". Gu Heyan inclinó la cabeza y saludó con voz débil: "...Hermano Mu".

"Escuché que el tamaño del patio de Tiro y Equitación del palacio era tan grande como un bosque de montaña. También escuché que el shifu del séptimo príncipe, era un joven que tenía artes marciales extraordinarias. No pude no sentir curiosidad, ¿te molestaría enseñarme un poco de tus habilidades?" Mu Zhiming sonrió e intercambió algunas palabras, halagando a Gu Heyan.

Inesperadamente, Gu Heyan respondió con indiferencia: "Hm".

Mu Zhiming: "..."

Fu Ji'an no esperaba que Gu Heyan respondiera así. Dijo sin rodeos: "Shifu, ¿escuchaste claramente a Mu gege? ¿Qué te molesta? Si no te molesta, no tienes por qué responder así".

Gu Heyan de repente salió de sus pensamientos, un poco aturdido.

Mu Zhiming dijo: "Vine sin ser invitado y fui grosero. Hermano Gu, no me culpes. Me iré ahora".

"No." Gu Heyan dijo: "No fuiste grosero". Parecía un poco molesto con sus palabras y después de un momento de silencio dijo: "Fue mi error... yo... yo no sabía que vendrías..."

A los oídos de Mu Zhiming, estas palabras aún sonaban como si lo sucedido fuese su culpa, y se disculpó nuevamente.

"Bueno, bueno, todo ha sido un malentendido". Fu Ji'an dijo: "Shifu, Mu gege dijo que también quería que le enseñases a usar el arco. Trabajaré duro hoy. ¡Estudiemos juntos!"

"Bueno, iré a la armería y conseguiré un arco y una flecha." Dijo Gu Heyan y se dio una vuelta para irse.

"Shifu." Fu Ji'an lo detuvo: "¡Deja estas cosas triviales a los eunucos!"

"No es problema. Vuelvo enseguida." Después de que Gu Heyan dijo esto, se apresuró a salir del pabellón de bambú, caminó y cuando ya estaba a cierta distancia, respiró hondo y exhaló nuevamente y luego se calmó.

En ese momento, Mu Zhiming inclinó la cabeza y le preguntó a Fu Ji'an: "¿Por lo general te habla con tanta frialdad?"

Fu Ji'an pensó por un momento y dijo: "Aunque Shifu normalmente no dice nada, no es tan frío. ¿Quizás está de mal humor hoy?"

Mu Zhiming suspiró y su corazón de repente se deprimió.

En poco tiempo, Gu Heyan tomó un arco y una flecha. Y sin muchas palabras, le entregó las armas y comenzó a enseñarles a preparar y a disparar con sus arcos.

"Apunta directamente, empuja y sostén el arco a la vez". Gu Heyan tomó su papel de Shifu muy en serio. Y cuando notaba un error, inmediatamente no mostraba piedad. Al ver que la postura de Fu Ji'an no era correcta, caminó hacia él y presionó vigorosamente su hombro para enderezarlo.